AÑO 12
Esta semana nos toca líos de bandas con…
>Bocchi the Rock! (CloverWorks, 2022, 12 CAPS)

Y no, no vamos a referenciar a grupos de otakus con navajas como son los Latin Kings, los Ñetas o La Patrulla Canina. Hoy vamos a tocar el tema de las bandas musicales.
La última vez que un anime de bandas cayó en el blog fue gracias a Given, una historia de superación, amistad y donde todo el mundo era gay. Sí, tú, yo, y hasta el cura del pueblo paseamos con hermosura según los guionistas de esa serie, aunque solo aparecían en pantalla los que podían tocar un instrumento musical. Gajes del oficio.
Sin embargo, ¿a qué se debe la visita de este anime? ¿Es que en CloverWorks están de oferta y sacan animes como churros? No os voy a decir que no, sobre todo teniendo en cuenta que mi método de selección para las series a analizar se basa en algoritmos muy complejos que ni siquiera la IA más potente del mundo puede adivinar. Pero tranquilos todos, que no me voy a llevar el secreto a la tumba. La respuesta es bien sencilla. Cuando analizo una serie, ésta me puede llevar hacia otra, ya sea por una cantante del opening, porque el estudio sacó años atrás una serie de la que desconocía su existencia o porque las páginas que clasifican las series me recomiendan similares. Tampoco me quiero olvidar de las páginas de
Así que hoy nos plantamos ante la realidad de encontrar, quizás, un motivo más para poder ver series animadas en Japón (y sucedáneos). O tener otra excusa para caer en las drogas más adulteradas hasta que nuestro hígado diga basta y acabemos acribillados a las puertas de un badulaque tras robar 25 euros de la caja y dos RedBull. En Twitter y foros son muchos los que alaban esta serie, pero como suele ser habitual, las opiniones y las valoraciones en webs como ANN me las paso por el forro del arco del triunfo. Ya sabemos qué resultados dieron las series en las que seguimos a rajatabla ese dictámen. Así que, sin más dilación, pasemos al turrón.
>Sinopsis
Gotou Hitori es una joven muy introvertida, tanto que le da ansiedad hablar con la gente. No os riáis, para ella es un tema muy serio. A otros les da ecoansiedad tirarse un pedo o recibir una llamada telefónica. No pasa nada, gilipollas hay en todas partes.

-Cuando la inseguridad te come por dentro-
Un buen día, la buena de Hitori estaba viendo la TV con su padre y descubrió en un programa de TV a una banda de música donde el guitarrista era como ella a su edad y la música le ayudó a mejorar y convertirse en lo que es. Así que, ante tal señal caída de los cielos, nuestra protagonista cogió la guitarra de su padre y empezó a aprender a tocarla.
Pasados varios años, hoy en día, Hitori ya está en la preparatoria (no, joder, otra serie de estas no). Quiere tener un poco (eh, no mucho, no es tan ambiciosa) de popularidad, así como un limitado grupo de seguidores. Aunque claro, la joven también tiene un canal en el YouTube de turno con miles de seguidores que admiran sus covers. Pero como podéis entender, Hitori no va desvelando su identidad como si fuera un superhéroe de pacotilla.
Sin embargo, ella tiene un anhelo, algo que, si le sigue haciendo caso a sus miedos y no sale de su zona de confort, no conseguirá.
>Guion, narrativa y tratamiento de personajes
¿Qué deseo oculto será? ¿Un affair con Carlos Baute? Con esa boca le deja la cuca más seca que la mojama. En este caso lo que la joven Hitori quiere es algo que a esas edades buscamos con ahínco: reconocimiento. En efecto, buscamos nuestro lugar en la sociedad, en el mundo que nos rodea, en el que conocemos. Queremos que nos recuerden, no caer en el olvido tras nuestro fallecimiento porque lo que el sentido de la vida nos ha enseñado (¿Qué? ¿Es que todavía no lo habéis descubierto?) es que todo se esfuerza por permanecer, luchando contra la entropía imperante que agotará energéticamente nuestro Universo.
Antiguamente, las aventuras de descubrimiento de nuevas tierras o la conquista al enemigo de sus pertenencias eran motivo más que suficiente como para que los más allegados te reconocieran como alguien de valor y que a las jóvenes se les abriese la mente para exprimirte en una alcoba a media noche. Luego, al final, uno se conforma con no cobrar menos de 1000€ y perder el menor pelo posible de la cabeza. Bueno, ya llegado el momento, alguno solo quiere lo del pelo. A mí esto último me da absolutamente igual. Como dice un tío mío "mientras se te ponga dura, da igual lo demás". Ya puedes ser un viejo de 70 años, que como tengas el ciruelo en condiciones, la vida se ve desde otro prisma.
Y así está la buena de Hitori, que gracias a la música empieza a replantearse cosas que antes casi no lo hacía o jamás pensó en que llegarían a su cabeza, para poder dudar de sus principios y que estos se tambaleen. Tengamos en cuenta que la protagonista tiene un pánico social extremo, por lo que prefiere morir desangrada antes que pronunciar una sola palabra a un desconocido en la calle para que la auxilie. Así que, ¿cómo podrá conseguir su objetivo? En ocasiones la ayuda viene de afuera.

-Ricky Martin aquel día-
Un buen día, guitarra a la espalda y decaída en el parque porque nadie le preguntó qué hacía con semejante armatoste colgado de los hombros, se encuentra con una joven de su edad que, desesperada, buscaba a alguien que no encontró. Sin embargo, al igual que en todo buen after, si entras es porque vas a buscar algo que no te hizo ni caso el resto de la noche. Si no lo entendéis, tranquilos que os lo detallo. Esta joven que le habla a la protagonista busca una guitarrista, pero no la buscaba a ella, sino a otra que decidió no aparecer en el compromiso que tenían: una pequeña actuación en un local de conciertos. Así, casi arrastras, Hitori se encuentra encima de un escenario, con algo que su interior pedía a gritos y que ella, por sí misma, jamás hubiera conseguido: una banda.
Como podéis prever, el concierto, no salió como esperaban, pero sí consiguió que germinase el fruto de la amistad para que la banda pudiera continuar. Y aquí es donde me quiero parar para ir desmenuzando la serie y enseñaros las tripas.
Bocchi the Rock! es una serie donde la amistad pesa por encima de todo lo demás. Una historia donde la superación de las fobias y las inseguridades están a la orden del día en cada capítulo. Todo ello aderezado con un buen humor, quizás algo repetitivo en algunos momentos, pero muy fresco en la mayoría.
La historia de Bocchi es la de una guitarrista con un gran talento cuyo pánico a interactuar le hace parecer un bicho raro a evitar y a marginar. No lo digo por mal, pero con la protagonista nos vamos a identificar mucho. Es tan introvertida que las historias que le pasan por la cabeza son un buen ejemplo de cómo nos sentimos aquellos a los que nos cuesta hablar con alguien a quien acabamos de conocer o, incluso, cuando conocemos a quienes nos rodean y empezamos con la fábrica de cine en nuestras neuronas. Montándonos una película que ya le gustaría a Christopher Nolan.
Aunque no estará sola en sus característicos viajes. Todas las integrantes del grupo tienen una cualidad que las distingue por completo y que son reflejo de las diferentes personalidades que nos hemos encontrado a lo largo de nuestra vida. Nijika es muy energética. Siempre está tirando del grupo para hacer ensayos o cualquier otra actividad relacionada con la banda. Ikuyo tiene el nivel de inteligencia de un funcionario medio, aunque con una agenda muy ocupada. Raro será el día en el que no tiene un compromiso. Además, su encanto personal deslumbra allá por dónde va, dejando en la sombra a quienes la acompañan. Ryou también es un caso especial. Introvertida, aunque por fortuna no tanto como Hitori, y muy calmada. Suele tener la costumbre de "olvidarse" de la cartera. Además, tiene conocimientos muy amplios de los grupos de música de la zona, por no mencionar de otros grupos y estilos diferentes a los que suele tocar el grupo.

-Cuando vas a tu primer casting porno y te pueden los nervios-
La narrativa de esta serie no difiere de otros animes que hayamos tenido en el blog. Con un comienzo algo lento y con cierta brusquedad, nos encontramos con un momento de calma mientras las aguas del río vuelven a su cauce, dejando el terreno preparado para que germinen las semillas que mencioné más arriba. Poco a poco irá subiendo de ritmo, pero no os esperéis algo súper emocionante. La serie prefiere quedarse en la comedia adolescente con momentos álgidos que brevemente se apagarán para volver al ritmo anterior. Y así continuará como si se tratase de un slice, mostrándonos que no solo de música vive el artista, sino también de una amistad que cada día se refuerza.
El final es algo que también trae recuerdos de los slice. Abierto como tu boca cuando te enteraste que tu pareja te puso los cuernos. Este final quizás nos deje mucho que desear, dejando entrever que la vida sigue como si nada, dando igual que nos hayamos muerto por el camino o que cogiesemos un desvío para no volver la mirada hacia atrás. Tendremos un punto de inflexión tras el clímax del comienzo del último capítulo, donde la narrativa volverá a su ritmo anterior dejando entrever que algunas cosas cambian, aunque no el trasfondo.
>Listado de personajes
>Gotou Hitori. Es la protagonista. Esta joven adolescente, con pánico social a interactuar, tiene unas dotes con la guitarra que asombran a sus semejantes, aunque ella no piensa que sea tan buena. Sus trabas a la hora de entablar una conversación no tan íntima con un allegado o mediar dos palabras siquiera con un desconocido le impedirán expresarse como debiera. Eso sí, nos divertiremos muchísimo con las películas que se monta.
>Ijichi Nijika. Es la líder del grupo y toca la batería. Su sueño es montar una banda de éxito y tocar en el local de su hermana, otra adicta a la música que dejó atrás los instrumentos para cuidarla. Nijika es perseverante y no parará hasta conseguir cumplir su sueño, aunque lleve años de esfuerzo. Sabe que la recompensa merecerá la pena.
>Kita Ikuyo. Es la diva del grupo, pero no por actitud, sino por el deslumbramiento de su personalidad. Tiene tanta energía y buenas vibraciones que dejará en la sombra a cualquiera de sus compañeras. Eso sí, sin querer.

-Habrá que preguntarle al cura-
>Yamada Ryou. La bajista. Ella es una dejada y aprovechada de cuidado. No tiene dinero para nada. Aunque para pedir siempre hay ocasión. Introvertida sin llegar a extremos, su tranquilidad se ganará el aprecio de muchos.
>Hiroi Kikuri. Bajista de otro grupo, se encontrará con Hitori en una de sus numerables resacas. Intentará ayudarla, aunque siempre en un permanente estado de alcoholemia preocupante. Eso sí, dándole al sake del barato, no vaya a ser que se arruine.
>Ijichi Seika. Es la hermana de Nijika. Dejó su banda de música para montar el local de conciertos y, quizás así, cumplir el sueño de su hermana pequeña. Puede parecer estricta y muy severa, pero en el fondo solo quiere ayudar a las chicas.
>Animación y sonido
A nivel de animación, nos vamos a encontrar un poco de todo. Si bien en la mayoría del metraje tendremos una calidad excelente en escenarios, aunque no tanto en personajes, con el paso de los minutos los gags convertirán esa calidad en algo anecdótico, con momentos donde el dibujo de Hitori, por ejemplo, decae a niveles preocupantes por el cambio de estilo gracias a las pajas mentales que se monta.
También tendremos otros momentos donde se notará (y ya os digo que a la legua) un copy&paste de fotografías a dibujo, pero no dibujado a mano por encima como en otros animes, sino con un filtro barato, dando una sensación de que algo no encaja como debería.
Eso sí, habrá momentos donde el enfoque y las cámaras darán un aire fresco al típico encuadre de animación al que solemos estar acostumbrados, como una cámara fija desde el mástil en los momentos donde las chicas toquen sobre un escenario.
El audio estará a buen nivel, no solo por las voces, sino también por los efectos sonoros. Tendremos una ambientación musical que varía entre rock, pop y estilo midi 8bits de videojuegos. Además, habrán numerosas canciones cantadas a mitad de serie, como debe ser. Eso sí, algunas veces sonará la misma canción. En cambio en otras tendremos nuevos temas.

-Y así, de repente, derriban la cuarta pared-
A nivel de opening y ending tendremos al mismo grupo: Kessoku Band. Son las seiyuu de esta serie y pondrán voz a todos los temas interpretados que aparezcan. Son los siguientes:
- OPENING: Seishun Complex (capítulos 1-7, 9-11)
- ENDINGS: Distortion!! (capítulos 1-3)
- Karakara (capítulos 4-7)
- Nani ga Warui (capítulos 8-11)
- Korogaru Iwa, Kimi ni Asa ga Furu (capítulos 12)
LA NOTA:
Y se acabó. Tampoco quiero alargar un análisis que he ido posponiendo con el tiempo porque quería batir el récord de rascada más épica de entrepierna. También porque me está doliendo la cabeza y quiero finiquitar este análisis de una vez por todas.
Bocchi the Rock! es una serie llamativa, con un montón de referencias por internet, pero que no va a ser el argumento que nos cambie la vida. Es una serie interesante que nos pone en la piel de una joven adolescente a la que le da miedo su vida futura, al igual que relacionarse con sus semejantes. Cosas de las inseguridades.
La historia no solo va de música y de uno de tantos grupos musicales que se montan en el mundo. La historia trata sobre cómo llevar las fobias y manías para poder salir a flote y, quizás, triunfar. Aunque lo importante es el camino que se hace, no el destino y el premio que se consiga al llegar. Básicamente porque el premio importante se consigue caminando o, en esta ocasión, interactuando: los amigos. Da igual que llueva, nieve o haga sol, si tienes un pequeño grupo de amigos de confianza no importa qué suceda, ellos estarán ahí contigo al igual que tú con ellos. De eso se trata.
Técnicamente está bien, aunque me echa para atrás tanta adaptación filtrada de las fotografías que se hayan sacado a los paisajes, tiendas o calles. Vale que no tengas tiempo para hacer un dibujo con calidad o que a los dibujantes se les haya hinchado el arco del triunfo de tanto abuso laboral y de horas mal pagadas. Si se ha de tardar más, se tarda. Si no sabes planificar, jódete y asume las consecuencias. Si queremos ver anime, exigimos anime, no calcos con filtros gratuitos del Instagram.
Sin embargo, las notas que damos aquí, en este blog, no están influenciadas por la técnica, sino por la calidad de la narrativa, el guion y sus personajes (y cómo están gestionados en la historia). Por todo esto, Bocchi the Rock! alcanza la B en nuestro sistema de valoraciones.

0 Comentarios