AÑO 1
Esta semana preparad el contador geiger porque nos adentraremos de lleno en un mundo 'vacío' de humanidad con...
De parte de un estudio poco conocido como GoHands, nos llega este anime postapocalíptico basado en la tragedia de Chernobyl. Hay quien pensará que también se inspiró en la de Fukushima, pero ésta última sucedió tres años después de la venta del manga. Dudo mucho que el autor tenga una bola de cristal. Aún así, este estudio fundado en 2008 tiene muy pocas obras en su haber, pero algunas son tan 'conocidas' como Princess Lover!, K o Mardock Scramble, éstas dos últimas analizadas en el blog.
Centrándonos en el anime que nos toca, lo primero que nos llamará la atención son los magníficos paisajes que abundan en la serie, desde el principio hasta el final de la misma. Ya hablamos del dibujo de Coppelion cuando analizamos hace meses Viaje a Agarta. No exagero cuando la gama de colores, el detalle y, sobre todo, el movimiento en los mismos es de sobresaliente. Desde luego que se esmeraron en crear unos escenarios lo más realistas posibles y, claro está, consiguieron dicho efecto. Aún así, hay un detalle primordial que a nadie dejará indiferente; me refiero al diseño de los personajes.
Si en los paisajes el realismo nos inundaba, con los personajes... bueno, han dado un toque de contraste. Quizás los dibujantes se tiraron horas jugando al Paper Mario y he aquí el resultado de tanto vicio: personajes planos, pero sin llegar al extremo. Además, los colores no son como nos los imaginaríamos. Me explico. En los personajes se notará mucho un apagado de los colores, no llegará al punto de ser en del blanco y negro, pero sí en tonos menos saturados que en el entorno. Aún así, han seguido los pasos de Matrix en el cómputo global, pero también optando en ocasiones por otros colores.
Pero no sólo de estética vive Coppelion, intentaron empinar el codo con el argumento. Y lo de empinar va con triple significado de palabra:
Primera acepción: mismo significado que 'inspirarse'. Han querido otorgar una historia peculiar a este pobre mundo sin ideas en las series o películas. Consiguieron que me interesase realmente tras ver la sinopsis: tres chicas modificadas genéticamente se encargan de rescatar a los supervivientes de un holocausto nuclear en la ciudad de Tokyo. Dichas muchachas tienen la peculiaridad de ser hiperresistentes a la radiactividad. Además, le otorgaron enseñanzas y extras únicos a cada una de ellas. La historia, en principio, promete.
Segunda acepción: mismo significado que beber o tomar (bebidas alcohólicas) y su consecuencia: confiarse. Pero no todo van a ser buenas noticias. Desconozco si fue debido a la poca duración de la serie (recordemos que solo duró unos 13 episodios) o si pensaron que con una historia sin desarrollar bastaba si se le añadía un buen dibujo, pero no dotaron de peso al guión. Básicamente tenemos una historia principal con una ínfima cantidad de historias secundarias, además de hilos sin completar o concretar, vamos, falta de coherencia interna en algunas situaciones. Inclusive, se nota que los personajes no tienen una personalidad marcada y son muy generalistas. Es difícil identificarse con uno.
Tercera acepción (evolución de la anterior): rabear o el síndrome de la última copa. Ejemplo: lo que me hizo daño anoche fue el último combinado/cubata y no los 14 anteriores que me había tomado, en los que estaba 'bien'. Pues eso, uno piensa que está perfectamente, que es un ligón, un gran orador o Superman detrás del elefante rosa; pero la lista de gazapos es tan grande que me cansé de anotar en mitad de la serie: un bombardeo B2 que se identifica con un cuervo gigante, pájaros volando a velocidades muy elevadas, bazookas con munición “ilimitada” o con proyectiles más grandes que el propio lanzador, tener un paro cardíaco y seguir chorreando sangre, volver a sitios en los que no estuvo un personaje nunca, munición ultra-defectuosa, etc, etc, etc. Dejo sólo un detalle, la maravillosa actuación dramática de Aoi (y no es la de las galletas):
Para mí es la gran decepción de la serie, este guión no consigue enganchar tras el desarrollo inicial de la historia. Creo que algo tiene que ver, tal y como dije antes, la poca duración de la misma. Quizás 13 episodios no sean lo suficiente como para desenvolverse y poder mostrar en profundidad a los personajes y a la historia como se merecen. Espero que en una plausible segunda temporada corrijan los fallos más clamorosos, si es que se animan a hacerla. La historia tiene chicha y me da pena que la echen a perder de tal forma.
Los sonidos de ambiente están cuando van a aparecer en la escena, pero no se oirá nada a mayores. Este hecho dará más aislamiento a una ciudad arrasada por la radiactividad. Consiguen que la catástrofe quede patente y nos entre también por los oídos. Los efectos en las voces también están logrados, con diferencias en las tonalidades según si hablan través de un traje o lo hacen por radio, por ejemplo.
En el apartado sonoro no aparecerán sorpresas desagradables, tampoco lo hacen para bien. Si la canción del opening inyecta energía con su ritmo rock gracias a Angela con su tema Angel, a pesar de la letra del estribillo, no lo hace así el resto de canciones en la serie. Normalmente no se notarán cuando estén, pero sí lo harán en caso de que faltasen. Sin embargo, en pocos momentos llegaremos a sentir un desfase de la escena con la música, como si no encajase bien. De los dos ending restantes también se encarga Angela, con Tooku Made como ending habitual y Bye Bye All Right como ending especial en el capítulo 13. Aquí os los dejo por orden de mención.
LA NOTA:
El proyecto de Coppelion tenía futuro, a pesar de lo apocalíptico de su historia. No obstante, los fallos en un punto importantísimo como es el guión lastran demasiado y acaban por dejar a este anime en un saco en el que, personalmente hablando, no debería estar. Técnicamente está muy bien y GoHands se mantuvo a la altura en este aspecto, pero necesitan cambiar de guionistas para dar el paso de alzar la historia y no intentar seguir el camino a Prometheus. Por todo ello se queda en una E.
2 Comentarios
Saludos
ResponderEliminarPues intente ver este anime hace unos momentos (a pesar de que lei tu reseña de este, le quise dar una oportunidad) y bueno es que solo me a durado hasta el capt 5, la verdad perdí el interés.
aunque me atrajo la idea de las chicas modificadas y que se la pasan en la ciudad irradiada, al verlas llevando trajes escolares y maletas deportivas me pareció el peor equipamiento para personal de "rescate" y me dije, para donde va la cosa!?, pero bueno seguí viéndola, sin embargo ya cuando empezaron los sucesos de acción, donde andaban persiguiendo a un avión furtivo y que ademas derribaron con un lanza misiles (convenientemente con varias cargas) y un ejercito dentro de una zona contaminada, pues de plano ya no me agrado la cosa. a ver si después la termino de ver, a ver que tal.
Hola MACC, ¿qué tal? Antes de nada, gracias por comentar.
EliminarNo quiero darte spoilers acerca del guión en los siguientes episodios, ya que cada uno tendrá sus propias opiniones, pero el dato objetivo está ahí: el lastre de esta serie son los personajes y la forma de tratar la historia/guión a lo largo de los 13 episodios. La falta de empatía es tan grande que lo único que se me ocurre como causa de esto es no había guionistas y el estudio tiró de un storyboard durante todos los capítulos. La pérdida de interés aquí es normal, así sucede también con otras muchas series de animación.
Igualmente me enganchó de inicio esa sinopsis de adolescentes modificados genéticamente para adentrarse en una zona radiactiva sin sufrir daños, pero ahí acabó la cosa, lamentablemente. Espero que haya una segunda temporada o un remake hecho tal y como se "tendría que hacer", como la adaptación de las OVAs iniciales de Aa! Megami-sama al formato de TV con la primera temporada. Solo el tiempo lo dirá.
Saludos.