AÑO 5
Desconozco si esto es algo que le ha pasado a alguien más o es una cosa mía, pero lo cierto es que en no pocas ocasiones me he topado con que, al intentar alcanzar / conseguir algo, esto me es imposible. Bien sea porque el producto que intento adquirir se me escapa de las manos o porque a la hora de obtener algo acabo dando más vueltas que un tonto y vuelvo a casa con las manos vacías. No obstante, esta "mala suerte" tiene una razón de ser, o al menos en una gran mayoría de las veces, ya que esto actúa como una barrera invisible que evita que caiga en una trampa o, como el caso que nos ocupa, que pierda el tiempo tontamente. Y es que en el día de hoy nos vamos a adentrar en un anime que, a pesar del interés que me había despertado en su día, se me había pasado debido al abandono del fansub que lo estaba publicando. Por lo que yo de vosotros me iría poniendo cómodo porque estamos a punto de adentrarnos en...
"La importancia de contar con un guion"
Estrenada el 2 de octubre de 2015, Heavy Object es un anime del archiconocido estudio J.C.Staff que viene a adaptar, a la pequeña pantalla, la serie de novelas ligeras escritas por Kazuma Kamachi e ilustradas por Ryo Nagi.
Con una trama que se asienta sobre los géneros de la acción, la comedia y la ciencia ficción, y teniendo en cuenta el hecho de que estamos ante una adaptación, parece claro que la labor del director Takashi Watanabe y el compositor de la serie Hiroyuki Yoshino no fue demasiado complicada. Sin embargo y como ya nos podemos imaginar por lo ocurrido con otras series analizadas, las alarmas saltan en cuanto, repasando el staff, llegamos a la parte del guion y nos damos cuenta de que éste fue elaborado por cuatro personas. Un numero que nos puede parecer indiferente hasta que lo juntamos con el del storyboard y descubrimos que en total han participado ni más ni menos que diecisiete personas. Llegando incluso a existir estudios de animación con menos personal que el que aquí se empleó para preparar la trama.
Con una trama que se asienta sobre los géneros de la acción, la comedia y la ciencia ficción, y teniendo en cuenta el hecho de que estamos ante una adaptación, parece claro que la labor del director Takashi Watanabe y el compositor de la serie Hiroyuki Yoshino no fue demasiado complicada. Sin embargo y como ya nos podemos imaginar por lo ocurrido con otras series analizadas, las alarmas saltan en cuanto, repasando el staff, llegamos a la parte del guion y nos damos cuenta de que éste fue elaborado por cuatro personas. Un numero que nos puede parecer indiferente hasta que lo juntamos con el del storyboard y descubrimos que en total han participado ni más ni menos que diecisiete personas. Llegando incluso a existir estudios de animación con menos personal que el que aquí se empleó para preparar la trama.
Pero como seguro que esto no es aún motivo suficiente como para alarmar al personal, dejadme plantearos la siguiente cuestión antes de pasar a la sinopsis. ¿De verdad hace falta tanta gente para realizar una adaptación? Porque si es así no quiero ni imaginarme el personal que moverá un anime original XD
> Sinopsis:
En el futuro, el desarrollo de máquinas de guerra masivas llamadas Objects han hecho que la guerra convencional e incluso las armas tácticas nucleares parezcan obsoletas. Como consecuencia de esta agitación militar, todas las naciones del mundo fueron fracturadas en cuatro coaliciones las cuales constantemente entran en guerra mutuamente: el "Reino Legítimo", centrado en la tradición; la "Corporación Capitalista" (en el anime la "Empresa Capitalista"), la cual evalúa la ganancia; la "Alianza Informática" (en el anime la "Unión de Inteligencia"), concentra en el conocimiento; y la "Organización de Fe", la cual evalúa la religión encima de todo. Con la percepción que solo los Object pueden destruir Object, las guerras modernas son reducidas a duelos entre Objects, resultando en guerras más cortas, limpias y seguras. Sin embargo, todo esto cambia cuando dos soldados regulares del Imperio Legítimo, Qwenthur Barbotage y Havia Winchell, usan su inteligencia e ingeniosidad para destruir los "Water Strider" Object de la Organización de Fe todo por ellos mismos. Habiendo probado que los Objects creados por el hombre también pueden ser destruidos por hombres, Qwenthur y Havia son lanzados a un nuevo mundo de angustiosas aventuras y peligrosas misiones suicidas mientras se unen con Milinda Brantinia de la cual Qwenthur se hace amigo y la salva siendo ella de la élite del Reino Legítimo, con el Object denominado "Baby Magnum". (fuente: wikipedia).
> Personajes:
> Qwenthur Barbotage: Es el joven protagonista de esta historia. Estudiante del ejército, que no soldado en formación, Qwenthur proviene de una familia de clase baja por lo que, de buenas a primeras, ya no lo tendrá nada fácil en el camino que ha escogido. Sin embargo, sí que existe un motivo de peso que lo ha llevado hasta aquí y ése no es otro que el de aprender todo lo necesario para convertirse en un prestigioso diseñador de Objects que le permita hacerse millonario. Ahora bien, una cosa son las aspiraciones del muchacho y otra muy distinta lo que le depara la serie, como podrá comprobar el espectador.
> Havia Winchell: El amigo de Qwenthur en esta etapa de su vida resulta ser un analista de radar que pertenece a una familia noble. Sin embargo este estatus no le sirve de gran cosa, ya que antes de poder disfrutar de esto debe de hacer méritos. O lo que es lo mismo, pasar por el ejército. Y aquí es donde la vida de ambos chicos se cruza, ya que si bien Havia no carga con el papel de estudiante, el hecho de ser asignado a la misma unidad de Qwenthur y su facilidad para meterse en problemas, le llevará a hacerse amigo de éste rápidamente. Aunque si bien lo del papel de soldado conflictivo no nos debería de llamar la atención, lo que sí debería de hacerlo es el hecho de que en ningún momento lo veremos realizar su función como analista de radar XD
> Milinda Brantini: Es la piloto del Heavy Object que está a cargo de la unidad militar a la que pertenecen los dos personajes anteriores. De familia pudiente y personalidad tímida y reservada, Milinda se nos dibuja como la típica damisela en apuros a la que el caballero ha de rescatar. Lo cual no quedará fuera de lugar siempre y cuando no prestemos atención al proceso por el que deben de pasar los pilotos de estas máquinas. Porque en ese momento nos preguntaremos como ha podido ir a parar ella a este lugar.
> Frolaytia Capistrano: Es el oficial al mando de la unidad militar que nos ocupa y, por lo visto, la encargada de poner la parte picante de la serie. No en vano el director ha sabido aprovechar las exuberantes curvas de esta chica que a penas pasa de los veinte años para que nuestros protagonistas no se pierdan ningún detalle de ellas. Y sí, sé que solo me estoy centrando en el fanservice, pero es que en realidad este personaje no aporta nada más a la trama :(
> Flide: Presentado como uno de los responsables políticos de la coalición a la que pertenecen todos, Flide aparece en escena ya empezada la serie para enseñarnos la parte menos amable de la misma. Dejándonos así entrever como la corrupción política sigue estando a la orden del día. Cosa que observaremos brevemente, eso sí, ya que este personaje se tomará unas largas vacaciones para volver a primera plana al final de la serie. Y aun menos mal, oiga, porque estamos hablando del personaje al que le endosaríamos el papel de malo XD
Ésta es Milinda, la damisela a la que Qwenthur rescatará constantemente.
Tras una introducción que nos muestra como los conflictos bélicos seguirán azotando a la humanidad en el futuro, el primer capítulo de la serie pasa a centrar su atención en los Heavy Object. Unas nuevas superarmas capaces de resistir a los ataques convencionales y derrotar a sus atacantes con una facilidad pasmosa. Dato éste al que le debemos de sumar el hecho de que la primera Heavy Object fue creada por un país insular (¿Japón?) antes de preguntarnos por qué diablos esta nación no aprovechó su supremacía. Y es que en contra de lo esperado, el resto de naciones se hicieron con esta tecnología (¿cómo?) para cambiar el curso de la historia y de la guerra misma. Pues tras la disolución de las Naciones Unidas los países se unieron en cuatro grandes coaliciones para zanjar todo conflicto por medio de los Heavy Objects en lo que se dieron en llamar "guerras limpias" por el supuesto descenso en el número de víctimas con respecto a las guerras tradicionales. Un cambio que no influyó para nada en la existencia de la propia guerra, ya que esta nueva división del mundo dio pie a numerosos conflictos en los que los Heavy Objects jugaron un papel crucial.
Y así, tras esta rápida clase de historia armamentística es como pasamos a la presentación de los personajes, o al menos a una parte de ellos, siendo Qwenthur el encargado de correr con el papel protagonista. Estudiante de un país extranjero (¿pero no quedáramos en que los países como tal habían desaparecido?), nuestro joven protagonista sueña con conocer a fondo los Heavy Objects para hacerse millonario como diseñador de estos. Una meta que, a la vista de su presentación, parece encontrarse aun bastante lejos. Y es que el muchacho tiene una especial atracción por los problemas. Lo cual lo lleva a unirse a Havia en sus "aventuras" para acabar con algún nuevo castigo. Reprimenda que en esta ocasión tampoco será demasiado mala, ya que gracias a su juego de caza el chico conocerá a Milinda, la joven piloto que maneja el Heavy Object de la base militar en la que se encuentran desplegados. Siendo éste un encuentro bastante curioso, a la vista de lo rarita que es la chica (¿me puede explicar alguien porque son todos tan jóvenes?) y que terminará con la entrada en escena de Frolaytia (la oficial al mando de la base militar y, por ende, la persona encargada de sancionar a los chicos cada vez que hacen una de las suyas). Y así es como llegamos al final de este episodio de presentación y nos topamos con la que, de buenas a primeras, parece ser el sueño poco halagüeño de Qwenthur.
Continuando con lo visto en los veinte minutos anteriores, el segundo capítulo nos muestra como la pesadilla era más real de lo que parecía y como los chicos se las tendrán que ingeniar para salir del paso, porque al final la supuesta guerra limpia resultó ser sucia y el enemigo un monstruo sediento de sangre. Y esto, sumado a la derrota hará que Qwenthur se aventure en una misión suicida para rescatar a Milinda. Claro que para su propia fortuna contará con la ayuda de su compañero Havia en esta alocada aventura que los llevará a conocer mucho mejor a la chica que pilota el Heavy Object de su unidad. De tal manera que ahora los tres tendrán que aprovechar sus cualidades y colaborar para salir con vida de este atolladero.
Siguiendo los acontecimientos vistos en los anteriores episodios y careciendo de ending, el tercer capítulo pone fin a esta parte de la trama mostrándonos las cualidades de nuestros tres personajes (Qwenthur, Havia y Milinda) y lo que es más interesante aun, ver lo desquiciado que se ha vuelto el mundo tras la aparición de los Heavy Objects. Cosa que haremos por medio de unos enemigos que los tienen como auténticos dioses. Aunque en vez de alcanzar la tranquila vida que buscan, este éxito arrollador llevara a Qwenthur y Havia de cabeza a su próximo campo de batalla. No fuera a ser que nuestros héroes se retiraran a tiempo XD
Una de las diferentes escenas que componen el popurrí de técnicas de animación que acompaña a esta serie.
Tras un cambio de escenario que nos lleva ahora al mar y después de mostrarnos los sentimientos que Milinda tiene hacia Qwenthur, el capítulo cuatro nos enseña como los chicos son usados a modo de conejillos de indias en una estrategia que no acabo de entender. Pues si bien ya acabaron con un Heavy Object dudo mucho que vuelvan a tener la misma suerte en esta ocasión. Cosa de la que ellos mismos se dan cuenta y es por ello que gran parte del episodio está enfocado desde el punto de vista humorístico con el que, por su parte, intentan hacer frente al temible enemigo que tienen ante sí.
Con un arranque que comienza igual que los anteriores, en lo que a cambiar los diálogos se refiere, el quinto capítulo nos deja ante el desenlace de la batalla marítima y ante lo que es aun mejor, uno de los mayores repertorios de fails que he visto hasta el momento. Con personas que son capaces de hablar perfectamente a pesar de estar nadando y teléfonos móviles que tienen cobertura en cualquier lugar del mundo. Y ello sin descuidar las menciones a la obra más famosa de Miguel de Cervantes, porque ya que tenían a España al lado porque no hacerlo, ¿verdad? En fin, que sabiendo esto supongo que la presencia de fanservice a piñón que vemos en el episodio es para compensar los ZASCAS. ¿No?
Cambiando a un nuevo escenario y sin olvidarse de la correspondiente ración de fanservice, el sexto capítulo nos traslada a Australia para ver como nuestros chicos participan en una misión conjunta con otras potencias para acabar con un enemigo común. Caso que seguramente harán en el siguiente episodio ya que en éste parecen más centrados en ver tetas y crear todo tipo de conflictos a raíz de ello XD. Cosa que no tendría mucho sentido de no ser porque Milinda se siente atraída por Qwenthur.
Cuidado con los datos geográficos que manejan los chicos de J.C Staff.
Como era de esperar, el séptimo capítulo nos muestra a Qwenthur y Havia en plena acción. Dando así origen a una sucesión de acontecimientos que lo llevará a actuar nuevamente por su cuenta con el fin de evitar lo que parece ser una trampa y dar con la ubicación del Heavy Object enemigo. O al menos esa es la intención, ya que el episodio nos enseña al fin, y aunque sea muy brevemente, la parte más fea de esta historia: la que afecta a los pilotos de los Heavy Objects.
Apurados como están (no, es broma) el octavo capítulo prescinde del opening para dejarnos directamente ante el desenlace de esta batalla. O mejor dicho de este arco argumental. Porque tal y como está estructurada la serie cada batalla es independiente de la anterior. Pero volviendo al episodio y centrándonos en su desarrollo, cabe destacar como en esta ocasión se deja el fanservice de lado para centrarse totalmente en la acción. La misma acción que acabará dándonos una información mucho más valiosa que el propio Heavy Object de Milinda, por lo que nos dice la que hasta ese momento era una piloto aliada. Y es que parece quedar claro que en este mundo no hay muchas personas en las que se pueda confiar.
Con un comienzo que recupera la parte pervertida de la trama, el capítulo nueve nos traslada a la Antártida para ver como los chicos se enfrentan a un nuevo reto. Y es que en este anime no parece que haya muchos más soldados que estos dos. Aunque a decir verdad esto no es lo peor de todo, pues podremos ver el fail de ese explosivo que cambia de posición mágicamente de una escena para otra, ni lo mejor, ya que gracias a él podremos ver como Havia tiene otro corazón al que apuntar a parte del de su superiora XD.
Dejando atrás a los terroristas y a los países enemigos, el capítulo diez nos marca como objetivo a un conglomerado empresarial rival del país al que pertenece la unidad militar de nuestros protagonistas, por lo que los chicos se desplazaran a América del Sur en busca de este escurridizo enemigo. No sin antes, claro está, cubrir la ración de fanservice y situaciones sin sentido que todos estábamos "esperando", como la de esa familia que invita a los chicos a tomar el té y que tan bien define a este anime. ¡Ah! Y eso sin olvidarnos del nuevo personaje que aparece para ayudarles, o más bien para hacerse con el corazón de Frolaytia. Porque más que otra cosa lo que parece haber aquí es una riña de novios XD
- Venga Frolaytia, a marcar pechera- dijo el director nunca XD
Tras la relativa calma del episodio anterior, el capítulo once supone el inicio de la acción. La cual, en esta ocasión, se basará en separar a Qwenthur y Havia para que, de rebote, sepamos más acerca de la difícil vida de Frolaytia. Y es que detrás de su apariencia exuberante se oculta un destino muy poco alentador. Dibujándose así una subtrama que no resta importancia al difícil enemigo que tienen por delante.
Saltándose nuevamente el opening, no vaya a ser que los 24 episodios se les queden cortos para semejante historia, el capítulo doce pone punto y final a la aventura americana de los chicos. Y lo hace mostrándonos como las armas del futuro cuentan con munición infinita. Porque sino ya me explicaréis que coño pasa aquí XD. Pero dejando este ZASCA a un lado, otra de las cosas con la que nos encontramos es con los celos de Milinda (y eso que aun no hay confirmación de ningún tipo de que Qwenthur sienta lo mismo por ella) y con la continuación de las palabras que le decía Frolaytia en el episodio anterior. Dos aspectos destacables que no tardan en ensombrecerse gracias a lo bien que trabajan los soldados del país al que pertenecen nuestros protagonistas. Cadenas de mando a mí XD
Tras salir airosos de su última batalla, el decimotercer capítulo no se complica mucho la vida. De hecho los emplaza a pocos kilómetros de donde estaban para luchar contra las tropas enemigas que habían logrado escapar de la contienda anterior. Enfocándose ahora el punto de mira en el líder de esta multinacional, para comenzar una carrera contrarreloj que les permita eliminarlo antes de que la situación se complique todavía más. Y bueno, eso es todo lo que se puede sacar en limpio del episodio, ya que el resto de su metraje está dedicado a recordar el magreo que mirábamos en el capítulo anterior y a deleitarnos con una lucha contra las hormigas soldado que resulta completamente absurda.
-Oh dios mío, no puede ser. Llevo toda la serie calentando al personal y ahora me entra la vergüenza. XD
Retomando la jugada más utilizada en estos últimos episodios, la de separar a Qwenthur y Havia, el capítulo catorce pone fin, ahora sí, a la aventura americana de los chicos. Permitiéndonos ver por el camino la verdadera forma de pensar de Qwenthur. Aunque esto no es lo más destacable, ya que los fails que veremos en el episodio son tan grandes que acabarán por acaparar toda la atención. Y es que pocas veces se puede ver como dos edificios caen encima de un Heavy Object para, una escena después, quedar reducidos por arte de magia a una minúscula pila de escombros. Fantasía ésta que enseguida es superada por la escena del caza y en la que no me voy a detener. Pues no veo motivo alguno para seguir hablando de un capítulo tan lamentable como éste.
Tras un arranque realmente deplorable y cuyo único fin parece ser el de añadir aun más fanservice a la mezcla, pues las insinuaciones sexuales no tardan en reaparecer, el capítulo quince nos devuelve a la Antártida para ver como Qwenthur y Havia se las arreglan para luchar contra el ejército de la Unión de Inteligencia. En una batalla bastante igualada que nos dejará antes una pequeña sorpresa. Como sorpresa resulta también el hecho de descubrir que con una broca pequeña puede abrir un hoyo de más de seis centímetros de diámetro. LOL!. No, si el que revisó este anime hizo un trabajo perfecto XD
Con un comienzo que retoma los acontecimientos del episodio anterior, el capítulo dieciséis logra lo impensable: hacer que la trama caiga todavía más bajo. Y es que no se me ocurre una manera mejor de resumir lo que vemos en pantalla pues, si bien parece que la cosa apunta alto por momentos, la inclusión de un concierto en vivo a bordo de un Heavy Object y en pleno combate lo hecha todo por tierra. Y casi mejor así, porque de no existir esta escenita no sé en quien me estaría cagando exactamente al ver las actuaciones que tienen los personajes. Las cuales, por cierto, se ve que eran sumamente importantes cuando eliminaron el ending para que no perdiéramos detalle de ellas. En fin, que espero que estemos pasando por el mayor bache de la serie, porque sino...
De esta guisa será como veamos vestir a la niña del anime.
Después del show visto en el episodio anterior, el capítulo diecisiete nos arrastra a una nueva misión sin olvidarse del fenómeno idol. Por lo que en esta ocasión tendremos que cargar, a mayores, con la joven encargada de realizar un reportaje en la base en la que se encuentran desplegados nuestros protagonistas. Por fortuna, esta tontería pasará enseguida a un segundo plano debido a que la gracia de este episodio está en ver como el grueso de la operación militar es desarrollado por estudiantes. Y vaya si es divertido esto, pues vamos a pasar de no saber nada de esta gente a ver como Havia los conoce a todos en menos de lo que canta un gallo. A esto le llamo yo planificar los guiones, sí señor XD
Continuando con la acción del episodio anterior y enfrentándose por tanto a las imprevistas dificultades que éste nos mostraba a su final, el capítulo dieciocho le da una vuelta de tuerca a los acontecimientos para llevarnos a una situación bastante diferente de la que teníamos al comienzo. Aunque eso sí, tocará ver el siguiente episodio para saber como termina esto porque, aunque no lo creáis, este cambio de rumbo le da un toque de interés a la serie.
Tras haberlas pasado canutas y dejarnos ante la duda de saber si al final cumplirían con los requerimientos que eran necesarios para derrotar al Heavy Object enemigo, el capítulo diecinueve pone punto y final a esta batalla enseñándonos como la trama no se deja nada atrás y como Qwenthur hace nuevas amistades. O al menos eso es lo que parece, pues en realidad no queda claro como se deshacen de las unidades de vigilancia (pasan directamente al punto dos del plan) ni como consiguieron comunicarse con el cuartel general XD. Dos buenos ZASCAS que el episodio tratará de disimular a base de enseñarnos unas escenas extra al final con el fin de que nos olvidemos de estos "detalles".
"Venga chicos, tenemos que encontrar una imagen adecuada para promocionar las bondades de nuestro anime".
Con un comienzo que nos enseña la forma que nadie usaría para hacer un iglú (y menos para el uso que se le da después) y una absurda escena en la que podremos ver como todos los soldados llevan casco a excepción de Qwenthur y Havia, el vigésimo capítulo nos presenta un escenario de combate sumamente favorable para nuestros chicos. Y quiero suponer que es por eso mismo por lo que los guionistas se quedaron a dormir en los laureles, porque sino ya me estáis explicando a cuento de que Havia le tenga que explicar a Qwenthur lo que debe de hacer cuando al principio de la serie nos dejan bien claro la buena pareja de francotiradores que hacían estos dos, o lo que es aun más alarmante, el ver como Qwenthur pasa a ser el hombre más informado de todo el batallón. Cosa nunca vista hasta la fecha y que ya dice mucho de como va a terminar esta serie por muy feas que se pongan las cosas a partir de la segunda mitad de este episodio.
Como viene siendo habitual en estos casos, cuando algo puede ir a peor lo hará. Y de qué manera, oiga. Así pues el capítulo veintiuno es un festival de absurdos que manda a tomar por culo la poca gracia que aún le quedaba al anime. Como nos permite descubrir el hecho de que Qwenthur actúe como el mejor analista de inteligencia de su ejército y ocupando incluso funciones que le deberían de corresponder a Havia como ese análisis que hace del mapa, o la aparición (inesperada, eso sí) del grupo de maids que forman parte de un grupo de mercenarios que estaban trabajando para el enemigo. Un descubrimiento tan absurdo como el hecho de saber que nuestro protagonista traía consigo un buen puñado de diamantes. Aunque para premio gordo el que encierra esta parte de la trama. Porque, ¿acaso alguien pensaba en que el causante de todo este tinglado pudiese ser una guerra de idiomas? En fin, que los guionistas se quedaron a gusto con este anime XD
Con la habitual puesta en escena de tonterías, como la de ver lanzar proyectiles desde maletas que se tiran al aire estando cerradas, el capítulo veintidós nos enseña el final de esta parte de la trama tirando, una vez más, de la mágica jugada de Qwenthur. La cual en esta ocasión se verá en manchada por la participación de las cansinas maids. Unas sirvientas que, para más inri, no resultaran ser lo que aparentan, dejándonos así ante un final en el que, one more time, la Unión de Inteligencia hará acto de presencia para desempeñar el papel de malo maloso.
Lo que nos quedará claro a medida que avance la serie es el motivo por el cual los protagonistas tienen esa obsesión por el tamaño de las tetas XD
Tras darnos unas pequeñas pinceladas del cariz que tomarán los acontecimientos en este episodio, el capítulo veintitrés nos prepara para la traca final, poniendo para ello toda la carne en el asador. Para lo cual no duda en resucitar a viejos enemigos e incluso desvelarnos los datos que ponen el combustible necesario para que todo funcione. Claro que, por desgracia, la carne que va a cocinar J.C.Staff ya está podrida. Y no lo digo por sacar a palestra ahora datos que ya se podían haber dejado entrever en los veintidós episodios anteriores, sino por la estúpida situación que se da. Pues para que todo marche no se les ocurre otra cosa que añadir una emisión pirata en escena. La cual a su vez será investigada por nuestros genios, dado el daño que estaba ocasionando, sin que a nadie se le ocurra cortarla por la vía rápida cuando llegan a la antena que aun la está emitiendo. VRA BO, J.C.Staff. VRA-BO!
Continuando con lo visto en el episodio anterior, el ultimo capítulo del anime nos regala perlas del calibre de la de ver como Qwenthur es sometido a una operación quirúrgica a vida o muerte para volver a la acción a los cinco minutos. Y es que, en realidad, no se podría esperar otra cosa de una trama como la que tenemos entre manos. Pues una vez que se deja todo a merced de la "magia" del protagonista lo único que queda es cruzar bien los dedos para no hacer demasiado el ridículo. Y quien sabe si debido a ello, al tope imaginario que esto impone, fue por lo que metieron por medio a la religión. Total, ya puestos lo mandamos todo a la mierda y listo, ¿no? Pues que sepáis que por mi parte solo aguardo que este final no sea mas que fachada y que esta serie no llegue a tener nunca descendencia.
Por favor, que alguien me mate ya! XD
> Animación y música:
Como ya os podéis imaginar por las imágenes que acompañan esta entrada, la animación no es precisamente el punto fuerte del trabajo de J.C Staff. Y no es por intención, que se le mira que lo intentan, sino por dejadez. Como demuestra claramente el cambio radical de estilo que nos podemos encontrar de una escena para otra. Resultado directo del trabajo de demasiadas manos en esta sin que nadie se molestase en revisarlo. Y es que solo así se logra comprender el paso de una animación "tradicional" como la de la imagen de arriba, que por cierto deja mucho que desear, a la escena más artística que podemos observar en la tercera imagen de este análisis o secuencias en 3D como la que podéis ver debajo y en las que me voy a parar un momento. Porque por increíble que parezca detrás de esta correcta implementación del 3D se encuentran ni más ni menos que los chicos de SANZIGEN (ARPEGGIO OF BLUE STEEL -ARS NOVA-). ¿Y por qué me detengo aquí? Pues ni más ni menos que por el impacto que causan estas elaboradas composiciones en 3D dentro de la animación de la serie. Y si ya no hay donde ponerlas a la hora de comparar fijaros en el fondo que se observa en la imagen que os mencionaba, porque ese lamentable conjunto nos perseguirá en todas las escenas realizadas por SANZIGEN con sabe dios que malvada finalidad.
Y si la animación se columpia entre el suficiente raspado y la pena, la banda sonora no se queda atrás. Aunque en esta ocasión no porque estemos ante la música que D.R Ferro pondría en su peluquería, sino porque la propia trama no hará lo más mínimo por reforzar el impacto que una buena OST debe de causar. Lo cual, traducido al lenguaje de andar por casa viene a significar que tan solo tengamos en cuenta al tema "One More Chance!!" de ALL OFF que acompaña al primer opening del anime por el simple hecho de ser la primera canción que nos encontremos. Good job J.C. Staff y ya van tres XD
El 3D también estará presente, aunque nadie tenga muy claro el motivo de su utilización XD
LA NOTA:
Visto el resumen que he hecho de Heavy Object no hace falta ser un lumbreras para darse cuenta de que su valoración no va a ser para nada buena.
Pero antes de que se me tire algún colgado a la yugular vamos a repasar los puntos que se encargan de poner al anime en su sitio. Y el primero de ellos, como no podría ser de otra manera, es la propia trama. Sacando los animes de corte cómico, uno de los pocos puntos en común que tienen el resto es la existencia de una trama, o hilo argumental, que se encargue de guiar y encauzar toda la historia. Ya sea para bien o para mal.
Pues bien, partiendo de esta obviedad, Heavy Object nos muestra un primer capítulo en el que se sientan las bases de lo que será la historia de la serie. O al menos así debería de ser, pues es en este momento cuando conocemos a los personajes y descubrimos los sueños y ambiciones que tienen. Sin embargo y por increíble que parezca, una vez hecha esta declaración de intenciones la serie se la mete por el culo pasando a un esquema de batallas sueltas en las que no se avanza en ninguna dirección. Aunque eso sí, las aspiraciones de los protagonistas nos seguirán recordando como si éstas tuvieran algún peso en realidad. Y, por si esto no fuera poco, en un momento determinado nos dejará entrever la parte oscura de la historia para, a continuación y sin motivo de ningún tipo, cerrarla de un portazo para no volver a tocarla hasta que estemos en tiempo de descuento. Por lo que al final seguiremos atrapados en esta sucesión de combates hasta el final de la serie mientras nuestro interés por la misma va decayendo de forma constante. Pero, ¿por qué se produce esto? ¿Cómo puede ser que un anime no haga lo más mínimo por atraer al espectador? Pues por el sencillo motivo de que estamos ante una obra que NO TIENE GUION de ningún tipo. Sino que la serie va avanzando a ciegas cual pollo sin cabeza.
Pero si lo anterior ya es razón más que de peso para tomar una determinación al respecto, la otra decisión que se ha tomado en este anime, la de incluir el fanservice, acaba por hundirlo en el lodazal. Porque si bien puedo comprender que otras obras hagan uso de este recurso para ganarse al público (ojo, he dicho comprender. No que este de acuerdo en todos los casos), lo que no me entra en la cabeza es como un trabajo que carece de todo argumento puede emplearlo de una manera tan excesiva como la que aquí vemos. Llegando incluso a condicionar el físico de las chicas para que cumplan con sabe dios que expectativas. Meta ésta que logra de diversas maneras y que deja a Milinda como la única chica normal de toda la serie, mientras nuestros protagonistas se centran en seguir las curvas que los rodean como si de ello dependiese la trama misma.
Pues bien, una vez que tenemos claros los aspectos a tener en cuenta es fácil llegar a la misma conclusión que en tantos otros animes, la de que a esta serie le sobran capítulos. Aunque en este caso la situación resulta más llamativa, pues si quitamos el relleno existente en estos 24 capítulos lo que nos queda malamente coge en 6. Y eso, amigos míos, ya dice todo. Por lo que no creo que le coja a nadie por sorpresa la F que obtiene Heavy Object.
Ojalá fuese así de kawaii todo el anime. En serio.
0 Comentarios