AÑO 9
Si pensabais que, tras la incursión realizada hace tres semanas me iba a olvidar de esta serie por completo, como ha ocurrido ya otras veces, lamento deciros que estáis bastante equivocados. Pues en el día de hoy me voy a meter de lleno en la continuación de aquella, arrastrado por una sed de curiosidad que tiene su origen en la ubicación de esta dentro de la línea temporal de la historia original y de la que ya iréis sabiendo más a lo largo de este análisis. Así pues agarraros los machos (como dicen por ahí) y prepararos para disfrutar una vez más gracias al filón de...
"Desafiando el sentido común"
Dirigido por Daisei Fukuoka, pues en este caso Seiji Kishi pasa a ostentar el cargo de director jefe, el anime está compuesto por Makoto Uezu y guionizado tanto por este como por Takahiro. Repitiendo así parte del personal que daba vida a la serie original, como vuelve a dejar constancia un trabajo de storyboard que repartido entre Shin'ichi Masaki, Takashi Yamamoto, Yoshimichi Hirai, e introduciendo a otras nuevas, como mismamente es el caso del director o Naotaka Hayashi, Yoshihito Nishouji y Daiki Fukuoka en el del storyboard. Y digo en parte porque, a diferencia de la serie del 2014, nos encontramos ante la adaptación de una novela ligera. Si, una cosa de lo más curiosa, en vistas a que partíamos de una obra original, y que retomaremos más adelante para centrarnos ahora en profundizar un poco en el factor que ha hecho que en el día de hoy no esté siguiendo en este apartado mi cómoda y habitual estructura.
Y es que, para más inri, la cosa se las trae. Pues este dato tan solo está reflejado en MAL y solo después de escarbar un buen rato por la red se encuentra uno con el hilo que ha de tirar. El cual en este caso estaba escondido en la web de los chicos de ramenparados. Por lo que en esta ocasión prefiero curarme en salud y deciros que, aunque voy a dar por válida esta información para los fines de este apartado, os la recomiendo coger con pinzas. ¿Y por qué digo eso? Pues porque esta información indica que la serie es una adaptación de las novelas ligeras de Takahiro (autor) y BUNBUN (dibujante). Dos personas que, lo que son las cosas, ya participaban en la serie de 2014 haciendo exactamente lo mismo; creador original y diseñador original de caracteres respectivamente. Y de ahí las dudas más que razonables que tengo al respecto.
Ahora bien, esta "película" nos deja con dos últimas sorpresas que harán las delicias de más de uno (y sino ya disfrutará D.R Ferro por todos XD). Pues esta pequeña investigación me ha llevado a descubrir que el bueno de Takahiro también preside MinatoSoft. Un estudio japonés de novelas visuales para adultos que pertenece a Howkeye Corporation y que, mira tú por donde, fue el encargado de hacer el videojuego de la serie original. Aunque si esto no os da miedito, os aseguro que la siguiente sorpresa si lo hará. Y no lo digo porque hayan decido trocear una serie de 12 capítulos en dos, que uno ya está vacunado contra esas idioteces, sino por una de los enredos más grandes que he visto en mi vida. Y me explico. Porque resulta que Yuuki Yuuna wa Yuusha de Aru "Washio Sumi no Shou", la primera mitad de los 12 capítulos que componen oficialmente la segunda temporada de la serie original, no fue concebida como una serie de seis episodios, sino como una trilogía de películas que se estrenaron en Japón en ese mismo año y para las cuales se daba la opción en pre-venta de adquirir un bono para verlas todas por 4,500 yenes. Aunque lo mejor de todo tal vez sea el hecho de saber que, de estos 12 episodios tan solo los seis últimos, agrupados bajo el título de Yuuki Yuuna wa Yuusha de Aru: Yuusha no Shou son una secuela directa de la primera temporada. ¿Y los seis primeros? ¡Sorpresa! Os tocará seguir leyendo la entrada para averiguarlo. Pero, ¿entendéis ahora un poco mejor como se llegó al resultado de la primera temporada? Yo al menos he sacado bastantes cosas en limpio :P
> Sinopsis:
"En el año 298 de la era de los dioses, las chicas de escuela primaria Sumi Washio, Sonoko Nogi y Gin Minowa son encargadas con una importante misión. Se han vuelto héroes y luchan contra Vertex, un misterioso enemigo que está atacando a Shinju-sama, el dios árbol que protege Shikoku, la única área en el mundo que es aún habitable". (fuente: animeflv)
> Personajes:
Yuuki Yuuna wa Yuusha de Aru "Washio Sumi no Shou" presenta un reparto aún más reducido que la serie original, lo cual, sumado al hecho de que ya conocemos a los enemigos, me va a facilitar enormemente la tarea de presentároslos :P
> Mimori Tougou o Wasshi. Al contrario de lo que ocurría en la serie original, en esta ocasión nos encontramos con una chica que, por cuota de pantalla, actitud y acontecimientos, alcanza el status de protagonista. Lo cual tampoco es algo que le vaya a caer del cielo, ya que la historia no perderá la ocasión de hacer que esta joven, recta y determinada, se tropiece con bastantes obstáculos en su camino. Bien sea para bajarle los humos, cosa que dudo realmente sabiendo de su personalidad, o para que nos pase desapercibida durante el mayor tiempo posible. Cosa que obviamente se va a conseguir aunque tal vez no sea de manera intencionada XD: Ahora bien, lo que más llama la atención de su papel en la trama no es tanto su protagonismo en la misma como ese ideal político que destila y que está sacado de la era imperialista nipona más rancia sin que sepamos en ningún momento quien se lo ha inculcado. Por no preguntarnos directamente a santo de qué nos cuelan en la serie una doctrina política de este nivel.
> Sonoko Nogi, o Sonocchi, es la chica alegre y desinhibida de la serie. Lo cual le sirve a esta para remarcar todavía más las personalidades de cada una y para mostrarnos las cosas desde diferentes puntos de vista. Lo cual no quiere decir que su papel sea menor ni mucho menos, ya que llegado el momento esta chica dejará atrás su inocencia e infantilidad para dar el do de pecho como la que más. Cosa que servirá para mostrarnos una unión como grupo de lo más natural mientras vemos como el avance de la historia la va apartando poco a poco de la tranquila y alegre vida que tenía.
> Gin Minowa, o Gin, es, en parte, la cabeza hueca del grupo. Y es que, ahí donde la veis, esta chica extrovertida y despreocupada resulta tener una cara amable en general y un papel mucho más responsable cuando se encuentra con su familia. Mostrándonos así una actitud que resulta bastante creíble para una chica de su edad y que contrasta con el papel que desempeña como heroína gracias a la nula información que se nos da de este. Creando así un vacío de lo más artificial y que poco o ningún favor le hace a un personaje que, por otro lado, vamos a conocer bastante bien gracias a la vertiente de slice of life que tiene la trama. Aunque, como ya os podéis imaginar, este es un problema que se extiende al resto de las chicas.
> Aki es el personaje sorpresa de la serie. Y es que, en una historia donde los protagonistas son las heroínas y los monstruos contra los que luchan en solitario, llama sumamente la atención la presencia de un personaje "foráneo" que se encargue de formarlas personalmente para que puedan llevar a cabo su cometido. Y esa es, precisamente, la función que desempeñará la que, hasta el momento de comenzar la serie, no era más que su profesora de escuela.
Sonocchi sacándole los colores a Wasshi.
Con un arranque que no hace lo más mínimo por situar temporalmente lo que vemos en pantalla con respecto a los sucesos que tenían lugar en la serie original (cosa que por otro lado no sé porque me extraña, la verdad), el primer episodio de la serie supone una evidente ruptura con todo lo que sabíamos de este universo. Empezando por esa ferviente religiosidad que se respira ahora en el colegio y continuando con una eliminación de los Vertex que no requiere del proceso de purificación. Dos grandes cambios que vienen acompañados de muchos otros para desgracia de propios y extraños. Como es el hecho de que las elegidas ya supiesen el futuro que les aguardaba e incluso se hubiesen entrenado para ello, el hecho de que los enemigos deban de cruzar un puente para lograr su objetivo (porque se ve que el hecho de que puedan volar tiene más limitaciones de las que marca el sentido común) o que sea la propia profesora la encargada de anunciar a la clase, a bombo y platillo, el importantísimo papel que les ha tocado a las tres chicas. Un sentido que compite de tú a tú con todas las incongruencias que ya nos dejaba la serie original (y mira que solo llevamos veinte minutos) y que no hace más que dibujar un futuro sumamente "prometedor" para el resto de la serie. Pues dejando a un lado fails que bajo este escenario quedan relegados a absolutas nimiedades, como el de esos helados que se van a tomar en solitario y sin que nadie se lo sirva o la chorrada del puente que está lleno de campanillas y cerrado al tráfico por alguna razón que nos es desconocida (para que os hagáis una idea del nivel), lo cierto es que a partir de aquí tan solo podemos esperar que toda la gente sepa la realidad del mundo en el que vive. Por lo que, ¿qué creéis vosotros? ¿Lo sabrán realmente? XD
Como no podía ser de otra manera, el segundo episodio comienza dándole una patada en la entrepierna a la coherencia argumental, al mostrarnos como la profesora les enseña a las chicas un vídeo de su última batalla que tiene en su teléfono. Contradiciéndose así el hecho de que ellas no pudieran hacer fotografías de la otra dimensión en el capítulo anterior. Aunque dejando esto a un lado, lo otro que nos debería de llamar la atención en realidad es que esta profesora actúe como entrenadora de las chicas e incluso tome decisiones de cara a la manera en la que han de organizarse como heroínas. Un WTF de manual que sirve de excusa para dejarnos ante el primer episodio de relleno de la serie, lo cual nos llevará a ver como las jóvenes se toman un descanso para entrenar en la playa bajo la atenta supervisión de la profesora, y la excusa de aprender a actuar en equipo, antes de pasar a la acción. Y es que sí, amigos, unos minutos después de ver como las chicas hacen uso de su vestimenta de combate en el mundo real, las veremos tomar parte en una nueva batalla. La cual, por cierto, nos constatará a su término otra de las diferencias con respecto a la serie original, puesto que aquí las heridas y rasguños que se hagan en batalla las acompañaran al mundo real. Y no solo eso, sino que este hecho no les parece preocupar lo más mínimo :P
Tras un comienzo que nos deja con el culo torcido, al explicarnos que los Vertex son seres nacidos de un virus, el tercer episodio no tarda mucho en romperse por completo. Y es que, una vez veamos como las chicas completan el entrenamiento supervisado por la profesora, el resto del episodio se convertirá en una amalgama de pequeñas historias que tan solo sirven para rellenar metraje y para hundir todavía más esta serie en el fango. Pues, más allá del hecho de que sepamos de las familias de las chicas (cosa que no ocurría la serie original) o que conozcamos mejor sus personalidades, estos veinte minutos nos desvelaran un sentimiento nacionalista que llega a traspasar la barrera del humor para convertirse en algo realmente repugnante. Y más teniendo en cuenta que no estamos hablando de una vuelta a los valores y costumbres del Japón de los samuráis, sino al del pensamiento que llevo al país del sol naciente a una de sus etapas más abominables; la de la 2GM.
Las buenas costumbres que no falten.
Por si no teníamos suficiente, el cuarto capítulo no tarda mucho en volver a cambiar el registro de la serie para meternos de lleno en un slice of life de lo más simplón que servirá para descubrirnos los cambios que, sin venir a cuento y mucho menos encajar en la trama, sufre alguna de las chicas en su personalidad. Aunque esto no será lo único sorprendente de este episodio, puesto que tan solo unos minutos después veremos cómo estas usen nuevamente el móvil para transformarse (dejando así constancia que el uso de este dispositivo va en función de lo que le venga en gana el director, tal y como ocurría en la primera temporada) y pasar a la acción. En un combate que no dejará a nadie indiferente debido a la presentación de una violencia que, si bien ya se había dejado entrever en los capítulos anteriores, ahora no tiene límites. Rozando con ello el gore y dejándonos patente lo necesario de la misma al tener en cuenta el conjunto de la serie :P
Sin aparentemente manera alguna de que la trama encaje ya con la serie original, el quinto capítulo nos lleva de funeral para asistir a uno de los eventos más excéntricos que hemos visto jamás. Aunque como todo en esta vida este acontecimiento también nos permitirá descubrir nuevas claves, como son el hecho de que no todo el mundo supiese de la labor de las chicas y ya mucho menos su misión real, lo cual deja en evidencia los primeros compases de daba esta serie, o la hipocresía de ese discurso vacío que hace la persona al cargo del evento. Unas palabras que, si bien podrían quedarse como simples sandeces, terminan por adquirir un significado mucho más turbio al final de estos veinte minutos con ese cierre que, al menos, se atreve a tocar uno de los temas tabús de este despropósito de historia; sus cimientos. Aunque para llegar a esto antes deberemos de ver como las chicas se vuelven a ver inmersas en una nueva batalla, como sus heridas desaparecen ahora por arte de magia y como, a pesar de toda la organización que se encuentra detrás de esta "secta", aún no hay nadie que se encargue de estar al tanto de las heroínas para atenderlas en cuanto vuelvan de sus batallas. Muaravilloso, oiga.
Dentro del sinsentido general que es esta serie, el último capítulo supone un soplo de aire fresco, al convertirse en el puente de unión que convierte esta obra en la precuela de la serie original. Cosa que se logra in extremis y que deja patente el hecho de que todos los acontecimientos que aquí se narran podían haber sido condensados en una sola película de una hora de duración y sin que el argumento sufriese ningún perjuicio. Para que veáis la cantidad de relleno que rodea a este anime. Pero, dejando esto a un lado, también cabe la pena aclarar que, aunque el hecho de que estemos ante un puente sea algo positivo, esto no la salva de cometer fallos que, en parte, son fruto de las prisas surgidas como consecuencia del tiempo perdido. Cómo es el caso de que las chicas cambien su transformación y vestimentas por unas menos sugerentes que las que venían usando, que las armas también sean distintas (y va, por esta vez os acepto la excusa de la actualización de los móviles como animal de compañía) o el inexplicable hecho de que en menos de dos segundos sean capaces de usar su transformación definitiva para luchar contra los enemigos. Por no hablar, claro está, del hecho de estas sufran de manera instantánea las consecuencias de usar su nuevo poder. Cosa que no ocurría en la serie original. Como tampoco se daba el hecho de que viésemos ese diseño en enemigos que se encuentran fuera del área que les sirve de refugio. Aunque para misterios el que nos deja la profesora, por el simple hecho de tener un papel tan relevante en la trama y no haber aparecido en la serie original, o esa especie de funeral que se mira la recta final del capítulo y que, si lo que pretendía era mostrarnos el destino de Sonocchi de cara a lo que veíamos en la historia original, falló estrepitosamente. Y poco más que decir, la verdad, de un episodio que, por otro lado y quién sabe si para quedarse en nuestra memoria, aún tiene el valor de mostrarnos el ritual que siguieron las chicas para poder recibir sus teléfonos actualizados o permitirnos descubrir cómo el resto de la gente sí que pueden ver a las mascotas/hadas de las chicas. LOOOOOL
Tras los autobuses sin cinturones desde Japón nos llega lo último en seguridad vial.
> Animación y música.
Dentro ya de la parte técnica nos encontramos con un apartado de animación que no difiere prácticamente con respecto al que descubríamos en la serie original. Y es que, más allá de los cambios de diseño que se llevan a cabo en la formación de los enemigos o el lavado de cara que sufre el colegio por medio de unos pupitres que juraría no haber visto en la serie original, nada nos haría pensar en los tres años que han transcurrido desde la emisión de una y otra. Es más, llegados a este punto cabría la pena preguntarse si esta conservación responde a una estrategia para hacer más convincente el hecho de que nos hallemos ante una precuela. Cosa que personalmente no creo y que me lleva a pensar en que los chicos del Studio Gokumi han pensado más en esta ocasión en el bolsillo que en otra cosa. Una sospecha que se ve reforzada al tocar el otro elemento que ya es intrínseco a esta serie; el 3D. Una técnica que se vuelve a utilizar durante los combates, con un resultado prácticamente idéntico que el de la serie original, pero que también ante sombras como la que descubrimos en el minuto 17:05 del tercer episodio. Momento este en el que, contra todo pronóstico, se opta por recurrir a ella para animar una escena que, para mayor inri, no tiene nada que ver con los combates. Un espectáculo digno del valle inquietante y que se puede explicar, al menos por lo que a mí respecta, por la ausencia de los chicos de Graphinica. Ya que en esta obra todo el peso del 3D recae sobre los hombros de Flying Ship Studio y IKIF+.
Y en cuanto al apartado musical poco o nada que decir, pues en este aspecto la serie resulta ser completamente fiel a la original y por ende podemos ceñirnos a lo que dije de aquella para valorar esta. La música, como es obvio y os podéis imaginar, vuelve a estar al cargo de Keiichi Okabe (MONACA) y no será hasta que abordemos el opening y el ending, con excepción del tema Kokubou Taisou de Suzuko Mimori que suena durante el tercer episodio, cuando nos topemos con novedades. Estando monopolizado el primero por la canción "Egao no Kimi e" de Suzuko Mimori mientras que el segundo se reparte entre la ya mencionada "Egao no Kimi e" de Suzuko Mimori (capitulo 1), "Tomodachi" de Suzuko Mimori, Kana Hanazawa, Yumiri Hanamori (capítulos 2,3 y 5), "Tamashii" de Yumiri Hanamori (capitulo 4) y "Yakusoku" de Sumi Sonoko (capitulo 6).
¡Mis ogos!
LA NOTA:
Como habéis podido averiguar, Yuuki Yuuna wa Yuusha de Aru "Washio Sumi no Shou" es una serie que no se distancia mucho de la original en cuanto a las incongruencias y sinsentidos se refiere. Por lo que a este respecto podríamos decir que los chicos del Studio Gokumi han hecho un excelente trabajo al hacer que nos sintamos como en casa. Y podéis creerme cuando os digo que esta compañía debe de obtener sus ingresos por esto, pues de otra manera deberían de haber echado el cierre hace tiempo. Ya veis, hay gente con suerte y luego está la de este estudio. Pero antes de dar por zanjado este análisis con la nota que se han ganado a pulso dejadme hacer un repaso por las cuestiones que hacen que esta serie se quede en ese puesto y no en otro. Que luego hay mucho llorón y el que tiene que atender los correos soy yo XD
Así pues, y ante semejante comienzo, no se me ocurre nada mejor que ir a la chicha para que no decaiga la cosa. Y eso, como es obvio en una serie como la que tenemos entre las manos, vuelve a significar el hecho de dejar por los suelos su guion. O mejor dicho, el trabajo realizado por Makoto Uezu y Takahiro. Porque seamos francos, ¿para qué vamos a andar dando vueltas cuando podemos poner nombre y apellidos a los responsable? A mí me parecería un absurdo y hasta una falta de respeto, la verdad. Por lo que me vais a permitir que ponga la primera carga de profundidad con el único punto de estos seis episodios que es capaz de cargarse la serie por si solo: el puente. Porque, ¿cómo era exactamente eso de que los enemigos tenían que cruzar el puente para poder atacar a la deidad? Pues vista la serie queda claro que el puente se fue a tomar por culo y que los enemigos eran incapaces de llegar hasta la deidad por otro lugar que no fuera este a pesar de que podían volar. Por lo que, y creo que no os resultará difícil de entender, esto ya es motivo más que de peso para que la historia acabase en este preciso momento y la serie original nunca se llegase a hacer. ¡Mis diesels! Studio Gokumi.
Es mejor no hacer preguntas, en serio.
Aunque como diría el otro, no hay dos sin tres. Y eso me lleva a sacar ahora a la palestra el apaño mediante el cual esta serie se convierte en una precuela de la del 2014. Y es que el arreglo que se hace en el capítulo seis para encajar esta historia con la original, y arreglar así el desaguisado del capítulo anterior, crea mayores agujeros en el argumento de los que se podría imaginar. Fruto, sin dudas, de la nula información que se nos aporta sobre los entresijos de esta trama. Para que veáis cómo está el percal en esta serie que incluso yo celebré la nimia información que se han dignado a darnos los guionistas. Y si pensáis que el echo de ocultarla es un plus a favor de ella, estáis muy equivocados. Puesto que a cada paso que da y precisamente por no delimitar sus reglas de manera clara y concisa, la obra no hace más que torpedearse a sí misma. Lo cual, en este caso, toma forma cuando caemos en la cuenta de que si tanta preparación que había en torno a las heroínas es porque estas no eran las primeras. Y si las anteriores dieron su vida por el bien de las personas a las que protegían, ¿por qué deciden ahora hacerlas inmortales y las empujan, tanto a ellas como a sus sucesoras (porque esa es otra, a pesar de todo siguen necesitando de nuevas heroínas) a una vida que se asemeja más a una maldición? Misterios que se resuelven con magos, supongo.
Y si pensabais que ya está todo dicho, que no tengo porque abusar más de esta serie después de la paliza que le acabo de meter y que puedo pasar a otra cosa, lamento informaros de que os equivocáis nuevamente. Porque otra cosa no, pero lo que si ha logrado el Studio Gokumi es dar vida a una fuente inagotable de zascas. Cosa que tiene su mérito pero que, como aquí no nos dedicamos a celebrar estas cosas (eso es algo que hacen en la casa del director y el guionistas, no me cabe la menor duda) vamos a dar otro paso para detenernos en la otra piedra que se encuentra esta serie en su camino. Aunque como os podéis imaginar lo de llamarle piedra es más un eufemismo que otra cosa. Y esta nueva parada no es otra que la de los personajes. Porque si, amigos, hasta aquí han logrado meter la gamba los chicos de esta compañía al incorporar a un personaje, el de Aki que, desde un punto de vista argumental (porque no existe otro cometido para él), tiene realmente la misión de introducirnos en los entresijos de esta historia de una manera sencilla. Por eso, cuando no cumple con su función, sino que pasa a convertirse en un secundario al que la trama trata de mantener con un halo de misterio para que no nos olvidemos de él tras dejarlo a un lado, al argumento se le plantean tesituras como la de ser capaz de resolver, con lo que hemos visto en estos seis episodios, cuestiones tales como el motivo por el que no hemos sabido de ella en la serie original (o de ningún personaje que desempeñase su función) o por qué las heroínas saben cuál va a ser su futuro y se preparan para ello, mientras que la serie original esto no ocurría. Porque no nos equivoquemos, la aparición de Karin en la serie del 2014 no es la regla, como cabría esperar, sino una excepción a la misma que no sirve más que para que podamos tirar por el inodoro el trabajo de esta gente.
Y así nos vamos acercando en el día de hoy al término de esta entrada. El cual tocaremos en cuanto termine de despachar las pocas cosas que ya me quedan en la lista, os lo prometo. Que esta sección va camino de superar en extensión al propio resumen de la serie. Y por ello voy ahora de manera más breve en el resto de detalles que hacen de esta serie lo que es. Como es el caso de la presencia de un ecchi que no viene a cuento (a no ser que lo tuyo sean las chicas de 12 años, claro) o el sinsentido que resulta del hecho de haber hecho una serie de seis capítulos con esto. Como os dije cuando hablé del último episodio, el contenido de toda la serie se resume perfectamente en una película de una hora de duración. Ya no os digo nada de la idea de presentarla originalmente como tres películas. Pobres incautos los que picaron en esta trampa. Pero ojo, porque cuando uno toca este tema es imposible olvidarse de otro WTF, el de que toda esta historia naciese como una novela ligera. Y es que, si no me falla la memoria, en todos los años que llevo viendo anime nunca me había encontrado con un caso en el que una obra original de un estudio diese pie a una continuación que surgiese como un trabajo impreso antes de ser adaptada a la animación. Y ahora no tardará mucho en salir alguien a corregirme de mi error, pero os aseguro que este "desarrollo entrecruzado" es una de las cosas más absurdas que he visto. Más incluso que las adaptaciones de trabajos que ya han sido finalizados y que se marcan un invent con el final porque si :P
Ahora bien, dejemos las opiniones personales a un lado y volvamos a la serie que nos ocupa para tocar el último punto que hemos de tener en cuenta a la hora de valorar la serie; su violencia. Y por partida doble, para el caso, ya que mientras que por un lado nos encontramos con que la mejora del equipamiento que reciben las chicas y que las convierte en inmortales llega sumamente tarde, a la vista de las múltiples heridas que habían estado sufriendo en los combates sin la más mínima queja, por el otro nos topamos con una violencia que, en momentos puntuales, alcanza un nivel que no tiene ningún tipo de sentido sabiendo que estamos ante una serie cuyo planteamiento es del todo "happy". Creando así un contraste de lo más brusco que el espectador ha de digerir como buenamente pueda. Y que por mi parte solo explico como una táctica para distraer la atención de los fails que se marca el guion. Porque si lo que pretendían era darle a la historia un aire más fuerte como el que, por ejemplo, se respira en Narutaru, la han vuelto a cagar de lleno XD. Lo cual tampoco es que le suponga un mayor hándicap a la serie a la vista del resto de problemas que acarrea. Por lo que al final será el propio respetable quien tome la decisión de echar toda la culpa a la traducción del fansub de turno o por el contrario se dé cuenta de que el trabajo que han creado los chicos del Studio Gokumi es una basura de primer nivel. Nosotros, por nuestra parte, lo tenemos claro. Y más en un caso tan claro como este, en el que la G nos deslumbra hasta el punto de cegarnos.
-Estoy pensado en regalarte esta serie para su cumpleaños.
-Bolita, ¿dijiste algo?
-Que se me atragantó una pipa.
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