AÑO 10
Esta semana les tendremos miedo (todavía más) a los furrys con…
>Gleipnir (PINE JAM, 2020, 13 CAPS)
Antes de empezar con la explicación de la entradilla, quiero presentar un poco este estudio. ¿Por qué? Básicamente porque es el primer anime que tenemos de ellos en nuestro blog, así que toca colocar el Cinexin y darle a la manivela para empezar con el espacio no patrocinado.
Creado en 2015, este estudio ya tiene varios animes conocidos en su haber: Gamers!, Just Because!, Kageki Shoujo!! y Do It Yourself!!, entre algunos más. No sé cuáles serán los títulos de las siguientes series, pero muy probablemente tendrán signos de exclamación al final. Algunos de estos animes es posible que acaben en nuestro blog porque las sinopsis me parecen de lo más llamativas, así que en los próximos meses es probable que caiga alguno más.
Y poco más que añadir. Para ser un estudio joven, ya tiene varios trabajos a sus espaldas, cosa que resulta del todo interesante. ¿Será porque hacen bien su trabajo o se han convertido en un pozo al que tirar el dinero? Eso lo veremos con el tiempo. La primera bala la tenemos entre manos.
¿Por qué escogí Gleipnir? Al igual que las otras series que tengo anotadas, la sinopsis de este anime me llamó poderosamente la atención. Un chico que se convierte en furry es un éxito asegurado, al menos en las orgías yankis de fin de año. Ahora solo toca comprobar si tanta piel acolchada y peludita da lugar a algo decente o acabaremos frente a un gordo y sudoroso anglosajón, cuyo color de piel se parece más al de los cangrejos que al de un humano cualquiera. Y esa imagen ya da más miedo que todos los animes de terror de esta temporada. Así que, sin más dilación, pasemos al meollo.
>Sinopsis
Shuichi es un adolescente que está terminando la preparatoria. Tiene buenas notas y eso hace esperar que consiga una plaza en una buena universidad, aunque lejos de la zona rural donde se encuentra. Sin embargo, Shuichi lleva unas semanas algo diferente. Ha dejado de darle importancia a los estudios y se nota algo más distraído que de costumbre. Aunque nadie parece haber notado este cambio.
Por el contrario, él se nota más cambiado, tanto que confirma que está maldito, al menos para sus adentros. Por alguna razón que no recuerda o no sabe con certeza, es capaz de cambiar voluntariamente su aspecto, convirtiéndose en un perro de peluche gigante con una fuerza considerable, además de un olfato prodigioso. Curiosamente, ese olfato lo mantiene siendo un humano corriente, dándole pistas de sucesos que ocurren a su alrededor y que las demás personas son incapaces de percibir.
-This is fine-
Una noche detecta un fuego en la lejanía y decide ir a investigar para saber qué es lo que ocurre. En el lugar se topa con Clair, una joven que se encuentra inconsciente, rodeada de llamas, y que pertenece a su mismo instituto. Decide rescatarla de ese almacén incendiado. Aunque torpe de él, se deja el móvil atrás. Ella lo encuentra y decide chantajearlo para conseguir más información acerca de esas transformaciones, pero lo que desconocen es el mundo que se ha creado alrededor de las mismas.
>Guion, narrativa y tratamiento de personajes
Tenemos una serie que se basa en los géneros de la fantasía y la acción como principales y ecchi y gore para unos estilos secundarios que intentan sazonar la historia al punto exacto para atraer a los adolescentes. Y por ganas no será, porque alguno de los secundarios cobrará tanto protagonismo que no sabremos si se han intercambiado los papeles. Esto lo digo por una predominancia de la sangre en todos los combates y de un ecchi que roza lo descarado. Vale que la censura será disimulada a más no poder, con objetos que bloquean partes del cuerpo o de planos que, aunque dejen poco lugar a la imaginación, no tendremos toda la "información" pezonil o chochonera que deberíamos. Quizás haya que pedir ayuda al VAR, pero eso se lo dejo a los del Chiringuito de jugones.
Dejándonos de tetas y demás paja erótica (al menos por el momento), pasamos al meollo de la historia. Shuichi y Clair se encuentran con el percal de que hay más gente tras unas monedas especiales al igual que ellos. Gente que no se anda con tonterías y que si tiene que barrer el suelo con sus huesos, lo harán. Luego está el detalle de que buscan las monedas para un bien común y evitar un cataclismo, pero eso es algo que me da risa solo de pensarlo. O bien están mintiendo descaradamente o esto se ha convertido en un concurso para saber quién suelta la más gorda (me estoy refiriendo a las mentiras). Sin embargo, veremos que esto de mentir parece que viene de serie para todos los personajes en la historia, algo así como los intermitentes en los coches. Y aquí todo el mundo los utiliza a su antojo. Es como si se tratase de un quinto género en la mezcla. No tiene nada de malo, pero acabamos con la sensación de que los personajes son bastante hipócritas.
Quitándome del tema de estos asuntos de confesión, la historia se desarrolla bien y de manera ágil, quizás parece que algo rápida. No tendría nada de malo, quitando el detalle de que, en los momentos de calma, el ansia por ver más peleas va creciendo dentro de nosotros. Los combates están bien, con sus momentos de charla, estrategia, provocación y muerte, todo esto acompañado del erotismo y de la sangre que ya mencioné antes.
Shuichi se convierte en un perro de peluche gigante y tiene la misma cualidad que todos los disfraces de peluche: dan un calor infernal. ¿A qué viene eso del disfraz? Pues porque cuando Suichi se transforma, además del aspecto de perro de peluche/juguete, tiene una curiosa cremallera en su espalda que, al bajarla, da acceso a un interior rosadito, húmedo y no sé si con ciertas fragancias marinas. Y ya sabemos qué es lo que pasa con las cavidades que cumplen esas condiciones, que hay personas que sienten la necesidad de "entrar". Por eso las chicas de esta serie que acaban dentro (vaya frase) lo hacen vestidas con un bañador, con sugerentes conjuntos de lencería o desnudas por completo, porque al igual que para follar, cuanta menos ropa, más puntos de destreza. ¿Y por qué entran? "Para ser uno con el EVA, Shinji", y para manejar al protagonista como si fuera un mecha acolchado. Es un concepto algo raro, pero una vez visto en la serie, se entenderá perfectamente. También os digo que podrían dejar de esmerarse tanto en los encajes de los sujetadores o de las bragas de las chicas, poner algo más simple y práctico, sobre todo para dibujar. Pero allá cada uno con su tiempo y su presupuesto.
De todas formas, volviendo al tema de la historia, ésta se desarrolla de manera natural. Dentro de un mundo parecido al nuestro donde una nave extraterrestre se estrella y el alienígena superviviente te pide recolectar unas monedas que han caído en la zona. Porque a él le da pereza y prefiere leer manga y estar tirado a la bartola, como si al creador de esta historia se hubiese inspirado en Gantz y Keroro Gunsou al mismo tiempo. Tal es la incongruencia que este extraterrestre cumple el deseo de quien le entregue una moneda. Y ya no es solo el detalle de tener un poder ilimitado para algunas cosas como la modificación humana, siendo una raza que desconocía hasta ese momento, sino que también demuestra poder para hacer lo que quiera, pero que no le apetece hacerlo. Vamos, que tenemos a un visitante extraterrestre más vago que los pelos de mi culo. Ya no me paro mucho a pensar en el detalle de coger a cuantos humanos aparezcan por ahí para "hipnotizarlos" y recuperar todo, pues son "detalles" que dejan a la trama a la altura del lodo en mis zapatillas.
No obstante, la tontería no termina aquí. Si a cualquier humano le dan la opción de cumplir su deseo, ¿por qué no hacerlo en base a lo que tiene que hacer después? Si el primero quizás pringue por desconocimiento, el segundo ya tiene que ir un poco más espabilado, más sobre todo cuando le piden encontrar 100 monedas para un poder mucho mayor, algo capaz de provocar un cataclismo. ¿Por qué no pedir un superpoder capaz de localizar cualquier moneda tirada por ahí? No, por dios, eso ya es mucho pedir, mejor ponme unas tetas delante que se me ha olvidado cómo botan.
La coherencia con los propios personajes no es la ideal. Ya decía antes que eran unos hipócritas y con razón. Si al principio algunos no quieren matar (como puede ser el protagonista), después acaban alegrándose por ello. Y también están los personajes que atacan con crudeza para luego perdonar la vida, porque en realidad no querían hacer daño. Eso sí, un par de capítulos antes arrancaron alguna cabeza por pura amistad. O mismamente el caso de una psicópata, a la que le dan igual las consecuencias de sus actos, pero que después se apena por ellos en plan "qué pobre que soy que he tenido que llegar a estos extremos". Por no mencionar lo de "lo nuestro es solo temporal y para resolver el tema con mi hermana" pero si le pasa algo al protagonista, se ponen a llorar para luego hacer como si nada. O invitarlo a su casa con la excusa de salir temprano al día siguiente para buscar monedas, pero proponerle al momento ver una película para terminar echando un polvo. Literal. No sé, muchacha, si me invitas a ver una película y después a que te empotre, ya te digo que no vas a despertarte muy temprano. Y si lo haces es para pedir más.
Tenemos una serie que se basa en los géneros de la fantasía y la acción como principales y ecchi y gore para unos estilos secundarios que intentan sazonar la historia al punto exacto para atraer a los adolescentes. Y por ganas no será, porque alguno de los secundarios cobrará tanto protagonismo que no sabremos si se han intercambiado los papeles. Esto lo digo por una predominancia de la sangre en todos los combates y de un ecchi que roza lo descarado. Vale que la censura será disimulada a más no poder, con objetos que bloquean partes del cuerpo o de planos que, aunque dejen poco lugar a la imaginación, no tendremos toda la "información" pezonil o chochonera que deberíamos. Quizás haya que pedir ayuda al VAR, pero eso se lo dejo a los del Chiringuito de jugones.
Dejándonos de tetas y demás paja erótica (al menos por el momento), pasamos al meollo de la historia. Shuichi y Clair se encuentran con el percal de que hay más gente tras unas monedas especiales al igual que ellos. Gente que no se anda con tonterías y que si tiene que barrer el suelo con sus huesos, lo harán. Luego está el detalle de que buscan las monedas para un bien común y evitar un cataclismo, pero eso es algo que me da risa solo de pensarlo. O bien están mintiendo descaradamente o esto se ha convertido en un concurso para saber quién suelta la más gorda (me estoy refiriendo a las mentiras). Sin embargo, veremos que esto de mentir parece que viene de serie para todos los personajes en la historia, algo así como los intermitentes en los coches. Y aquí todo el mundo los utiliza a su antojo. Es como si se tratase de un quinto género en la mezcla. No tiene nada de malo, pero acabamos con la sensación de que los personajes son bastante hipócritas.
-¿No tendría que ser al revés?-
Quitándome del tema de estos asuntos de confesión, la historia se desarrolla bien y de manera ágil, quizás parece que algo rápida. No tendría nada de malo, quitando el detalle de que, en los momentos de calma, el ansia por ver más peleas va creciendo dentro de nosotros. Los combates están bien, con sus momentos de charla, estrategia, provocación y muerte, todo esto acompañado del erotismo y de la sangre que ya mencioné antes.
-Pero, ¿a qué viene tanto momento caliente?-
Shuichi se convierte en un perro de peluche gigante y tiene la misma cualidad que todos los disfraces de peluche: dan un calor infernal. ¿A qué viene eso del disfraz? Pues porque cuando Suichi se transforma, además del aspecto de perro de peluche/juguete, tiene una curiosa cremallera en su espalda que, al bajarla, da acceso a un interior rosadito, húmedo y no sé si con ciertas fragancias marinas. Y ya sabemos qué es lo que pasa con las cavidades que cumplen esas condiciones, que hay personas que sienten la necesidad de "entrar". Por eso las chicas de esta serie que acaban dentro (vaya frase) lo hacen vestidas con un bañador, con sugerentes conjuntos de lencería o desnudas por completo, porque al igual que para follar, cuanta menos ropa, más puntos de destreza. ¿Y por qué entran? "Para ser uno con el EVA, Shinji", y para manejar al protagonista como si fuera un mecha acolchado. Es un concepto algo raro, pero una vez visto en la serie, se entenderá perfectamente. También os digo que podrían dejar de esmerarse tanto en los encajes de los sujetadores o de las bragas de las chicas, poner algo más simple y práctico, sobre todo para dibujar. Pero allá cada uno con su tiempo y su presupuesto.
De todas formas, volviendo al tema de la historia, ésta se desarrolla de manera natural. Dentro de un mundo parecido al nuestro donde una nave extraterrestre se estrella y el alienígena superviviente te pide recolectar unas monedas que han caído en la zona. Porque a él le da pereza y prefiere leer manga y estar tirado a la bartola, como si al creador de esta historia se hubiese inspirado en Gantz y Keroro Gunsou al mismo tiempo. Tal es la incongruencia que este extraterrestre cumple el deseo de quien le entregue una moneda. Y ya no es solo el detalle de tener un poder ilimitado para algunas cosas como la modificación humana, siendo una raza que desconocía hasta ese momento, sino que también demuestra poder para hacer lo que quiera, pero que no le apetece hacerlo. Vamos, que tenemos a un visitante extraterrestre más vago que los pelos de mi culo. Ya no me paro mucho a pensar en el detalle de coger a cuantos humanos aparezcan por ahí para "hipnotizarlos" y recuperar todo, pues son "detalles" que dejan a la trama a la altura del lodo en mis zapatillas.
-Yo tampoco puedo creerlo-
No obstante, la tontería no termina aquí. Si a cualquier humano le dan la opción de cumplir su deseo, ¿por qué no hacerlo en base a lo que tiene que hacer después? Si el primero quizás pringue por desconocimiento, el segundo ya tiene que ir un poco más espabilado, más sobre todo cuando le piden encontrar 100 monedas para un poder mucho mayor, algo capaz de provocar un cataclismo. ¿Por qué no pedir un superpoder capaz de localizar cualquier moneda tirada por ahí? No, por dios, eso ya es mucho pedir, mejor ponme unas tetas delante que se me ha olvidado cómo botan.
La coherencia con los propios personajes no es la ideal. Ya decía antes que eran unos hipócritas y con razón. Si al principio algunos no quieren matar (como puede ser el protagonista), después acaban alegrándose por ello. Y también están los personajes que atacan con crudeza para luego perdonar la vida, porque en realidad no querían hacer daño. Eso sí, un par de capítulos antes arrancaron alguna cabeza por pura amistad. O mismamente el caso de una psicópata, a la que le dan igual las consecuencias de sus actos, pero que después se apena por ellos en plan "qué pobre que soy que he tenido que llegar a estos extremos". Por no mencionar lo de "lo nuestro es solo temporal y para resolver el tema con mi hermana" pero si le pasa algo al protagonista, se ponen a llorar para luego hacer como si nada. O invitarlo a su casa con la excusa de salir temprano al día siguiente para buscar monedas, pero proponerle al momento ver una película para terminar echando un polvo. Literal. No sé, muchacha, si me invitas a ver una película y después a que te empotre, ya te digo que no vas a despertarte muy temprano. Y si lo haces es para pedir más.
Pero qué más dará si esto es una serie para adolescentes que solo quieren ver peleas, sangre y algo de pechuga. La consistencia que importa es la de los fluidos cuando las chavalas se meten dentro del protagonista. Que esto me recuerda a otro detalle en el que las chicas comienzan a enamorarse de Shuichi. Así por sus ovarios. O por los cojones de algún guionista o escritor, seguramente yanki, que justifica aquel monólogo de Goyo Jiménez donde mencionaba que en todas las películas americanas el sexo es algo primordial porque no sabes si vas a morir ese mismo día. Y ya no me paro con la costumbre que tienen los japoneses de mostrarnos en sus animes a personajes que viven solos en la adolescencia, sin ver a sus padres y sin que sepamos cómo consiguen el dinero necesario para sobrevivir o mantener los gastos de la casa. O en esa la sensación de que las monedas solo las encuentran los adolescentes del instituto (o institutos) de la zona. ¿Qué un adulto encuentre una moneda? Eso es algo que no se sostiene. Mejor que haya varios chavales del mismo instituto y que no se haya mencionado nada sobre ello. Ni un rumor ni nada.
-Dani, te has dejado algunas cosas sin mencionar, como el tratamiento de los personajes-
Creo que he sido suficientemente claro para no dejar dudas acerca de cómo han llevado el tratamiento de los personajes en esta serie, pero si queréis más, no os lo voy a negar. La evolución es nula. Así de claro. Aunque haya cambios en los personajes, su hipocresía echa a la basura todo el trabajo realizado. Sí tienen una caracterización definida cuando los conocemos por primera vez, pero esto varía con sus mentiras y cambios de comportamiento. Por lo que no sabemos si evolucionan o directamente son todos unos cretinos a los que les hacen falta dos manos de hostias para convertirlos en miembros aptos para la sociedad. Ahí ya no me meto. Podría buscar algo de información en el manga, pero no es mi trabajo. Aquí solo reseñamos anime. Si alguien quiere hacer una analítica del manga, es libre de contactar con nosotros para que le dejemos un hueco en el calendario.
-Seguro que fue un perro del fansub-
Y a la nada nos vamos ahora. Perdón, al final, si es que a eso se le puede llamar final. Pues tenemos un cierre de historia que "reinicia" un poco lo relatado para dejarnos con la duda de cómo va a evolucionar la trama a partir de ese momento. Aunque eso es algo que el estudio debería de poder hacer bien si le da la gana. Mientras tanto, vayamos con el siguiente apartado.
>Listado de personajes
>Shuichi Kagaya. Es el protagonista. Este introvertido estudiante tiene un problemón y es que, por alguna razón que no recuerda, se puede convertir en un "monstruoso" peluche gigante con forma de perro superesponjoso. Tiene una fuerza extraordinaria y un olfato que puede detectar cualquier cosa cuando el argumento lo requiere. Como oler a una joven que justo acaba de bajar del tren estando él dentro de una casa abandonada a varias decenas de metros. Sin embargo, no huele a otras que se encuentran justo detrás de él porque "el aire soplaba en el otro sentido". Quitando eso, no se sabe si el chaval es un poco tonto o tonto del culo porque, siendo un adolescente, no hay razón por la cual se puede avergonzar o acobardar por tener a un bomboncito en pelotas delante de él que le proponga peli, mantita y delicioso.
>Clair Aoki. Es el "bomboncito". Vale que puede sonar sexista, tanto como para invocar a Ana Molina y que deje un comentario cagándose en mi estirpe, pero los datos están ahí. Clair es muy guapa y tiene un carácter un poco tsundere. Por lo que uno no termina de saber bien si quiere matar a todo el mundo o solo jugar con las personas de su alrededor. No obstante, se acaba por encaprichar de un protagonista al que las indirectas del estilo "me desnudo delante de ti" no son suficientes para que lea entre líneas. No es de extrañar que ya pida a la cara un empujón con ariete.
>Tadanori Sanbe. Este muchacho con cara de dummy del Euro NCAP aparecerá sobre la primera mitad de la serie para luego desaparecer completamente porque sí. Es uno de los chicos que se encuentran al buscar monedas y, aunque poderoso, tiene unos valores de moral un tanto peculiares.
-Oh, no, se han escapado las copias de Ayanami-
>Miku Aihara. Esta joven, también afectada por la búsqueda de monedas, tiene el poder de hacerse invisible. Quizás el deseo más inteligente de todos porque no afecta al aspecto físico y porque tiene una utilidad más grande en el mundo real.
>Elena Aoki. Es la hermana de Clair. Al igual que ella, tiene un carácter algo difícil. Por un lado quiere matarte, por el otro no y está enamorada (o parece estarlo) de Shuichi. O, al menos, le tiene mucho aprecio.
>Chihiro Yoshioka. Esta joven, que no duda en despelotarse ante el protagonista, escogió la posibilidad de entender mejor a los animales. No sé si a los japoneses les gustó la serie "Capitán Planeta", pero en ella había un chico con el anillo "Corazón" que encantaba a los animales o no sé qué tonterías. Era el superpoder más inútil de todos y en esta serie no será menos. La única característica que tiene es que se le ven orejas de gata, zorra o no sé qué animal. En fin…
>Isao Kasuga. Alias el "McEnroe" de la serie (si sois fans del tenis sabréis por qué). Este chaval tiene uno de los poderes más interesantes de todos y es capaz de manejar la biomasa a su antojo. Es capaz de hacer crecer plantas y árboles en tiempo récord. ¿Tienes hambre? Pues te coge unas semillas de sandía, las posa en la tierra, pone la mano sobre ellas y voilá, sandía para todos.
>Nana Mifune. Compañera de clase de Shuichi. Esta joven parece que tiene cierta atracción por él (si cuando digo que están a un paso del harem no me quedo corto), aunque es muy tímida. Ve como su crunch se aleja en manos de una diosa que tiene todo lo que a ella le falta: curvas. Termina por coger la recomendación para la universidad que iba dirigida a él.
>Madoka. Este caballero dirige un grupo de recolectores de monedas. Su rudeza y brutalidad parece que hacen buenas migas con su integridad moral respecto al compañerismo, porque no dejará que ningún miembro de su grupo fallezca ni se quede atrás.
>Sayaka Koyanagi. Es la líder de un grupo de recolectores que podrían bautizarse como los pringados. Tienen unos poderes penosos (al menos la mayoría) y se dedican a buscar las 100 monedas para evitar el cataclismo.
>Ikeuchi. Si en una serie alguien parece que va a pringar muy fuerte por tener cara de pringado, Ikeuchi es uno de ellos. Quizás el que más. Ya no solo por la cara, su comportamiento de gilipollas ayuda mucho en esa deducción.
-Goteras doradas-
>Alien. Como esta palabra indica, este extraterrestre es el causante de la búsqueda de las monedas. Que vaya tontería lo de otorgar poderes a los humanos porque entiende a la perfección nuestra raza y eso que acaba de llegar. Lo de pedir 100 monedas para un deseo mucho más poderoso con tal de recuperar a sus compañeros cuando parece que hay muchos más, es otra tontería. Más cuando es muy probable que haya muchas más contando los que se han "convertido" en monstruos, las que han recogido los diferentes grupos y las que pide. Entonces, ¿para qué pide 100 y así recuperar a sus compañeros sin dejar uno atrás si las cuentas no salen?
>Yota Murakami. El guaperas del grupo de los pringados. A simple vista parece que una racha de viento lo puede tumbar al momento con un noqueo de su flequillo. No obstante, este chico acabará dándonos una sorpresa con lo que es capaz de lograr. A Mutenroshi le ha salido un competidor XD
>Animación y sonido
La animación es uno de los apartados técnicos que más contradicciones me han causado. Si bien por un lado tienen unos primeros planos excelentes (a mí me han encantado), en segundos, ya al fondo, las deformaciones hacen acto de presencia. Sé que es difícil dibujar las piernas turgentes de una adolescente, pero que acaben pareciéndose a las vigas de una construcción… como que no. Eso pasa también con los personajes en la lejanía cuando se encuentran de perfil. Sin embargo, en los combates, los movimientos están genial. Se nota que no es un trabajo de ufotable, pero PINE JAM ha estado a la altura.
De toda formas, hay aspectos o detalles que podemos pasar por alto porque no interesan o porque nos da igual. Eso a título personal de cada uno. Por poner un ejemplo, a la mayoría de monstruos los veremos convertirse en sombras con los ojos rojos, quedando en un aspecto genérico como si fueran los masillas de los Power Rangers. Vale que molaría más un aspecto único para cada uno, pero aquí han decidido ahorrarse disgustos y dejar que la imaginación no se convierta en un hándicap. Esta es una pelota que está en el tejado del mangaka creador de esta historia. Que hayan optado por generalizar a los enemigos es porque la historia no está todo lo pulida que debería. Eso o hay alguna razón que no se ha mencionado y que explica todo eso. Pero como no la indican, optaré por la opción más sencilla: el artista creador no tenía ganas por hacer su trabajo.
-Jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja... cuando termine dice-
Tienen un buen trabajo en la iluminación y con el juego de sombras. A decir verdad, han dejado un resultado excelente en este aspecto. Respecto al movimiento, parece que en algunos momentos faltan frames, pero es casi despreciable. Supongo que será la copia que acabó en mis manos. Quién sabe.
Respecto al sonido, me he llevado una sorpresa y para bien. El audio y la mezcla están a un buen nivel. El doblaje no tiene gazapos y, lo mejor de todo, es la música que acompañan. Cierto que la mayoría son temas instrumentales, pero tendremos algunos temas sueltos que van interpretados por un cantante o por coros. Para mí todo un acierto.
Como opening tenemos a "Altern-ate-", interpretado por H-el-ical. Grupo que ya colaboró en series como The Faraway Paladin, Magatsu Wahrheit -Zuerst- o Shuumatsu no Harem. Para el ending tenemos en cambio el tema "Ame to Taieki to Nioi". Cantado por Mili, tiene otras colaboraciones en series como Goblin Slayer, Merc Storia, Shokei Shoujo no Virgin Road o Ghost in the Shell: SAC_2045.
LA NOTA
Llegamos al fin de esta reseña con un histórico que no acompaña para una nota decente. La primera piedra en la bolsa que hunde a Gleipnir es un final abierto que nos deja con dudas acerca del cierre de la historia. No me vale la excusa tan machacada de que ya saldrá una segunda temporada. No, no cuela. Si quisieran sacarla ya estaría anunciada y, a día de hoy, mientras escribo estas líneas, no se sabe nada. Y dudo que sepamos algo. Acabará en el mismo saco de las series que empezaron algo y dejaron la historia a la mitad. El siguiente punto a tener en cuenta es un tratamiento de los personajes bastante deplorable. Lo siento, pero es así. No puedo comprender que una historia que tiene una base interesante, aunque algo repetida, acabe con una gestión de personajes tal que no sabemos si van o vienen, o si son buenos o malos. Porque aquí todo el mundo cambia de opinión como de calzoncillos (o incluso más).
Técnicamente no es un portento, pero está a un gran nivel y la OST me ha encantado. Pero como los apartados técnicos no valen para la nota, los del estudio Pine Jam se van a tener que joder. Así de claro lo digo. Por esa razón, la nota de Gleipnir no va a superar las de otras series que nos han dejado a medias, bajando todavía más hasta una F que puede incluso saber a escasa.
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