AÑO 4
Por norma general me considero una persona que asocia el buen hacer de una anime al estudio que está detrás. Lo cual me ha valido para encontrarme con sorpresas agradables, como es el caso de Production I.G o Gainax, y otras que no lo son tanto, como fue el caso de Bones o Gonzo, viendo en estos últimos casos como el valor del estudio se desplomaba en picado a cada anime que sacaban. Pero, ¿creéis posible el hecho de que, en vez de seguir una línea descendiente, este valor se esfumase completamente de la noche a la mañana? Esta pregunta, que por cierto nunca me llegué a plantear en su día porque estaba más interesado en ver los animes que en analizarlos, es la que resolveremos hoy gracias a...
"Un insulto al género de la fantasía"
Emitida entre el 7 de enero y el 31 de marzo de 2016, Musaigen no Phantom World es una de las propuestas que, en forma de anime, nos tenía preparado el estudio Kyoto Animation para dicho año. Una empresa que ya conocemos bastante bien en este blog gracias a animes como Kyoukai no Kanata, Hyouka o Chuunibyou demo Koi ga Shitai, por lo que me ahorro el tener que presentárosla :D
Dirigida por Tatsuya Ishihara y con la participación de Fumihiko Shimo como compositor de la serie, la obra que nos ocupa se mueve entre los géneros de la acción, la comedia y lo sobrenatural para dar vida, o más bien adaptar, la serie de novelas ligeras escritas por Soichiro Hatano e ilustradas por Shirabi. Siendo éste un punto que aprovecho para remarcar el hecho de que nos encontramos ante una ADAPTACIÓN, con el objetivo de ir preparándoos para lo que está por venir.
Y como no quiero que me olvidéis este dato voy a pasar olímpicamente de la sinopsis (que ya entenderéis el motivo por el que no la considero importante en este caso) para meterme de lleno en el resumen de los trece capítulos que componen este trabajo. Por lo que idos armando de paciencia que falta va a hacer. Sobre todo si sois fans incondicionales de la misma XD
En la imagen la pequeña Ruru y Haruhiko Ichijo, el protagonista de esta historia.
"A raíz de un incidente de hace más de una década, el cerebro humano sufrió un gran cambio. Realidad y ficción se mezclaron y una gran cantidad de entidades imaginarias aparecieron en el mundo".
"¿Que es un espectro? Un espectro es un término que se emplea para fantasmas, youkai, monstruos y otros seres sobrenaturales. Que eran imaginarios o solo perceptibles por ciertos humanos. Hace más de diez años, un edificio de una compañía llamada Alayashiki fue atacada por terroristas y se liberó un virus que infectaba el cerebro. La infección afectó al público en masa, lo que provocó cambios en el cerebro. Como resultado, todos comenzaron a percibir a los espectros. Es decir, los espectros aparecieron mientras el muro entre realidad y mito se venía abajo. Además, los infantes lactantes adquirieron superpoderes y fueron naciendo más niños como nosotros, capaces de enfrentarse a los espectros. La mayoría de los espectros son inofensivos pero algunos pueden afectar a la gente. Aquellos que tenemos poderes formamos grupos dentro de nuestras escuelas para contener o ahuyentar a los espectros problemáticos.
Los espectros son alucinaciones reales, nacidas del cerebro humano. Vivimos en un mundo inestable donde la línea entre realidad y ficción no está tan clara."
Partiendo de esta introducción, la trama nos presenta a Haruhiko Ichijo, un chico de secundaria que asiste a la academia privada Hoshea desde el mes de abril y cuyo mayor hobby es la lectura. Y que forma parte de, junto a su amiga Mai Kawakani, del club de cazaespectros de este centro educativo gracias al poder que ambos poseen. Por lo que los chicos tomarán parte en la lucha contra los espectros. Una labor que no aparenta ser muy apropiada para su edad pero que les aporta recompensas, en forma de especias, que no le vienen nada mal a Mai para subsistir. No obstante y como los espectros empiezan a mermarles sus recompensas, los chicos toman la decisión de ampliar su grupo, siendo en este momento cuando entra en escena Reina Izumi, una chica más joven que ellos a pesar de contar con un enorme poder. Por lo que su incorporación se convierte en una imperiosa necesidad a pesar del nimio detalle de que su poder rivalice con el de Haruhiko hasta el punto de dejarlo obsoleto. Tal y como nos podemos dar cuenta por nosotros mismos sin necesidad de esperar a que Mai saque a relucir el tema en una conversación. Y aquí podríamos terminar con el episodio para adentrarnos en los despropósitos que nos van dejando sus primeros compases.
Y es que, más allá de lo absurdo del planteamiento que da origen a toda la historia, estos primeros veinte minutos nos dejan ante la típica escena ecchi del casanova, las tortas gratuitas con las que "pretenden" corregir la actitud del muchacho, el voraz apetito de la supersaian de Reina o, lo que resulta todavía más estúpido, la necesidad de que Mai se refriegue los pechos para que su poder se materialice. Que digo yo que este será el de hacer sangrar sangrar por la nariz a más de uno, porque sino ya me diréis que necesidad hay para esto. Ah! y como extra os adelantaré que, después de esto, aun hay hueco para hacer el ridículo. Como podemos descubrir a través de ese baile de limbo. En fin.
Si el primer episodio ya era para tomarlo con calma, el segundo va un paso más allá y convierte lo que sería una trama interesante, en un autentico circo. Y es que tras la presentación de Koito Minase y la resolución que le dan al caso del robot fantasma, los chicos se ven involucrados en el caso de un ovni diminuto que se dedica a sacar fotos de chicas en ropa interior. Por lo que excuso deciros nada más de lo que ocurre a continuación a parte de remarcar el parecido que tiene Ruru, la cual por cierto no vive con el protagonista por lo que ya me diréis cómo pudo haberlo levantado de la cama al inicio del episodio anterior, con la Sumomo de Chobits.
Como todos los "buenos" animes, el que nos ocupa aprovecha su tercer episodio para irse por las ramas usando la escusa de los dos espectros que están increpando a los peatones que pasan por un puente. Por lo que nuestros chicos se desplazarán al lugar para regresar con un objetivo, el de encontrar a una persona tan fuerte como Mai que le pueda ayudar, que pronto se trunca por la vía rápida (la de copiar los recuerdos de Mai en Haruhiko) no sin antes dejarnos ante lo que parece ser un homenaje a Ranma 1/2. Claro que para llevar a cabo su nuevo plan los chicos necesitarán ayuda y aquí es donde entra en juego Arisu Himeno, la profesora de los chicos (que a saber qué estaba haciendo con el oído pegado a la puerta del aula) y su fantástica idea de organizarles una cita para que puedan alcanzar su meta.
Como era de esperar, este plan no dará resultado, por lo que tendrá suceder una colisión de cabezas (literalmente) para que todo funcione. Madre de Dior!, pero ¿en qué cojones están pensando estos guionistas? Y así, con los recuerdos de Mai copiados en nuestro protagonista, dará comienzo el enfrentamiento contra este fuerte enemigo que, al final, resultará no ser tan poderoso como parece e incluso tener motivos para luchas contra Mai. En fin, sin comentarios XD
De una manera un tanto tonta, el cuarto capítulo de la serie tira del tema de las posesiones para tener una escusa con la que hablar de los problemas familiares. Y lo hace usando una trama mucho más dramática de lo que hemos visto hasta ahora con el fin de situarnos en contexto de manera que podamos comprender los motivos que llevan a Reina a actuar de la manera en la que lo hace. Pues a pesar del hecho de que, en mayor o menor medida, todos toman parte en esta historia, en este caso nos encontramos ante un episodio en el que el protagonismo recae únicamente sobre esta chica.
Centrado en la figura de Koito Minase, y siguiendo el camino del anterior, el quinto capítulo nos sumerge en la vida de esta chica para que la comprendamos mejor, utilizando para ello la escusa de un nuevo espectro que se dedica a atacar las gallineros de los colegios. Por lo que no sólo descubriremos datos interesantes acerca de su vida privada sino que también asistiremos al acercamiento que se produce entre esta solitaria y el grupo de nuestro protagonista. El cual, mira tú por donde, gana ahora un nuevo miembro con la incorporación de Kurumi Kumamakura, la niña que los seguía a todos los lados y que tiene toda la pinta de jugar un papel importante en este anime junto al extraño dispositivo que Haruhiko recuperaba tras la lucha contra el robot fantasma del segundo episodio. Pero antes de pasar a otro episodio permitirme apuntar que la profesora sigue con su manía de espiar y que Haruhiko ya se lleva parte del trabajo hecho de casa, por lo que Reina no hará nada en esta ocasión :P
Dedicado en exclusiva a la "presentación" de Kurumi Kamamakura, el sexto capítulo nos presenta una situación a la que incluso el avispado de Haruhiko da veracidad a pasar de no diferir en exceso de la que nos dejaba Reina con su autobús. Por lo que de buenas a primeras ya nos encontramos con un hermoso ZASCA. No obstante cabe mencionar el hecho de que, por mucho que se empeñen en disfrazarlo con un trasfondo personal y sentimental, no debemos de caer en la trampa de pensar que estamos ante algo bueno, ya que en realidad nos encontramos ante veinte minutos de relleno cuyo mayor valor es el de querer tirarme abajo la conclusión a la que había llegado en el capítulo anterior.
Planteado como el típico capítulo de miedo que tanto estaba de moda hace algunos años, el séptimo episodio nos plantea una subtrama bastante floja que se va a tomar viento gracias a la ayuda que le presta el slice of life. Porque se ve que estos dos géneros casan la mar de bien. Tanto que es aconsejable evitar el episodio entero. Aunque ello supongo perderse la basura de final que los chicos de Kyoto Animation idearon para el mismo. Y ojo porque éste no es el mayor ZASCA que se le pueda dar, ya que el mismo episodio nos deja ante la frase que mejor define el bodrio que tenemos entre manos "Supongo que nuestros ritmos circadianos se salieron de control por las lluvias". Maravilloso, oiga. Como también es maravilloso el hecho de ver a todo el mundo dormido y que la trama no le preste atención o que no hayan tenido nada mejor que hacer que meter al gato de schrödinger en la ecuación. No fuera a ser que el anime no estuviese destacando lo suficiente entre los de su categoría XD
¿Y qué pensáis que sigue a un capítulo de relleno? Pues otro, por supuesto. Y si puede empeorarlo todo todavía más, mejor que mejor, como es el caso del octavo episodio. El cual recurre a los cansinos baños termales para dejarnos ante el fanservice más forzado que he visto hasta la fecha y una buena ración de chicas exuberantes en traje de baño. Porque de lo que es la trama mejor no hablar. Y menos aún después de meter por medio, como quién no quiere la cosa, a H.P Lovecraft. Vamos, que estamos ante un truño de proporciones épicas.
Nuevo capítulo y nuevo relleno con la particularidad de la primera escena tras el prólogo del noveno episodio es más falsa que un billete de 60€. Y es que en vez de progresar, la trama opta por tirar de clichés para dejarnos ante la típica obra de teatro escolar que, en esta ocasión y para no desentonar tanto, se verá amenazada por un espectro. Por lo que todo el grupo se verá envuelto en esto con el fin de solucionar el problema en el que ellos mismo acabarán involucrados. Y poco más tengo que decir al respecto, la verdad, a parte de dejaros entrever las "ganas" que tengo de ver con que nos "sorprende" la gente de Kyoto Animation en el próximo episodio XD
Siguiendo la espiral descendente de la serie, el décimo capítulo alcanza cotas inimaginables gracias al típico episodio de los fuegos artificiales. Sí amigos, sí, aquí va un refrito detrás de otro. Aunque eso sí, para intentar disimular lo indisimulable la trama recurrirá a algo que un servidor ya se veía venir desde el primer episodio, haciendo que Ruru alcance un tamaño humano. Lo que dará juego a la aparición de situaciones más típicas de un slice of life que del trabajo que nos ocupa (o eso sigo pensando yo) hasta la entrada en escena del espectro malvado de turno. Ya que en ese momento la propia trama dará un giro para mostrarnos los FAILS más grandes que hemos visto hasta el momento gracias a una Reina que ya pasa de esperar a que los espectros estén debilitados para absorberlos y un Haruhiko al que vemos caer al mar, desde una altura considerable (con lo que de buenas a primeras la plancha que se va a comer ya va a ser considerable), y que nos sorprende a todos al demostrarnos que es inmortal. Pues otra explicación no le acabo de encontrar a lo que ocurre sabiendo que en la zona en la que cae el agua a duras penas le alcanza las rodillas.
De una manera poco previsible, el capítulo once ataca a toda lógica al llevar un paso más allá lo que le pasaba a Ruru en el capítulo anterior haciendo que Haruhiko se convierta en un niño pequeño. Y es que si lo pensamos un momento nos daremos cuenta de cómo nos habían dicho, al comienzo de la serie, que los espectros siempre habían estado ahí. Y si eso es real, ¿cómo es que no supimos de ningún otro caso como este? Y que nadie me salga con la explicación que dan en la serie porque además de estar cogida por los pelos, abre las puertas a posibilidades que no le hacen ningún bien a la trama. Como puede ser el hecho de que Haruhiko pueda acabar con cualquier espectro él solo. Pero dejemos esto a un lado y volvamos a la historia para detenernos en cómo vence nuestro protagonista al espectro de marras sin ahogar por el camino a Mai. Sorprendente. Y como guinda el mejor de todos los misterios, ¿cómo podía haber estudiado Haruhiko en la academia Hoshea cuando era pequeño si al principio de la serie nos dicen que se mudó a ella en abril?
Con un prólogo que no desentona con el resto y un comienzo de los más normalito, de no ser por la mágica aparición en escena del dispositivo que se llevará Haruhiko tras el combate del segundo episodio, el capítulo doce opta por amenazarnos con otros veinte minutos de relleno hasta que aparece en pantalla Carmen Sandiego (o Enigma). Un espectro bastante poderoso que cuenta con la habilidad de robar los poderes de las personas e incluso puede poseerlas. Dándole así un giro de 180º a la trama para llevarnos a una situación de falso estancamiento. Pues la paz que se respirará en el ambiente es la calma que precede a la tormenta. La cual, por cierto, justamente tenía que aparecer ahora ¿no Kyoto Animation? ¿Me podéis explicar para qué diablos habéis hecho un anime de trece capítulos? En fin, planteamientos maravillosos que nos dejan estos nipones justo en el episodio en el que al fin aparece un progenitor de nuestro protagonista. Y yo que pensaba que estábamos ante la típica historia en la que nunca miramos el pelo a los padres... XD
Sin previo, no fuera a ser que no les llegase el tiempo, y contra todo pronóstico, porque la verdad es que yo ya no daba un duro por este anime, Musaigen no Phantom World cuenta con un cierre interesante y entretenido en el que la acción y el suspense se turnan mientras avanzamos por los minutos para saber cómo termina esta obra. No obstante y a pesar de lo bien que pinta lo que acabo de decir, no nos debemos de olvidar de la serie ante la que estamos. Puesto que de otro modo no tendrían cabida los FAILS tan grandes que nos encontramos en estos veinte minutos. Empezando por el arreglo del dispositivo y su posterior hackeo por parte de Albrecht, el oso de Kurumi Kumamakura, (OMAIGAR!!!) y terminando por esa conspiración que nos dejan caer, como quien no quiere, de la peor manera posible. Pues ni es adecuado este momento para descubrir este hecho, para el cual ni nos han dado pistas previas, ni lo es la forma en la que se resuelve. Y es que en menos de un segundo pasamos de ver a Koito Minase enfrascada en descubrir toda la verdad e incluso implicar a la profesora Arisu en el pastel, a luchar codo a codo con ésta contra enigma y olvidarse por completo de todo lo anterior. En fin, que es mejor dejarlo estar. No vaya a ser que tenga que coger un vuelo a Japón para "felicitar" personalmente a cierto estudio de animación.
Dentro ya de los apartados técnicos y como era de esperar sabiendo del estudio que se encuentra detrás de este anime, el correspondiente a la animación es el que más destaca en este trabajo, presentándonos escenas muy detalladas y sumamente cuidadas. No obstante y bajo mi punto de vista, la calidad final dista mucho de alcanzar a la que descubríamos en animes como Kyoukai no Kanata o Hyouka. Lo cual no quita que esté bien, ojo, sino que simplemente da un paso atrás con respecto al nivel que me esperaba encontrar por parte de los chicos de Kyoto Animation. Quienes en esta ocasión cuentan con la ayuda de
Animation DO y Studio Blue para sacar adelante este apartado.
Por su parte, la banda sonora nos deja algunos temas interesantes, aunque debido al propio anime la mayoría de ellos pasan completamente desapercibidos, por lo que me limitaré a señalar que el opening titulado "Naked Dive" corre a cargo de SCREEN mode y el ending "Junshin Always" está firmado por Azusa Tadokoro.
LA NOTA:
Siendo realistas, Musaigen no Phantom World ya nos avisaba desde el primer momento de lo que se nos venía encima, con esa introducción en la que no sólo se mezclaba ficción y realidad con alegría, sino que incluso también metían en el lote al virus que había afectado el cerebro de toda la humanidad para hacer esto posible. Lo de cargarse toda lógica, me refiero. Porque ya me diréis a mí cuantos virus conocéis capaces de dar superpoderes al personal en vez de dejarlo loco como debería de ser el caso si tanto apelan a la realidad. Porque esa es otra buena. Para todo aquel que tenga un poco de rodaje en el género de la fantasía, sabrá que ésta gusta de partir de un mundo real, y por tanto atado a las restricciones de nuestra realidad, para llevarnos a otro en el que cualquier cosa puede acabar pasando. Y es que, llegados a este punto, la única limitación existente es la que marque el propio escritor para su obra. La cual, como es de imaginar, tiende a marcar una línea bastante clara entre ambos mundos, a fin de separarlos lo máximo posible o, en caso de que se acaben "mezclando", hacer que el lector/espectador sepa perfectamente en cual de los dos mundos está en todo momento. Y, sin embargo, la obra de Kyoto Animation hace desaparecer ese muro para dar paso a una obsesión casi constante por dar el toque más científico posible por medio de datos que resultan ser veraces. Lo cual no sólo rompe con la premisa del género fantástico que os comentaba, sino que lo arrastra todo a un terreno al que nunca ha pertenecido, el de la ciencia ficción.
Llegados a este punto es bastante obvia la pregunta que rondará por la cabeza de más de uno, ¿en qué me baso para afirmar lo anterior? Como obvia también es la respuesta a la misma, ya que sólo nos tenemos que detener en una simple frase "Los espectros son alucinaciones reales, nacidas del cerebro humano" para darnos cuenta del camino sin salida en la que se han metido los chicos de Kyoto Animation por iniciativa propia. Una frase que puede estar mejor o peor traducida pero que, cuando la ponemos en conjunto con lo que se nos está contando, nos sirve perfectamente para corroborar que esta serie carece de toda lógica y que, aún así, tratan de alcanzar con las clases express de ciencia que os indicaba. En un intento absurdo por llegar a ninguna parte.
No obstante, el mayor error del viaje a ninguna parte que tenemos entre manos no es la trama en sí, ni los derroteros que sigue y ni tan siquiera la falta de lógica, sino el estar firmada por un estudio que, lo quieran o no, ya había logrado hacerse un nombre en esta industria por medio de sus animes. Y es que si Musaigen no Phantom World estuviese realizado por uno de los estudios del montón (empezando por el fondo) no habría pasado nada, pues al fin y al cabo todo anime tiene su público objetivo y no voy a ser yo quien me disponga a cambiar los gustos de la gente más allá de entrar a debatir en el valor de una u otra serie, claro está. Se habría quedado con la peor nota y santas pascuas. Pero en este caso la empresa que está detrás es tan prometedora, y el fiasco tan llamativo, que me he visto en la obligación de dejar las cosas lo más claras posibles al respeto.
Como también quiero dejar a la vista el otro gran fallo por parte de los chicos de Kyoto Animatión, al haber recurrido de una forma tan descarada y horrible al fanservice. En una carrera por el todo vale que nos deja "lindezas" como la de ver a Mai frotándose los pechos, porque lo de remarcarlos y alzarlos se les debía de quedar corto, para invocar su poder. El cual, para más inri, se nos explica mucho más tarde con las referencias directas que ella misma hace a sus riñones como fuente de su poder. Por lo que a mí sólo me viene una pregunta a la cabeza en este momento, ¿dónde está Ana Molina cuando se le necesita?
Dicho lo cual voy a aprovechar para apuntar dos cosas: que estamos ante una adaptación bastante "libre", por decirle algo suave y dejar bien claro quién es el culpable de lo que vemos en pantalla, de la obra en la que se basa (por lo poco que he leído en las novelas ligeras Haruhiko fue un sujeto de prueba de Alayashiki. Que manda narices, oiga) y que, para animar todavía más la cosa, el anime no se corta lo más mínimo a la hora de recurrir a todo cliché y refrito habido y por haber (faltaría más) con el objetivo de "entretener" a la audiencia. Por lo que tan sólo me queda echar la mano al Sistema de Valoraciones para hacer entrega a este BODRIO de la nota que se merece. Y que no es otra que una G.
Los espectros son alucinaciones reales, nacidas del cerebro humano. Vivimos en un mundo inestable donde la línea entre realidad y ficción no está tan clara."
Partiendo de esta introducción, la trama nos presenta a Haruhiko Ichijo, un chico de secundaria que asiste a la academia privada Hoshea desde el mes de abril y cuyo mayor hobby es la lectura. Y que forma parte de, junto a su amiga Mai Kawakani, del club de cazaespectros de este centro educativo gracias al poder que ambos poseen. Por lo que los chicos tomarán parte en la lucha contra los espectros. Una labor que no aparenta ser muy apropiada para su edad pero que les aporta recompensas, en forma de especias, que no le vienen nada mal a Mai para subsistir. No obstante y como los espectros empiezan a mermarles sus recompensas, los chicos toman la decisión de ampliar su grupo, siendo en este momento cuando entra en escena Reina Izumi, una chica más joven que ellos a pesar de contar con un enorme poder. Por lo que su incorporación se convierte en una imperiosa necesidad a pesar del nimio detalle de que su poder rivalice con el de Haruhiko hasta el punto de dejarlo obsoleto. Tal y como nos podemos dar cuenta por nosotros mismos sin necesidad de esperar a que Mai saque a relucir el tema en una conversación. Y aquí podríamos terminar con el episodio para adentrarnos en los despropósitos que nos van dejando sus primeros compases.
Y es que, más allá de lo absurdo del planteamiento que da origen a toda la historia, estos primeros veinte minutos nos dejan ante la típica escena ecchi del casanova, las tortas gratuitas con las que "pretenden" corregir la actitud del muchacho, el voraz apetito de la supersaian de Reina o, lo que resulta todavía más estúpido, la necesidad de que Mai se refriegue los pechos para que su poder se materialice. Que digo yo que este será el de hacer sangrar sangrar por la nariz a más de uno, porque sino ya me diréis que necesidad hay para esto. Ah! y como extra os adelantaré que, después de esto, aun hay hueco para hacer el ridículo. Como podemos descubrir a través de ese baile de limbo. En fin.
Vamos ahí. Y luego dicen que los chicos solo nos fijamos en los pechos pero, ¿alguien pensó en que tal vez si no los pusieran en primer plano esto no pasaba?
Si el primer episodio ya era para tomarlo con calma, el segundo va un paso más allá y convierte lo que sería una trama interesante, en un autentico circo. Y es que tras la presentación de Koito Minase y la resolución que le dan al caso del robot fantasma, los chicos se ven involucrados en el caso de un ovni diminuto que se dedica a sacar fotos de chicas en ropa interior. Por lo que excuso deciros nada más de lo que ocurre a continuación a parte de remarcar el parecido que tiene Ruru, la cual por cierto no vive con el protagonista por lo que ya me diréis cómo pudo haberlo levantado de la cama al inicio del episodio anterior, con la Sumomo de Chobits.
Como todos los "buenos" animes, el que nos ocupa aprovecha su tercer episodio para irse por las ramas usando la escusa de los dos espectros que están increpando a los peatones que pasan por un puente. Por lo que nuestros chicos se desplazarán al lugar para regresar con un objetivo, el de encontrar a una persona tan fuerte como Mai que le pueda ayudar, que pronto se trunca por la vía rápida (la de copiar los recuerdos de Mai en Haruhiko) no sin antes dejarnos ante lo que parece ser un homenaje a Ranma 1/2. Claro que para llevar a cabo su nuevo plan los chicos necesitarán ayuda y aquí es donde entra en juego Arisu Himeno, la profesora de los chicos (que a saber qué estaba haciendo con el oído pegado a la puerta del aula) y su fantástica idea de organizarles una cita para que puedan alcanzar su meta.
Como era de esperar, este plan no dará resultado, por lo que tendrá suceder una colisión de cabezas (literalmente) para que todo funcione. Madre de Dior!, pero ¿en qué cojones están pensando estos guionistas? Y así, con los recuerdos de Mai copiados en nuestro protagonista, dará comienzo el enfrentamiento contra este fuerte enemigo que, al final, resultará no ser tan poderoso como parece e incluso tener motivos para luchas contra Mai. En fin, sin comentarios XD
De una manera un tanto tonta, el cuarto capítulo de la serie tira del tema de las posesiones para tener una escusa con la que hablar de los problemas familiares. Y lo hace usando una trama mucho más dramática de lo que hemos visto hasta ahora con el fin de situarnos en contexto de manera que podamos comprender los motivos que llevan a Reina a actuar de la manera en la que lo hace. Pues a pesar del hecho de que, en mayor o menor medida, todos toman parte en esta historia, en este caso nos encontramos ante un episodio en el que el protagonismo recae únicamente sobre esta chica.
¿Qué diablos hace aquí El Castillo Ambulante?
Centrado en la figura de Koito Minase, y siguiendo el camino del anterior, el quinto capítulo nos sumerge en la vida de esta chica para que la comprendamos mejor, utilizando para ello la escusa de un nuevo espectro que se dedica a atacar las gallineros de los colegios. Por lo que no sólo descubriremos datos interesantes acerca de su vida privada sino que también asistiremos al acercamiento que se produce entre esta solitaria y el grupo de nuestro protagonista. El cual, mira tú por donde, gana ahora un nuevo miembro con la incorporación de Kurumi Kumamakura, la niña que los seguía a todos los lados y que tiene toda la pinta de jugar un papel importante en este anime junto al extraño dispositivo que Haruhiko recuperaba tras la lucha contra el robot fantasma del segundo episodio. Pero antes de pasar a otro episodio permitirme apuntar que la profesora sigue con su manía de espiar y que Haruhiko ya se lleva parte del trabajo hecho de casa, por lo que Reina no hará nada en esta ocasión :P
Dedicado en exclusiva a la "presentación" de Kurumi Kamamakura, el sexto capítulo nos presenta una situación a la que incluso el avispado de Haruhiko da veracidad a pasar de no diferir en exceso de la que nos dejaba Reina con su autobús. Por lo que de buenas a primeras ya nos encontramos con un hermoso ZASCA. No obstante cabe mencionar el hecho de que, por mucho que se empeñen en disfrazarlo con un trasfondo personal y sentimental, no debemos de caer en la trampa de pensar que estamos ante algo bueno, ya que en realidad nos encontramos ante veinte minutos de relleno cuyo mayor valor es el de querer tirarme abajo la conclusión a la que había llegado en el capítulo anterior.
Planteado como el típico capítulo de miedo que tanto estaba de moda hace algunos años, el séptimo episodio nos plantea una subtrama bastante floja que se va a tomar viento gracias a la ayuda que le presta el slice of life. Porque se ve que estos dos géneros casan la mar de bien. Tanto que es aconsejable evitar el episodio entero. Aunque ello supongo perderse la basura de final que los chicos de Kyoto Animation idearon para el mismo. Y ojo porque éste no es el mayor ZASCA que se le pueda dar, ya que el mismo episodio nos deja ante la frase que mejor define el bodrio que tenemos entre manos "Supongo que nuestros ritmos circadianos se salieron de control por las lluvias". Maravilloso, oiga. Como también es maravilloso el hecho de ver a todo el mundo dormido y que la trama no le preste atención o que no hayan tenido nada mejor que hacer que meter al gato de schrödinger en la ecuación. No fuera a ser que el anime no estuviese destacando lo suficiente entre los de su categoría XD
De izquierda a derecha: Koito Minase, Mai Kawakami, Kurumi Kumamakura junto a su osos Albrecht y Reina Izumi.
¿Y qué pensáis que sigue a un capítulo de relleno? Pues otro, por supuesto. Y si puede empeorarlo todo todavía más, mejor que mejor, como es el caso del octavo episodio. El cual recurre a los cansinos baños termales para dejarnos ante el fanservice más forzado que he visto hasta la fecha y una buena ración de chicas exuberantes en traje de baño. Porque de lo que es la trama mejor no hablar. Y menos aún después de meter por medio, como quién no quiere la cosa, a H.P Lovecraft. Vamos, que estamos ante un truño de proporciones épicas.
Nuevo capítulo y nuevo relleno con la particularidad de la primera escena tras el prólogo del noveno episodio es más falsa que un billete de 60€. Y es que en vez de progresar, la trama opta por tirar de clichés para dejarnos ante la típica obra de teatro escolar que, en esta ocasión y para no desentonar tanto, se verá amenazada por un espectro. Por lo que todo el grupo se verá envuelto en esto con el fin de solucionar el problema en el que ellos mismo acabarán involucrados. Y poco más tengo que decir al respecto, la verdad, a parte de dejaros entrever las "ganas" que tengo de ver con que nos "sorprende" la gente de Kyoto Animation en el próximo episodio XD
Siguiendo la espiral descendente de la serie, el décimo capítulo alcanza cotas inimaginables gracias al típico episodio de los fuegos artificiales. Sí amigos, sí, aquí va un refrito detrás de otro. Aunque eso sí, para intentar disimular lo indisimulable la trama recurrirá a algo que un servidor ya se veía venir desde el primer episodio, haciendo que Ruru alcance un tamaño humano. Lo que dará juego a la aparición de situaciones más típicas de un slice of life que del trabajo que nos ocupa (o eso sigo pensando yo) hasta la entrada en escena del espectro malvado de turno. Ya que en ese momento la propia trama dará un giro para mostrarnos los FAILS más grandes que hemos visto hasta el momento gracias a una Reina que ya pasa de esperar a que los espectros estén debilitados para absorberlos y un Haruhiko al que vemos caer al mar, desde una altura considerable (con lo que de buenas a primeras la plancha que se va a comer ya va a ser considerable), y que nos sorprende a todos al demostrarnos que es inmortal. Pues otra explicación no le acabo de encontrar a lo que ocurre sabiendo que en la zona en la que cae el agua a duras penas le alcanza las rodillas.
De una manera poco previsible, el capítulo once ataca a toda lógica al llevar un paso más allá lo que le pasaba a Ruru en el capítulo anterior haciendo que Haruhiko se convierta en un niño pequeño. Y es que si lo pensamos un momento nos daremos cuenta de cómo nos habían dicho, al comienzo de la serie, que los espectros siempre habían estado ahí. Y si eso es real, ¿cómo es que no supimos de ningún otro caso como este? Y que nadie me salga con la explicación que dan en la serie porque además de estar cogida por los pelos, abre las puertas a posibilidades que no le hacen ningún bien a la trama. Como puede ser el hecho de que Haruhiko pueda acabar con cualquier espectro él solo. Pero dejemos esto a un lado y volvamos a la historia para detenernos en cómo vence nuestro protagonista al espectro de marras sin ahogar por el camino a Mai. Sorprendente. Y como guinda el mejor de todos los misterios, ¿cómo podía haber estudiado Haruhiko en la academia Hoshea cuando era pequeño si al principio de la serie nos dicen que se mudó a ella en abril?
Con un prólogo que no desentona con el resto y un comienzo de los más normalito, de no ser por la mágica aparición en escena del dispositivo que se llevará Haruhiko tras el combate del segundo episodio, el capítulo doce opta por amenazarnos con otros veinte minutos de relleno hasta que aparece en pantalla Carmen Sandiego (o Enigma). Un espectro bastante poderoso que cuenta con la habilidad de robar los poderes de las personas e incluso puede poseerlas. Dándole así un giro de 180º a la trama para llevarnos a una situación de falso estancamiento. Pues la paz que se respirará en el ambiente es la calma que precede a la tormenta. La cual, por cierto, justamente tenía que aparecer ahora ¿no Kyoto Animation? ¿Me podéis explicar para qué diablos habéis hecho un anime de trece capítulos? En fin, planteamientos maravillosos que nos dejan estos nipones justo en el episodio en el que al fin aparece un progenitor de nuestro protagonista. Y yo que pensaba que estábamos ante la típica historia en la que nunca miramos el pelo a los padres... XD
Sin previo, no fuera a ser que no les llegase el tiempo, y contra todo pronóstico, porque la verdad es que yo ya no daba un duro por este anime, Musaigen no Phantom World cuenta con un cierre interesante y entretenido en el que la acción y el suspense se turnan mientras avanzamos por los minutos para saber cómo termina esta obra. No obstante y a pesar de lo bien que pinta lo que acabo de decir, no nos debemos de olvidar de la serie ante la que estamos. Puesto que de otro modo no tendrían cabida los FAILS tan grandes que nos encontramos en estos veinte minutos. Empezando por el arreglo del dispositivo y su posterior hackeo por parte de Albrecht, el oso de Kurumi Kumamakura, (OMAIGAR!!!) y terminando por esa conspiración que nos dejan caer, como quien no quiere, de la peor manera posible. Pues ni es adecuado este momento para descubrir este hecho, para el cual ni nos han dado pistas previas, ni lo es la forma en la que se resuelve. Y es que en menos de un segundo pasamos de ver a Koito Minase enfrascada en descubrir toda la verdad e incluso implicar a la profesora Arisu en el pastel, a luchar codo a codo con ésta contra enigma y olvidarse por completo de todo lo anterior. En fin, que es mejor dejarlo estar. No vaya a ser que tenga que coger un vuelo a Japón para "felicitar" personalmente a cierto estudio de animación.
Dentro ya de los apartados técnicos y como era de esperar sabiendo del estudio que se encuentra detrás de este anime, el correspondiente a la animación es el que más destaca en este trabajo, presentándonos escenas muy detalladas y sumamente cuidadas. No obstante y bajo mi punto de vista, la calidad final dista mucho de alcanzar a la que descubríamos en animes como Kyoukai no Kanata o Hyouka. Lo cual no quita que esté bien, ojo, sino que simplemente da un paso atrás con respecto al nivel que me esperaba encontrar por parte de los chicos de Kyoto Animation. Quienes en esta ocasión cuentan con la ayuda de
Animation DO y Studio Blue para sacar adelante este apartado.
Por su parte, la banda sonora nos deja algunos temas interesantes, aunque debido al propio anime la mayoría de ellos pasan completamente desapercibidos, por lo que me limitaré a señalar que el opening titulado "Naked Dive" corre a cargo de SCREEN mode y el ending "Junshin Always" está firmado por Azusa Tadokoro.
Otra muestra del buen hace de los chicos de Kyoto Animation en el campo de la animación.
LA NOTA:
Siendo realistas, Musaigen no Phantom World ya nos avisaba desde el primer momento de lo que se nos venía encima, con esa introducción en la que no sólo se mezclaba ficción y realidad con alegría, sino que incluso también metían en el lote al virus que había afectado el cerebro de toda la humanidad para hacer esto posible. Lo de cargarse toda lógica, me refiero. Porque ya me diréis a mí cuantos virus conocéis capaces de dar superpoderes al personal en vez de dejarlo loco como debería de ser el caso si tanto apelan a la realidad. Porque esa es otra buena. Para todo aquel que tenga un poco de rodaje en el género de la fantasía, sabrá que ésta gusta de partir de un mundo real, y por tanto atado a las restricciones de nuestra realidad, para llevarnos a otro en el que cualquier cosa puede acabar pasando. Y es que, llegados a este punto, la única limitación existente es la que marque el propio escritor para su obra. La cual, como es de imaginar, tiende a marcar una línea bastante clara entre ambos mundos, a fin de separarlos lo máximo posible o, en caso de que se acaben "mezclando", hacer que el lector/espectador sepa perfectamente en cual de los dos mundos está en todo momento. Y, sin embargo, la obra de Kyoto Animation hace desaparecer ese muro para dar paso a una obsesión casi constante por dar el toque más científico posible por medio de datos que resultan ser veraces. Lo cual no sólo rompe con la premisa del género fantástico que os comentaba, sino que lo arrastra todo a un terreno al que nunca ha pertenecido, el de la ciencia ficción.
Llegados a este punto es bastante obvia la pregunta que rondará por la cabeza de más de uno, ¿en qué me baso para afirmar lo anterior? Como obvia también es la respuesta a la misma, ya que sólo nos tenemos que detener en una simple frase "Los espectros son alucinaciones reales, nacidas del cerebro humano" para darnos cuenta del camino sin salida en la que se han metido los chicos de Kyoto Animation por iniciativa propia. Una frase que puede estar mejor o peor traducida pero que, cuando la ponemos en conjunto con lo que se nos está contando, nos sirve perfectamente para corroborar que esta serie carece de toda lógica y que, aún así, tratan de alcanzar con las clases express de ciencia que os indicaba. En un intento absurdo por llegar a ninguna parte.
No obstante, el mayor error del viaje a ninguna parte que tenemos entre manos no es la trama en sí, ni los derroteros que sigue y ni tan siquiera la falta de lógica, sino el estar firmada por un estudio que, lo quieran o no, ya había logrado hacerse un nombre en esta industria por medio de sus animes. Y es que si Musaigen no Phantom World estuviese realizado por uno de los estudios del montón (empezando por el fondo) no habría pasado nada, pues al fin y al cabo todo anime tiene su público objetivo y no voy a ser yo quien me disponga a cambiar los gustos de la gente más allá de entrar a debatir en el valor de una u otra serie, claro está. Se habría quedado con la peor nota y santas pascuas. Pero en este caso la empresa que está detrás es tan prometedora, y el fiasco tan llamativo, que me he visto en la obligación de dejar las cosas lo más claras posibles al respeto.
Como también quiero dejar a la vista el otro gran fallo por parte de los chicos de Kyoto Animatión, al haber recurrido de una forma tan descarada y horrible al fanservice. En una carrera por el todo vale que nos deja "lindezas" como la de ver a Mai frotándose los pechos, porque lo de remarcarlos y alzarlos se les debía de quedar corto, para invocar su poder. El cual, para más inri, se nos explica mucho más tarde con las referencias directas que ella misma hace a sus riñones como fuente de su poder. Por lo que a mí sólo me viene una pregunta a la cabeza en este momento, ¿dónde está Ana Molina cuando se le necesita?
Dicho lo cual voy a aprovechar para apuntar dos cosas: que estamos ante una adaptación bastante "libre", por decirle algo suave y dejar bien claro quién es el culpable de lo que vemos en pantalla, de la obra en la que se basa (por lo poco que he leído en las novelas ligeras Haruhiko fue un sujeto de prueba de Alayashiki. Que manda narices, oiga) y que, para animar todavía más la cosa, el anime no se corta lo más mínimo a la hora de recurrir a todo cliché y refrito habido y por haber (faltaría más) con el objetivo de "entretener" a la audiencia. Por lo que tan sólo me queda echar la mano al Sistema de Valoraciones para hacer entrega a este BODRIO de la nota que se merece. Y que no es otra que una G.
En primera línea parte del elenco que da vida a este olvidable producto.
0 Comentarios