Quiero comerme tu páncreas

AÑO 9

En el día de hoy me adentraré en una de las obras que más pavor me ha ocasionando últimamente debido a su temática. Y es que, si uno ya se emocionó con obras como Tokyo Magnitude 8.0, En este rincón del mundo o Ano Hi Mita Hana no Namae o Bokutachi wa Mada Shiranai, no me quiero ni imaginar lo que ocurrirá con...

> Quiero comerme tu páncreas (a.k.a Kimi no Suizou o Tabetai) (Studio VOLN, 2018, PELICULA)

"Una historia tan delicada como las flores del cerezo"

Estrenada el 1 de septiembre de 2018 en el país del sol naciente, la película que hoy nos ocupa se asienta en los géneros del drama, el romance y el slice of Life, y tiene a su vez su origen en la novela del mismo nombre escrita por Yoru Sumino. Una obra cuya andadura por el mundo de las adaptaciones comenzaría en el 2016, dos años después de su publicación, con el manga ilustrado por Idumi Kirihara y que daría el salto a la gran pantalla un año más tarde, en 2017, con un live action (o película de imagen real) protagonizado por Takumi Kitamura y Minami Hamabe.

No obstante, lo más curioso de todo tal vez esté en el estudio de animación que la firma; Studio VOLN. Una empresa completamente desconocida para nosotros y que sería fundada el 12 de agosto de 2014 por el ex-productor y director de Madhouse, Mita Keiji. Y lo cierto es que motivos para este desconocimiento sí que teníamos, pues hasta el año 2021, recordemos que la peli que nos ocupa es de 3 años antes, este estudio de animación tan solo había participado junto a MAPPA en los animes Ushio to Tora (2015) e Idol Incidents (2017) y firmado dos series más, Karakuri Circus (2018) y Back Arrow (2021) junto a una película a mayores de la que hoy analizamos; Usuzumizakura: Garo (2018)

Y en cuanto al staff que ha tomado parte en este trabajo destacar que la dirección y el guion corren de la mano del por aquel entonces aun novato Shin'ichirou Ushijima, que el diseño de caracteres lleva la firma de Youichi Oka (Motto To Love Ru, To Love Ru: Darkness, Over Drive) y que el trabajo de storyboard se reparte entre Daisuke Yoshida, Tomoyuki Itamura y el propio director.

> Sinopsis:

"Un estudiante de bachillerato encuentra por casualidad un diario titulado "Mi enfermedad y yo", escrito por Sakura Yamauchi, su compañera de clase. En él desvela cómo sufre una enfermedad terminal en su páncreas, quedándole ya unos pocos meses de vida. Así es como la alegre y cándida Sakura y el estudiante, un introvertido amante de los libros, comparten un secreto que da paso a una singular relación de amistad". (Fuente: SENSACINE).

> Personajes:

> Sakura Yamauchi es la chica que da origen a toda esta historia y el personaje que la unirá como si de un buen pegamento se tratase. Lo cual tiene su punto de gracia en vista de la limitada vida que le queda por culpa de la enfermedad terminal que sufre. Por fortuna para ella, y también para nosotros, la joven resulta ser de lo más amena y dicharachera, por lo que esta parte oscura de su vida quedará finalmente en un segundo plano de su día a día.

> Haruki Shiga es el co-protagonista de esta historia y la persona a la que, sin pretenderlo ni esperarlo, Sakura acabará "rescatando". Y es que aquí donde lo veis, este joven, de apariencia completamente normal y corriente, ha decidido distanciarse del resto de la sociedad procurando evitar cualquier interacción con el resto de las personas que lo rodean fuera de su círculo familiar. Lo que convierte a su personalidad en un polo completamente opuesto al de Sakura.

> Kyouko Takimoto. Compañera de clase de ambos chicos, esta joven es la mejor amiga de Sakura y una mujer de armas tomar. No en vano, y como por otro lado se puede intuir por su aspecto físico, la chica no tiene reparo alguno a la hora de decir las cosas a la cara. Incluso aunque no tenga una razón de peso para hacerlo. Y por ello era sumamente evidente el hecho que esta chica terminaría por chocar con nuestro protagonista hasta el punto de hacernos pensar en si no estaremos realmente ante la guardaespaldas de Sakura XD

> Issei Miyata es uno de los muchos personajes secundarios con los que cuenta la trama. No obstante, y si os nombro a este personaje en vez de a otros, como podría ser el ex-novio de Sakura, es porque este compañero de clase de los chicos se convertirá en el mejor testigo para descubrir la evolución que sufre nuestro protagonista tras conocer a Sakura.

> Madre de Shiga, padre de Shiga y madre de Yamauchi. Si bien no sería lo más correcto del todo meter a estos personajes en el mismo lote, el motivo por el que lo hago se debe a la curiosidad que resulta el hecho de haberlos tenido en cuenta en una trama de corte "escolar". Y es que, aunque no dejen de ser más que simples secundarios, estos importantes personajes reflejarán su peso en la historia por medio de las pocas conversaciones que mantienen con sus hijos o la omnipresencia que adquieren cuando estos se acuerdan de ellos. Dejando así constancia de que nos hallamos ante una historia tan natural como humana.

En la imagen Sakura Yamauchi y Haruki Shiga. Los protagonistas de esta historia.

Con un enfoque de lo más directo y cercano, la película que hoy nos ocupa comienza desvelándonos el final; la co-protagonista de esta historia muere. Por lo que, una vez destripado el último acto, la trama pasará a contarnos toda la historia por medio de Haruki, el otro protagonista de la historia y el personaje que cargará con el rol de narrador para que nosotros, como espectadores, podamos comprender como se ha llegado a ese final. Y es que, por mucho que la cosa parezca cantada desde un comienzo debido a la enfermedad terminal que padece Sakura, en este caso más que nunca se aplica el dicho de que una cosa es conocer el camino y otra andarlo. Porque sí, amigos, por mucha idea que os podáis hacer de primera mano, por los datos que nos arroja la historia y teniendo en cuenta el toque sentimental, que no romántico, que la acompaña, lo cierto es que en esta ocasión el autor le supo dar el giro exacto a la misma para que nos sintamos ante un producto de lo más fresco pese a tratarse de un drama que, de otra manera, estoy absolutamente convencido de que no destacaría de entre el resto de trabajos de su género. Lo cual, cuidado, no quiere decir que no hubiese conseguido su objetivo de apelar a nuestros sentimientos. Así pues, ¿cómo lo logra?

Esta cuestión, que podría parecer fácil de despejar, se resuelve en esta ocasión de la forma más enrevesada posible, y en breves me explico, por medio de la pareja protagonista. Y es que, lejos de situarnos ante un escenario que en cualquier otro anime acabaría en catástrofe para el guion, en esta ocasión nos encontramos ante un elemento que es al mismo tiempo la salsa de esta historia. Y con ello me estoy refiriendo al carácter completamente opuesto de ambos chicos. Con una Sakura totalmente abierta y dicharachera y un Haruki al que le cuesta hacer amigos. Tanto que cuando lo conocemos ha optado por cortar contacto con el resto del mundo hasta prácticamente convertirse en un ermitaño que se refugia en sus libros. Lo que por un lado le sirve para ganarse el desprecio de buena parte de sus compañeros de clase y por el otro no le impide trabajar en una biblioteca. Cosa cuanto menos curiosa pero que nos sirve para establecer un límite en lo que respecta a su nivel de distanciamiento social. Siendo en este caso los libros su último hilo de unión con el resto de la sociedad. Lo cual tampoco es una exageración por mi parte, al ver como será gracias a uno de ellos, en este caso un diario, que el chico conozca por primera vez a Haruki. Y digo por primera vez porque, aunque ya eran compañeros de clase, no será hasta ese preciso momento cuando el joven establezca una conversación con ella.

Aunque no lo parezca, Sakura no es de las que se vayan a quedar precisamente quietas ante las injusticias. Lo cual puede llevarnos a pensar a posteriori si lo que le ocurre más adelante pudo haber sido fruto de su temperamento o una simple coincidencia :P

Un primer encuentro que, siguiendo con el camino establecido desde el primer momento, servirá para desvelarnos, del tirón y sin rodeos, el motivo por el que la vida de Sakura está próxima a su fin. Una revelación tan directa que nuestro protagonista la tomará con pinzas sin necesidad de que su personalidad tenga que decir la última palabra. Pues otra cosa bien distinta es ver cómo, tras ese primer encuentro, el joven trata por todos los medios de distanciarse de la chica sin conseguirlo. Como sabéis los polos opuestos se atraen y esa es, tanto por activa como por pasiva, la mecánica que hará que la vida de ambos chicos confluya en un mismo camino durante el resto de la película. Formando así parte de un todo que nos llevará a descubrir los puntos fuertes y débiles de cada uno por medio de la improvisada amistad que surge entre ellos. Lo cual a su vez nos descubrirá la vertiente de Haruki que no le teme a decir la verdad y a una Sakura a la que, consciente de su enfermedad, todavía le quedan muchas cosas por hacer. Y esto, aunque no lo parezca, dará pie a una relación de amistad en la que ambos chicos se acabarán sintiendo cómodos mientras el resto del mundo, y más concretamente sus compañeros de clase, dan por hecho que mantienen una relación amorosa. Y aquí, amigos míos, es donde estará la otra cara de la moneda; la de los compañeros de clase.

Porque si bien hasta entonces estos personajes secundarios habían pasado desapercibidos, a partir de ese momento, e impulsados por sus propios intereses, pasarán a un plano más activo al interactuar con nuestros protagonistas. La compañera super protectora, el novio celoso, el joven que trata de entablar amistad con el bicho raro de la clase, los cuchicheos que dan buena cuenta de la gran novedad... todo esto ocurrirá a raíz de esa nueva amistad bajo el único prisma posible para ellos, el de la existencia de una relación, sin que nuestros protagonistas parezcan tener ni voz ni voto en todo ello. Tanto da lo que digan o lo que hagan, las cartas ya han sido echadas y, como era de esperar, este tren descontrolado se la acabará pegando en algún momento. Lo cual tampoco es que afecte en demasía a Sakura y Haruki, ya que, si bien la primera tan solo intenta disfrutar de su tiempo lo mejor posible, el segundo, marcado por su personalidad distante, intentará permanecer alejado de todo este "ruido de fondo".

En la imagen Kyouko montando uno de sus numeritos junta a nuestros protagonistas.

No obstante, y dejando a un lado los problemas que tendrán que sortear nuestros protagonistas, lo más interesante de todo es comprobar la solidez de la trama ante la que nos encontramos. Y es que, si bien es cierto que no llegaremos a empatizar con ninguno de ellos, al menos así fue en mi caso ante la personalidad de Haruki y el desparpajo con el que Sakura afronta la vida, también lo es el hecho de que, tanto la historia que se nos cuenta como los personajes que vemos en pantalla, resultan sumamente creíbles. Lo cual le aporta a la cinta la solidez necesaria para que esta no se acabase yendo al garete. Cosa a tener todavía más en cuenta cuando vemos como el único personaje que parecía ajeno al mundo que le rodeaba acaba sufriendo también su correspondiente evolución debido a los sucesos vividos. Un toque de notoriedad al trabajo realizado por los chicos del Studio VOLN que en esta ocasión nos estará esperando en las escenas post-crédito para poner la guinda a su labor.

Lo cual tampoco debería de alarmar a nadie a la vista de cómo esta película cumple con cada uno de sus objetivos y como la historia que encierra se nos presenta de una manera tan amena e interesante que nos resultará prácticamente imposible de escapar a ese trágico y anunciado final que nos mostraban al comienzo de la cinta. Y eso, amigos míos, dice mucho de la gran labor que se ha realizado a nivel de un guion al que tan solo le he encontrado un fallo de lo más nimio. Que el protagonista describa a Sakura en la recta final como chistosa cuando nunca se nos da pie a que se llegasen a conocer tan profundamente como para hacer esa observación. Una verdadera tontería que no llega ni tan siquiera a dejar una mancha en esta hermosa historia.

Ojo, cuidado, que nos metemos en terreno pantanoso XD

> Animación y música.

Dentro ya de los apartados técnicos nos encontramos con una obra que aprueba sobradamente en ambos aspectos. No en vano la calidad y el trabajo puesto en el apartado visual está a la altura de las grandes producciones, por lo que no es de extrañar que algunas de las escenas que encierra nos causen sorpresa, ya sea por el fantástico 3D que se gasta como por un dibujo más tradicional y al que no le tiembla lo más mínimo el pulso a la hora de cambiar de registro. Por lo que a este respecto tan solo me falta señalar a algunas de las compañías que han participado en este proyecto para acabar de apuntalar mi exposición; Maru Animation, SANZIGEN Animation Studio, Tezuka Productions, MADBOX, Beijing Xie Le Art Co., Ltd., Millepensee, Nakamura Production, Signal.MD, WHITE FOX, A-1 Pictures, CloverWorks o J.C. Staff. Quedando la labor de 3D en manos de Chiptune y WELZ Animation Studio.

Por su parte, la banda sonora de Hiroko Sebu también cumple a la perfección con su cometido. Estando tal vez la nota discordante en esa elección de temas principales que tiran hacia el pop y el rock japonés. Aunque esto último, obviamente, es una apreciación personal de quien escribe estas líneas en base a sus propios gustos musicales. Ergo, no os lo toméis al pie de la letra :P Los temas a los que hago referencia son el "Fanfare" de Sumika que podemos escuchar al comienzo de la cinta, las canciones "Himitsu (Movie Ver.)" de Sumika, "Partir" de Bonjour Suzuki y Summer Cider de 条生彩乃. que la acompañan y el tema "Haru Natsu Aki Fuyu" de Sumika que se escucha al final de la misma.

El trabajo realizado a nivel de 3D deja patente la profesionalidad y el buen hacer de cuantos participaron en él.

LA NOTA:

Como habéis podido comprobar, por un lado, me he quedado sin gran cosa que decir en este apartado después de lo expuesto en el resumen de la cinta y, por el otro, que la valoración de la misma está más que cantada. Y por ese mismo motivo hoy voy a ir directo al grano mientras me pongo unos tapones en los oídos para no escuchar los vítores de mi compañero de aventuras D.R Ferro. Aunque antes de ello me gustaría hacer dos últimos apuntes. El primero que la ciudad que vemos en pantalla está basada en las ciudades de Takaoka e Imizu y el segundo que la película hace referencia visible a la novela El principito del francés Antoine de Saint-Exupéry. Aunque en mi caso no he visto similitud o nexo de unión entre ambas obras al carecer la cinta de "críticas a las cosas "importantes" y al mundo de los adultos". Y si me equivoco hacédmelo saber en los comentarios. Que para eso están :D

Dicho lo cual paso a desvelaros que Quiero comerme tu páncreas escala por méritos propios a la A de nuestro sistema de valoraciones. Obteniendo así una nota que no debería de sorprender a nadie que haya visto la película.