AÑO 5
En el día de hoy vamos a retroceder siete años en el tiempo para rescatar a uno de los animes que ya me había dejado un amargo sabor de boca en su día. ¿Y por qué hago esto? Pues porque, por aquel entonces, aún no sometía a las series a un análisis (vamos, que las veía sin preocuparme demasiado por saber la historia que había detrás ni la coherencia de su argumento) y porque ya hecho de menos a Production I.G. Y ya sabéis el dicho, si Mahoma no va a la montaña la montaña irá a Mahoma. Así que sentaos cómodos porque hoy tenemos lectura para rato con...
"Otro ejemplo más de que una buena idea no va a ninguna parte si no se sabe utilizar"
Estrenada el 14 de octubre de 2011 y acabada el 23 de marzo del año siguiente, Guilty Crow es un anime original perteneciente a uno de los estudios de animación que a día de hoy tengo en más alta estima y de los que mejor conocemos en este blog: Production I.G. Como demuestran obras como La isla de Giovanni, Psycho-Pass, Ataque a los titanes, SUISEI NO GARGANTIA o 009 RE:CYBORG. Pero volviendo al trabajo que nos ocupa, nos topamos conque éste está encajado dentro de los géneros de la ciencia ficción, el drama y la acción. Contando de partida con elementos que ya nos han dejado ante gratas sorpresas en el pasado, por lo que la labor de Araki Tetsuro (director), Hiroyuki Yoshino (compositor de la serie) y los guionistas Hiroyuki Yoshino, Ichiro Okouchi, Jin Haganeya y Yosuke Miyashiro no parece ser tan complicada como para hacernos sospechar que estamos ante un choque de trenes. Pero no especulemos antes de tiempo y veamos de qué va esta historia.
> Sinopsis:
La historia de Guilty Crown empieza en el 2029 cuando el virus extraterrestre llamado "Apocalipsis" se extiende y hunde Japón en un estado de caos conocido como "Lost Christmas" (La Navidad Perdida). Después de la tragedia una organización internacional conocida como GHQ (Cuartel General) interviene aplicando la ley marcial y restaura el orden a Japón a costa de su independencia.
Diez años después en 2039, Shu Ouma un joven de instituto de 17 años, conoce a Inori Yuzuriha, la vocalista de Egoist, un popular grupo, mientras visitaba uno de sus sitios favoritos de camino a casa. En este encuentro, Shu descubre que Inori es miembro de los Undertakers, un grupo de resistencia cuyo objetivo es liberar a Japón del GHQ. Shu empieza a tomar parte en las acciones de los Undertakers cuando obtiene accidentalmente El poder del Rey. Esta "marca" le otorga el poder de materializar el corazón de las personas en armas y utilizarlas a voluntad. (fuente: Wikipedia)
> Personajes:
> Ouma Shuu es el protagonista de esta historia y el primer personaje con problemas que veremos en esta historia. Aunque, en su caso, estos se ciñan a una importante dificultad para poder socializar con otras personas que, en mi opinión, debería de haberse tratado hace tiempo con un psicólogo. Cosa sumamente evidente y que curiosamente no le impedirá desarrollar el papel que le corresponde en esta historia. Y ya no entro en valoraciones de ningún tipo para no chafaros el análisis XD
> Inori Yuzuriha es la chica misteriosa de turno. Pues se conoce que en toda obra que se precie tiene que haber una y cuanto más se ciña a su papel mejor que mejor. Cosa que no deja de ser curiosa ya que su doble vida no podría ser más chocante con esa carrera de cantante de éxito que compagina. En fin, que esta ha sido la decisión de los chicos de Production I.G y a mí ya solo me queda resaltar el hecho de que, con tanto misterio, se acaba asemejando a la personalidad de nuestro protagonista en los primeros compases de la serie.
> Haruka Ouma es la madre de Shuu y uno de los pilares de la serie. A pesar de su papel de madre inepta, despreocupada y juerguista que pasa todo el día y parte de las vacaciones en su puesto de trabajo. El cual, como no podría ser de otra manera para enredar más las cosas, jugará un papel destacado por formar parte del tinglado que han montado "los malos".
> GHQ, o "los malos" de la película, son las siglas de una organización que se dedica a investigar el peligroso virus que amenaza con acabar con la humanidad. Labor ésta que compagina con su faceta de contratista militar haciendo que, al final, todo lo que ocurre en Japón quede en casa. O más bien en la suya, ya que el poder que tienen sobre el país del sol naciente es prácticamente absoluto.
> Gai Tsutsugami es el líder de un grupo rebele llamado Los Enterradores y el genio de la serie. Pues no hace falta mucho tiempo con él para saber que no hay nadie que planifique mejor las cosas. Cosa que nos puede recordar a otros personajes del anime con la diferencia del papel que le tocará desempeñar al final de la serie.
> Mana Ouma es la hermana de Shuu y uno de los personajes conflictivos de la serie por el peligro que ésta representa. Eso sí, no sabremos de ella hasta superada la mitad de la serie y aun tardaremos más en conocer todos los lazos que tiene con otros personajes así como el motivo que la lleva a ser lo que es.
> Ayase Shinomiya es la piloto del único mecha que tienen Los Enterradores y una chica que ha sabido superar su discapacidad a base de demostrar su valía dentro de esta organización. Lo cual no le quita el hecho de quedar como un personajes extraño, pues ya me explicaréis sino cual es el motivo para incluirla en esta historia, a la vista de la evolución que tiene en la misma, si no ha sido otro que el de recibir algún tipo de subvención para hacer el anime.
> Argo Tsukishima es el malote de Los Enterradores y otro de los personajes que pasarán por esta historia sin pena ni gloria dándonos intermitentes momentos de acción.
> Kenji Kido es el terrorista al que Los Enterradores sacan de una prisión de alta seguridad como parte del plan que marca Gai. Pasando así de ser alguien despreciable para nuestro protagonista a un cero a la izquierda antes de hacer su aparición final del lado de los malos. Vaya, creo que me debí quedar dormido en algún capítulo porque esta evolución no la acabo de entender XD
> Makoto Waltz Segai. Toda obra tiene su payaso. O al menos eso debieron de pensar los chicos de Production I.G a la hora de crear a este personaje, puesto que su locura va a juego con su aspecto. Y aquí es donde jugamos a las escondidas pues, mientras descubrimos su sobresaliente desempeño a la hora de manejar las situaciones, no seremos conscientes de cuán grande es su locura hasta que llegue el final.
> Daryl Yan es el rubiales de la historia y un egocéntrico engreído de mucho cuidado. Y no lo digo yo, sino él mismo con su forma de actuar. La cual, ya que estamos, dejará mucho que desear a medida que avancemos por la serie, dando más bandazos que un coche de choques. Y a parte de esto es el hijo del jefe de la GHQ.
> Shuichiro Keido es el personaje que adquirirá mayor relevancia al final de la serie. Cosa que tiene fácil ya que no será hasta pasada la mitad de la misma cuando haga su verdadera actuación. Y como ocurre con otros personajes, éste también guarda un grado de parentesco con otros, como es el caso de Haruka o el padre de Shuu.
> Souta Tamadate es uno de los compañeros de colegio de Shuu. De carácter un tanto arrogante, este joven intentará establecer amistad con nuestro protagonista de la forma menos oportuna posible para, una vez hecha, dar lugar al acontecimiento que marcará la vida de Shuu.
> Hare Menjo. Al igual que Souta, Hare acude a la misma clase que Shu aunque con una evidente diferencia. Y es que entre ambos sí existe una relación de amistad previa. Lo cual choca en parte gracias a los problemas de nuestro protagonista y al hecho de que la posición de superioridad que tiene en esta amistad no consigue que le exprese sus sentimientos. Cosas de los japoneses, a mí no me digáis nada XD
> Yahiro Samukawa es el último de los compañeros de clase de nuestro protagonista y uno de los personajes que más sorpresas nos deparará a la vista de la actitud que nos muestra en los primeros compases de la serie.
> Arisa Kuhouin es la presidenta del consejo de estudiantes del colegio al que acude Shuu. No obstante su aparición pasa de ser anecdótica a convertirse en uno de los personajes secundarios más importantes que veremos en pantalla. Quedando ya en vuestras manos el hecho de juzgar su papel en esta historia.
Ante este escenario, una persona normal y corriente optaría por hacer caso de lo que le dice la ley y pasar página, que más o menos viene siendo lo contrario de lo que hace nuestro protagonista para no dejarnos sin anime. Y prestad atención, porque a raíz del viaje que emprende Shuu conoceremos datos tan importantes como que nuestra valiente luchadora había robado una muestra del genoma Void que parece ser sumamente peligrosa, o que la joven pertenece al grupo rebelde encabezado por Gai. Un joven apuesto que parece haberse ganado cierta reputación, en las zonas conflictivas de la ciudad, a base de repartir tortas. Y todo ello sin dejar de corroborar una de las cosas más curiosas de este anime, el que los mechas que en él se ven sean controlados a distancia, por personas que se meten en una especie de cápsula y que puedan sentir el daño que reciben estas máquinas. Curioso, ¿verdad? Pues esperad a ver el final y como Shuu, ese chico con graves problemas para socializar, consigue un poder inmenso sin tener pajolera idea de lo que pasa. Vamos, más o menos como nosotros XD.
Enlazado por lo visto un episodio anterior, el capítulo tres comienza mostrándonos el gran cambio que sufre la vida de nuestro protagonista sin molestarse en explicarnos porque Roppongi paga el pato de todo una vez más (hola Speed Grapher XD). Pero volviendo al episodio, nos encontraremos con un nuevo enemigo (una especie de sicario que parece ser un fuera de serie por la explicación que nos dan), ante un cabo suelto que hará que el problema de socialización que tiene Shuu vuelva prácticamente al punto de partida y ante más terminología que intenta explicar el mundo de la serie. Como es el caso del Gen Norma, una droga bastante popular que fue descubierta, de manera accidental, durante el desarrollo de la vacuna del virus Apocalypse. Y ya que estoy sacando los datos a la palestra no está de más a ver cómo funciona el nuevo poder de Shuu en base a las reglas que aquí se nos dan:
1. Los voids solo se pueden extraer de personas que tengan diecisiete años o menos.
2. Cuando se le extrae un void a alguien, éste pierde la memoria durante ese período de tiempo.
3. Cuando extraes un Void es necesario mantener contacto visual con la "víctima".
Pero ¿qué son los voids y porque tienen tantas formas? Tanto los voids como su forma son un reflejo de los miedos y complejos de una persona. Siendo algo así como una forma de su corazón. Y ahora que sabemos eso, es momento, o eso creo, de recordar el poder de Gai. Porque resulta que este personaje tiene la cualidad de ver los voids de otras personas. ¿Cómo? A saber, pero sin duda alguna estamos ante un misterio similar al que a todas luces guardar la "rarita" de Inori y que en algún momento nos lo han de desvelar si es que Shuu sale vivo del final de este episodio XD
A Nintendo esta imagen no le hizo ningún chiste XD
Con Shuu en las garras del enemigo, el capítulo cuatro nos descubre las razones por las que el episodio anterior acababa de esa manera. Mostrándosenos con ello un escenario bastante más sombrío del que pensábamos y en el que el virus Apocalypse no ha sido completamente erradicado. No obstante, y aparte del papel que desempeñará el sicario del comandante Segai, para en revesar un poco más las cosas y desconcertar a Shuu, este episodio nos enseñará la operación ideada por Gai para sacar a un peligroso preso del mismo edificio en el que se encuentra retenido nuestro protagonista. Y todo ello por el Void que este asesino posee y que aún sigo sin saber para qué lo querían. Pues al final Shuu consigue zafar gracias a Inori. Y aún voy un poco más allá, puesto que si el plan era sacar al delincuente para que luego Shuu hiciese su numerito, ¿cuándo iban a sacar a Shuu de la cárcel? XD. Pues vaya usted a saber, pero lo que queda claro es que la instalación médica que se nos enseñó se fue a la mierda. Cuanta responsabilidad, ¿eh? XD
Con Shuu ya dentro de cuartel general de Los Enterradores, el capítulo cinco nos presenta un panorama que no dista mucho del que se dibujaba en Eureka Seven, con un protagonista al que le dan la espalda de repente (y de la forma más exagerada de lo que lo hacía Eureka) y que no tiene a nadie en quien confiar. Por lo que este respecto Shuu se tendrá que enfrentar, desde un punto de vista sentimental, a su situación más complicada. No obstante, este duro golpe nos permitirá conocer mejor al resto de los hombres de Gai. En un preámbulo que busca entrenar a Shuu para que sea capaz de derrotar a Ayase. Y digo yo que menos mal que antes van puliendo sus diferencias (a cuenta, eso sí, de dejarnos ante otro misterio que implica a Gai y a Inori), porque si no iba a ser buena con el estado mental en el que se encontraba nuestro protagonista XD
Tras revelarnos de una vez lo que era el Leucocyte, el capítulo seis nos traslada a la misión que Gai pone en marcha con el propósito de destruir este as del enemigo. No sin antes, eso sí, enfrentarse a la posición que le hará Shuu y verse "obligado" a revelarle más información sobre su persona. Pero volviendo al episodio y dejando de lado la súper arma que tendrá en esta ocasión nuestro protagonista, estos veinte minutos me plantean la duda de saber por qué diablos fallaron las comunicaciones, si resulta que el protagonista espacial no era el responsable de las mismas. Misterios, amigos, misterios como el que se vislumbra al final o el de que Shuu pueda ver, desde el comienzo del anime, partes de lo que parece ser el pasado de las personas. Cosa curiosa y que se me había traspapelado hasta ahora al hablar de otras, pero a la que han de dar alguna explicación si quieren mantener la coherencia de la historia. Ah, y para terminar tan solo decir que este episodio marca un punto y aparte en la misma. Eso o han fusionado parte del ending con el capítulo para hacer la gracia XD
Una de las máximas no escritas de la animación nipona es la de que hay que cumplir siempre con el fanservice. Ya sea enseñando bragas, marcando pecho o usando trajes de látex sin venir a cuento XD
Recuperando el típico episodio de las vacaciones en la playa, porque es lo que es por más que le pese a los guionistas, el capítulo ocho trata de disimular su condición con una misión de Los Enterradores para recuperar la piedra que habría desencadenado toda la tragedia del virus Apocalypse. ¿Por qué lo hacen? Pues porque pueden, supongo, porque el episodio tampoco es que de muchas pistas al respecto. Y mientras esto sucede se nos introduce a un nuevo y misterioso personaje cuyas intenciones no parece ser muy buenas que se diga, Keido, y se nos deja ver cómo Shuu empieza a pulir sus problemas de socialización.
Después del episodio veraniego, el capítulo nueve recupera al traidor de Yahiro para dejarnos ver el calvario por el que está pasando este personaje y, de paso, lograr que comprendamos los motivos por los que actuó de la manera en la que lo hizo. Pero dejando esto a un lado, que algo tendréis que descubrir por vuestra cuenta, paso ahora a centrarme en una de las cosas que más me han llamado la atención de lo que llevamos anime: ver cómo Yahiro evita que Shuu extraiga su Void. Pues no hace falta ser un lince para preguntarse por qué nadie más se defendió de él. Curioso, ¿verdad? Pues ya puestos a sacar rarezas, ¿qué me decís del idiota del americano? Porque yo creo que no podían haber puesto un personaje más tonto en un puesto de tanto rango. Y para terminar os dejo con el dato más interesante del capítulo: el Lost Christmas. El evento que sucedió el 24 de diciembre de 2029 y que cambió para siempre Roppongi y el resto de Japón.
Tras nueve episodios de relativa calma, el capítulo diez supone un punto de inflexión la trama. Con un Shuu que pasa por uno de sus peores momentos justo cuando se pone en marcha el plan de Keido. El cual, ya os lo adelanto yo, la va a liar buena. Aunque claro, nada de esto me explica el motivo por el que este científico roba la piedra si luego se la va a entregar a los mismos que la tenían. Porque por si no lo sabéis, la GHQ es quien corta el bacalao en este mundo. ¿En serio hacía falta montar todo este numerito?
Continuando con lo visto en el episodio anterior, el capítulo once pone en escena a la madre de nuestro protagonista mientras su retoño toma al fin una decisión. Venciendo con ello prácticamente a todos sus miedos a interactuar con la gente. No obstante y si la cosa parecía ir sobre ruedas, no será hasta la recta final cuando se cumpla ese dicho de ir de Guatemala a Guantepeor, con la mágica aparición de un personaje que se nos había mostrado de aquella manera previamente y la reanudación del verdadero plan de Keido. Dejándonos así ante un panorama de lo más interesante para nuestros personajes. Pero antes de pasar página, que ganas no me faltan, dejadme destacar uno de los misterios que me vienen carcomiendo desde hace unos cuantos episodios: ¿por qué el rostro de Shuu aparece difuminado en las imágenes de vídeo? Porque yo no encuentro sentido e Íker seguro que se va a poner las botas XD
El episodio de los recuerdos, porque a eso se reduce el capítulo doce, nos descubre, al fin, el pasado de Shuu. Resultando ser más importante de lo que cabría imaginar, dada la relación que ya tenía por aquel entonces con Gai y, sobre todo, por el papel que juega su, hasta ahora desconocida, hermana Mana. No en vano esta chica es determinante, tanto para entender la tragedia del Lost Christmas como para asimilar la presencia de Inori en esta historia. Pero dejando esto a un lado, que os va a tocar a vosotros descubrir lo que pasa, lo más llamativo del propio episodio son los epic fails que nos deja. Y es que, al parecer, sería la propia Mana la desencadenante del Lost Christmas, dejando poco más que en ridículo esa piedra tan peligrosa y a la cual le habían echado todas las culpas hasta este momento. Claro que sí, guapi. Pero eh, no os vayáis aún porque la actuación de Gai y su Void es para dar de comer aparte y con razón, puesto que hasta ahora la relación causa-efecto entre los voids y las "víctimas" de Shuu era bastante clara: todos caían en un estado de pérdida de consciencia y no se acordaban de nada. VRA-BO Production I.G, VRABO por pasarte por los huevos tus propias normas. Aunque ojo, porque si pensabais que esto era motivo más que suficiente para mandar todo tomar por culo, los guionistas aún se toman la licencia de arrimarse a la mismísima Neon Genesis Evangelion. Presentándonos al Lost Christmas como si del primer impacto de la obra de Anno se tratase y dejándonos ante claras referencias a la Biblia y a esa unión matrimonial en la cual nacería una nueva humanidad. LOL. Me sé de un estudio que si se entera antes los demanda XD
La ciudad de Tokyo hecha unos zorros después de la ley del suelo de Aznar.
Situado dos meses después de los acontecimientos que veíamos un episodio anterior, el capítulo trece marca el comienzo de una historia completamente nueva: con Los Enterradores separados, un Shuu que vuelve a las dudas sobre su poder sin motivo aparente y la falta del líder que hasta ahora venía sus sustentando toda la historia: Gai. Dibujándose así un escenario propicio para que surjan todo tipo de problemas. Por desgracia, este bonito e interesante escenario no tarda en irse al traste gracias a tres ZASCAS como templos: el de ver a Ayase y a Tsugumi en el instituto como si de unas alumnas más se tratase (y ojo que esta última va caracterizada de gatito que da pena), el de ver a todo el grupo de "amigos" de Shuu y a él mismo formar parte del consejo escolar (que digo yo que debió de haber algún golpe de estado o algo en este colegio porque sino no entiendo nada) y, cómo no, el de ver como nuestro protagonista va dando los voids a sus propietarios para que puedan descubrirlos por ellos mismos. Siendo éste un hecho que se resuelve, argumentalmente, de la manera más lamentable posible. Porque si ya había colado con Gai, porque no iba a hacerlo ahora, ¿verdad Production I.G? ¿Verdad? Ah! y que no se me olviden las dos perlas de estos veinte minutos, ya que por una parte veremos al rubiales como otro alumno más del colegio de Shuu (venga! Que no pare la fiesta!) y por el otro nos despediremos viendo al que yo juraría que es el padre del rubiales. Sí, el mismo que estaba muerto. ¡Otra ronda de sake, camarero! ¡Hic!
Con el colegio aislado, el capítulo catorce nos enseña la rebelión más estúpida que se ha visto en años, gracias al hecho de que los malos optaron por conseguir el control del consejo escolar sin hacer uso de sus armas. Que malos más malos, ¿eh? Y mientras este panorama se va dibujando, en el exterior el gobierno japonés, liderado por el tal Keido (sí, metí la pata y lo confundí. Pero ya me explicaréis como sobrevivió este personaje al capítulo doce, porque lo tenía más complicado aún que el padre del rubiales), toma la decisión de reducir la zona en cuarentena al más puro estilo del episodio uno del Half-Life 2. Aunque la sorpresa no es ésa realmente, sino la de ver cómo la madre de Shuu parece trabajar a las órdenes de Keido. Todo muy coherente después de lo visto en su última aparición y que va a juego con el hecho de que los estudiantes se den cuenta al fin de las dos intrusas (menos mal, no era sin tiempo XD) y el que ahora Shuu sea capaz de sacar los voids sin necesidad de ver a la persona.
Con el festival de Voids en pleno apogeo, nuestros protagonistas se enfrentarán, el capítulo quince, al problema derivado de la escasez de vacunas (que ya me preguntaréis por qué se están vacunando, ya que todo lo que nos indicaba la trama al respecto era que esto lo hacía el GHQ como parte de su farsa). Aunque claro, como los problemas vienen solos a éste se le sumará el que aporta Yahiro por su cuenta, creando así el caldo de cultivo perfecto para el drama que veremos y el cambio de personalidad que sufrirá Shuu. Lo cual no deja de ser curioso, a la vista de cómo han tratado hasta ahora la trama. Pues aun no entiendo como les puede funcionar la parte "sentimental". Y ya puestos a sacar misterios, ¿qué me decís del rubiales y su técnica de ahora estoy en el cole y ahora no? Ni el mismísimo Juan Tamariz, vamos XD
Con el circo del anterior episodio a pleno rendimiento, el capítulo dieciseis nos trae de vuelta a Argo para que, junto a él, seamos testigos de la cara mala de la moneda que tiene Shuu en sus manos. Lo cual nos permitirá ver el verdadero objetivo de todo esto y nos sorprenderá al ver como Shuu aún se nos pone sentimental a estas alturas de la historia. Ver para creer. Eso sí, no le quitéis ojo a lo que sucede, ya que la trama promete traernos fiesta en el próximo episodio. Y menos mal, porque los errores siguen estando el orden del día. Fijaos sino en como a unos los deja inconscientes al sacarles el void y a otros no, en el papel de la madre de Shuu y, sobre todo, en el Inori, ya que son dignos de someter a estudio. Empleando así el tiempo en algo productivo ahora que sabemos el motivo real de la muerte de Haru. Si es que aceptáis el hecho de que esta explicación también es para ella y dejáis de lado la importante pérdida de sangre que tenía en ese momento, claro XD
Con una historia tan bien planteada como la que estamos viendo, el capítulo diecisiete da un paso al frente para mostrarnos cómo ahora es Yahiro quien nos viene con el cuento de que Shuu se está pasando de la raya. Para mear y no echar gota, oiga. Ya que realmente no tenemos que retroceder tantos episodios para poder ver cómo era el mismo quien planteaba el sistema de clasificación por Voids y se convertía su mayor defensor. Claro que no será el único en darnos una sorpresa, como nos permite ver la propia Arisa con ese giro de 180° que da, mental y anímicamente, en los 20 minutos de este episodio. Y es que no recuerdo haber visto una recuperación más rápida que ésta en todos los años que llevo viendo anime. Y para cerrar esta espiral de "destrucción guionística" nada mejor que mostraros la bipolaridad que padece Shuu (pues pasa de importarle todo una mierda a ser la persona más amable y preocupada del mundo en menos de lo canta un gallo), la actuación de los "ahora soy malo, ahora no y te digo que me pagan pero no quien", o esa caída de la torre de Tokio (que por cierto se tuvo que ver que ya iba vieja, porque si no…). Y la guinda, por si alguien la pedía, es para la reaparición de Gai. Qué digo yo que ya podían haber puesto por medio a un Terminator. Que queda igual de bonito y desvía mejor la atención a la hora de abordar la tarea de cargarte toda coherencia de la trama :D
¡A un euro, señora! ¡Bragas a un euro! ¿Y por qué empiezo diciendo esto? Pues porque estamos, con diferencia, ante el peor episodio de toda la serie. Pero vayamos por partes, que el capítulo dieciocho da para mucho. Como ya nos deja ver nada más comenzar, recordándonos que Shuu estaba gravemente herido y sigue pataleando como si tal cosa para, a continuación, mostrarnos el vuelo más bajo que ha hecho un bombardero B-2 en toda su historia. Vamos, que no sé porque le llaman bombardero cuándo se puede estrellar directamente contra el objetivo de lo bajo que va XD. Y si esto os parece gracioso esperad a ver el ridículo que hace ahora el rubiales, echándole la culpa del asesinato de su padre a Gai. Sí señor, a esto le llamo yo tergiversar los hechos y no a lo que hace el PP. Y como vamos fuertes, ahora resulta que hay 256 satélites Leucocyte en el espacio (calculo yo que debieron de aprovechar la oferta de 80x1 para ponerlos en órbita, porque sino no me dan los plazos), que hay una organización secreta llamada Dáat que es más antigua que la masonería y el sionismo (dios, los gramos de coca que se metieron en las oficinas de Production I.G) o que la madre de Shuu no se arrepiente de lo que le ocurrió a su hijo porque, y cito textualmente, "ahora estás libre del destino del rey". Coño, si eso para la próxima le cortamos la cabeza y nos quitamos a un quejica de medio, ¿no? Y esperad que aún falta la actuación de Arisa. Fantástica y maravillosa, off course XD. Pero entonces ¿no se salva nada de este el capítulo? Bueno, yo no diría tanto, ya que a estas alturas la única que aún actúa manteniendo cierta coherencia es Inori. Pero claro, los de Production I.G no pudieron contenerse y tuvieron que meterle poderes a última hora. ¡Por favor!
Con skynet dominando prácticamente todo el planeta… Vaya, esto no es de esta historia. Aunque no me diréis que no quedaba mejor que lo que vemos en el capítulo diecinueve. Porque estos veinte minutos no solo no dan continuidad a lo que veíamos con anterioridad, sino que siguen incrementando el número de fails hasta llegar al punto del colapso. O al menos esa es la sensación que tengo yo después de ver cómo la madre de Shuu vuelve a cambiar de parecer para ayudar a su hijo (pero no quedábamos en que ya lo había ayudado), como Shuu y Arisa nos dejan ante un espectáculo deplorable, en el que resulta que quien tiene el arma debe de cumplir con las peticiones del secuestrado (si se enteran de esto los yankies chapan en el chiringuito) o donde el chiflado de Segai se logra infiltrar en el refugio de Los Enterradores para que podamos ver cómo se puede disparar a un blanco inmóvil y descubierto sin darle una sola vez. Good job, guys, good job. Y entonces, cuando ya creíamos haberlo visto todo llega la traca final, con esos saltos de altura propios de Superman, esa entrevista absurda que se venía estirando desde sabe dios ya cuánto tiempo para nada, o la entrada en escena de Shuu. En serio, ¿qué esperaba Haruka que pasase si se hartó de decir que su botín podía matar a los que lo usasen? ¿Condescendencia de los demás? A saber, pero estamos ante un misterio tan grande o más que el que nos deja ahora el loco de Makoto con el fin de "explicarnos" su forma de actuar. ¿Durante toda la serie? Pues yo no lo negaría, más que nada porque los guionistas de Production I.G también intentan, en este mismo capítulo, que comprendamos a Haruka después de revelarnos su verdadero grado de parentesco con nuestro protagonista. Retards, retards everywhere.
Profundizando un poco más en el parentesco existente entre Haruka, Keido y Gai, el capítulo veinte nos lleva al pasado para contarnos la historia que se oculta tras el virus Apocalypse mientras nuestros personajes se preparan para plantar cara a los malos. No obstante y si bien no me voy a quejar de que nos expliquen esto ahora, si voy a exponer dos aspectos que creo son cruciales: que el meteorito de marras no fue el causante del Lost Christmas de forma directa y que yo no sé qué pensará exactamente la gente de Production I.G acerca de los virus. Pero ya os adelanto que, por lo que vimos, es absolutamente imposible que las "semillas" de la serie se hubiesen esparcido por todo Japón. Y sobre la presencia de Dáat en este metraje no voy a decir nada, no vaya a ser que tenga que coger un avión a Tokio. Menos mal que el hecho de ver al padre de Shuu en el mismo lugar que su hijo utiliza como refugio (y lo sé porque está exactamente igual) me alegró el episodio XD
Como ya os dejé caer unos episodios antes, el capítulo veintiuno descubre la farsa de los Leucocyte, justo antes de dejarnos ante el espectáculo de la ONU. Pero dejando las sorpresas para vosotros, lo que me llama realmente la atención de este episodio es el papel que juega Daryl en él (este tipo está loco, pero loco de encerrar) y la revelación que se nos hace de ese personaje que se nos presentaba como Dáat y que ahora nos muestra todo el esplendor de su poder haciendo uso de los voids como si fuese Shuu o Gai. Algo que nos acabará por descubrir a poco más que a un Dios, para poner patas arriba todo lo que se nos había dicho de esta organización secreta. Y es que, si lo pensáis un poco, os daréis cuenta de que antes de la aparición del virus no podía haber existido. Por mucho que la trama se empeñe en hacernos creer que sí. Y todo gracias a la actuación que este personaje tiene en el episodio. Dios, no sé si matar a los guionistas por darles un premio XD
En pleno combate final, el capítulo veintidós nos permite disfrutar que las últimas estupideces de la serie. Como esa danza que nos deja Mana en lugar de cantar, se ve que iba para bailarina pero los guionistas optaron por ocultarlo hasta ahora, o el ridículo que hacen tanto Daryl, con esa meta que ahora tiene por ser un carnicero, como Keido, quien elegirá la vía rápida porque se conoce que el papel de malo se le venía grande. En fin, unas incongruencias que nos permiten ver cómo los personajes no evolucionan lo más mínimo a lo largo del anime, cosa que por otro lado se veía a leguas, y que vienen acompañadas por el destino que le aguardan a otros personajes y, cómo no, por la explicación que da Gai al final del todo. Porque bien es sabido que hay que dar una explicación a todo aunque ésta contradiga tu forma de actuar XD. Por suerte, la aclaración de este personaje sí que nos deja ante la única parte coherente que le encuentro yo a todo esto: la de que estuvieran viviendo en una especie de limbo. Para que os hagáis una idea del fiasco guionístico de esta historia, puesto que esto mismo, a poco que se mire con detenimiento, tampoco es que haya por donde cogerlo. Pero en fin, ¿qué esperabais exactamente al ver cómo termina Mana sin ningún motivo, cómo se viene abajo la torre de Keido por una razón similar y cómo Shuu acaba ciego? Yo desde luego que nada, pues de una borrachera de sake como la que se pegaron los guionistas nunca puede salir nada bueno XD
Con el festival de Voids en pleno apogeo, nuestros protagonistas se enfrentarán, el capítulo quince, al problema derivado de la escasez de vacunas (que ya me preguntaréis por qué se están vacunando, ya que todo lo que nos indicaba la trama al respecto era que esto lo hacía el GHQ como parte de su farsa). Aunque claro, como los problemas vienen solos a éste se le sumará el que aporta Yahiro por su cuenta, creando así el caldo de cultivo perfecto para el drama que veremos y el cambio de personalidad que sufrirá Shuu. Lo cual no deja de ser curioso, a la vista de cómo han tratado hasta ahora la trama. Pues aun no entiendo como les puede funcionar la parte "sentimental". Y ya puestos a sacar misterios, ¿qué me decís del rubiales y su técnica de ahora estoy en el cole y ahora no? Ni el mismísimo Juan Tamariz, vamos XD
Con el circo del anterior episodio a pleno rendimiento, el capítulo dieciseis nos trae de vuelta a Argo para que, junto a él, seamos testigos de la cara mala de la moneda que tiene Shuu en sus manos. Lo cual nos permitirá ver el verdadero objetivo de todo esto y nos sorprenderá al ver como Shuu aún se nos pone sentimental a estas alturas de la historia. Ver para creer. Eso sí, no le quitéis ojo a lo que sucede, ya que la trama promete traernos fiesta en el próximo episodio. Y menos mal, porque los errores siguen estando el orden del día. Fijaos sino en como a unos los deja inconscientes al sacarles el void y a otros no, en el papel de la madre de Shuu y, sobre todo, en el Inori, ya que son dignos de someter a estudio. Empleando así el tiempo en algo productivo ahora que sabemos el motivo real de la muerte de Haru. Si es que aceptáis el hecho de que esta explicación también es para ella y dejáis de lado la importante pérdida de sangre que tenía en ese momento, claro XD
Con una historia tan bien planteada como la que estamos viendo, el capítulo diecisiete da un paso al frente para mostrarnos cómo ahora es Yahiro quien nos viene con el cuento de que Shuu se está pasando de la raya. Para mear y no echar gota, oiga. Ya que realmente no tenemos que retroceder tantos episodios para poder ver cómo era el mismo quien planteaba el sistema de clasificación por Voids y se convertía su mayor defensor. Claro que no será el único en darnos una sorpresa, como nos permite ver la propia Arisa con ese giro de 180° que da, mental y anímicamente, en los 20 minutos de este episodio. Y es que no recuerdo haber visto una recuperación más rápida que ésta en todos los años que llevo viendo anime. Y para cerrar esta espiral de "destrucción guionística" nada mejor que mostraros la bipolaridad que padece Shuu (pues pasa de importarle todo una mierda a ser la persona más amable y preocupada del mundo en menos de lo canta un gallo), la actuación de los "ahora soy malo, ahora no y te digo que me pagan pero no quien", o esa caída de la torre de Tokio (que por cierto se tuvo que ver que ya iba vieja, porque si no…). Y la guinda, por si alguien la pedía, es para la reaparición de Gai. Qué digo yo que ya podían haber puesto por medio a un Terminator. Que queda igual de bonito y desvía mejor la atención a la hora de abordar la tarea de cargarte toda coherencia de la trama :D
Con skynet dominando prácticamente todo el planeta… Vaya, esto no es de esta historia. Aunque no me diréis que no quedaba mejor que lo que vemos en el capítulo diecinueve. Porque estos veinte minutos no solo no dan continuidad a lo que veíamos con anterioridad, sino que siguen incrementando el número de fails hasta llegar al punto del colapso. O al menos esa es la sensación que tengo yo después de ver cómo la madre de Shuu vuelve a cambiar de parecer para ayudar a su hijo (pero no quedábamos en que ya lo había ayudado), como Shuu y Arisa nos dejan ante un espectáculo deplorable, en el que resulta que quien tiene el arma debe de cumplir con las peticiones del secuestrado (si se enteran de esto los yankies chapan en el chiringuito) o donde el chiflado de Segai se logra infiltrar en el refugio de Los Enterradores para que podamos ver cómo se puede disparar a un blanco inmóvil y descubierto sin darle una sola vez. Good job, guys, good job. Y entonces, cuando ya creíamos haberlo visto todo llega la traca final, con esos saltos de altura propios de Superman, esa entrevista absurda que se venía estirando desde sabe dios ya cuánto tiempo para nada, o la entrada en escena de Shuu. En serio, ¿qué esperaba Haruka que pasase si se hartó de decir que su botín podía matar a los que lo usasen? ¿Condescendencia de los demás? A saber, pero estamos ante un misterio tan grande o más que el que nos deja ahora el loco de Makoto con el fin de "explicarnos" su forma de actuar. ¿Durante toda la serie? Pues yo no lo negaría, más que nada porque los guionistas de Production I.G también intentan, en este mismo capítulo, que comprendamos a Haruka después de revelarnos su verdadero grado de parentesco con nuestro protagonista. Retards, retards everywhere.
Profundizando un poco más en el parentesco existente entre Haruka, Keido y Gai, el capítulo veinte nos lleva al pasado para contarnos la historia que se oculta tras el virus Apocalypse mientras nuestros personajes se preparan para plantar cara a los malos. No obstante y si bien no me voy a quejar de que nos expliquen esto ahora, si voy a exponer dos aspectos que creo son cruciales: que el meteorito de marras no fue el causante del Lost Christmas de forma directa y que yo no sé qué pensará exactamente la gente de Production I.G acerca de los virus. Pero ya os adelanto que, por lo que vimos, es absolutamente imposible que las "semillas" de la serie se hubiesen esparcido por todo Japón. Y sobre la presencia de Dáat en este metraje no voy a decir nada, no vaya a ser que tenga que coger un avión a Tokio. Menos mal que el hecho de ver al padre de Shuu en el mismo lugar que su hijo utiliza como refugio (y lo sé porque está exactamente igual) me alegró el episodio XD
Como ya os dejé caer unos episodios antes, el capítulo veintiuno descubre la farsa de los Leucocyte, justo antes de dejarnos ante el espectáculo de la ONU. Pero dejando las sorpresas para vosotros, lo que me llama realmente la atención de este episodio es el papel que juega Daryl en él (este tipo está loco, pero loco de encerrar) y la revelación que se nos hace de ese personaje que se nos presentaba como Dáat y que ahora nos muestra todo el esplendor de su poder haciendo uso de los voids como si fuese Shuu o Gai. Algo que nos acabará por descubrir a poco más que a un Dios, para poner patas arriba todo lo que se nos había dicho de esta organización secreta. Y es que, si lo pensáis un poco, os daréis cuenta de que antes de la aparición del virus no podía haber existido. Por mucho que la trama se empeñe en hacernos creer que sí. Y todo gracias a la actuación que este personaje tiene en el episodio. Dios, no sé si matar a los guionistas por darles un premio XD
En pleno combate final, el capítulo veintidós nos permite disfrutar que las últimas estupideces de la serie. Como esa danza que nos deja Mana en lugar de cantar, se ve que iba para bailarina pero los guionistas optaron por ocultarlo hasta ahora, o el ridículo que hacen tanto Daryl, con esa meta que ahora tiene por ser un carnicero, como Keido, quien elegirá la vía rápida porque se conoce que el papel de malo se le venía grande. En fin, unas incongruencias que nos permiten ver cómo los personajes no evolucionan lo más mínimo a lo largo del anime, cosa que por otro lado se veía a leguas, y que vienen acompañadas por el destino que le aguardan a otros personajes y, cómo no, por la explicación que da Gai al final del todo. Porque bien es sabido que hay que dar una explicación a todo aunque ésta contradiga tu forma de actuar XD. Por suerte, la aclaración de este personaje sí que nos deja ante la única parte coherente que le encuentro yo a todo esto: la de que estuvieran viviendo en una especie de limbo. Para que os hagáis una idea del fiasco guionístico de esta historia, puesto que esto mismo, a poco que se mire con detenimiento, tampoco es que haya por donde cogerlo. Pero en fin, ¿qué esperabais exactamente al ver cómo termina Mana sin ningún motivo, cómo se viene abajo la torre de Keido por una razón similar y cómo Shuu acaba ciego? Yo desde luego que nada, pues de una borrachera de sake como la que se pegaron los guionistas nunca puede salir nada bueno XD
¿Es eso la Lanza de Longinus? XD
> Animación y música.
Saltando ya a los apartados técnicos, el primero que llama la atención es el más visible de ambos, la animación. La cual se nos muestra en esta ocasión con un look distinto al que suele emplear Production I.G en sus trabajos. Mostrándonos un diseño de personajes que tienden al estiramiento, por sus siluetas altas y delgadas, y una elección de color que no resulta la más propicia en ciertas escenas. Dando como resultado la saturación de los colores y la perdida en la definición del dibujo. Vamos, más o menos nos encontramos ante el mismo resultado que veíamos diez años antes debido a las limitaciones que en ese momento existían. Cosa que no es grave, desde un punto de vista general, porque la animación es bastante buena, las cosas como son, pero sí deja bastante que desear para pertenecer al estudio de animación que pertenece. Y si no me creéis no tenéis más que echar mano de la videoteca para compararla con cualquier otro de los trabajos que firmaban por esa época. Aunque claro, cuando se nos da por observar con detalle el cuidado puesto en el dibujo la cosa cambia y mucho. Como nos demuestra el cambio de pelo que sufre Inori de una escena para otra cuando nos enseña sus poderes.
Y sí, alguno correría a echarle la culpa a los estudios que han colaborado en este anime, pero lo cierto es que poco podemos decir del buen trabajo que se ha realizado a nivel de 3D (donde nos encontramos con estudios como Daume u Orange) y poco menos de los que se han encargado de pulir el dibujo original. Participando en esta tarea de 2nd Key Animation viejos conocidos como Artland, GAINAX, Pierrot, Satelight, SILVER LINK o ZEXCS. Por lo que a este respecto no puedo hacer otra cosa que volver la mirada hacia Production I.G y preguntarme a quien le encargaron la tarea de comprobar la calidad del dibujo, o más bien, quien decidió que este era el rumbo a seguir para este apartado técnico.
Y tras esta crítica constructiva, porque repito que a mí la animación me parece correcta salvando esos fallos, me meto de lleno en la banda sonora para llevarme una de las mayores decepciones que he sufrido en mucho tiempo. Y es que, aquí donde lo veis, el apartado musical es, sin lugar a dudas, el peor de los dos e incluso llega a rivalizar con esa penosa trama que gasta la historia. Algo que, dicho así, mismo parece que busca crear la polémica entre los seguidores de la serie, ya que Guilty Crow cuenta con una de las selecciones de canciones más notables que he escuchado en bastante tiempo. Aunque claro, si lo que quisiera fuera liarla parda no habría escrito esa última frase, ¿no os parece? XD Por lo que os invito a dar un paseo por los temas más destacables del anime para que comprendáis el motivo de mi queja. Empezando para ello por los openings "My Dearest" de supercell y "The Everlasting Guilty Crown" de EGOIST para pasar a los endings "Departures ~Anata ni Okuru Ai no Uta~" de EGOIST y "Kokuhaku" de supercell y, finalmente, adentrarnos en algunos de los temas que se pueden escuchar durante los episodios. "BIOS" de Mika Kobayashi, "Euterpe" de EGOIST, "friends" de mpi, "Hill of Sorrow" de mpi, "Home ~in this corner~" de Leina, "Ready to Go" de David Whitaker, "Release My Soul" de Aimee Blackschleger, "Rё∀L" de Cyua y, cómo no, la joya de "Departures" BOOM BOOM SATELLITES Remix -Meteoric Rain-. Un temazo como la copa de un pino y que me lleva a retomar ese proyecto de hacerle un especial a este genial grupo de música japones. Pero como no quiero cerrar este apartado así voy a aprovechar para sacar una de las cosas que me llaman enormemente la atención de este anime: el hecho de decir que Inoah pertenece a EGOIST. ¿Acaso estamos ante una nueva metedura de pata del fansub INSHUHEKI, ante un guiño de algún guionista enamorado o ante una cesión de Production I.G para impulsar a ese grupo de música? Porque os recuerdo que EGOIST existe y que a Inoah no le hacia ninguna falta tener una afinidad con el para desempeñar su papel. Pero en fin, pasemos página de una vez no vaya a ser que me caliente antes de tiempo XD
Uno de los puntos fuertes del apartado visual es el cuidado al detalle que se ha tenido con las nubes.
LA NOTA:
Como habéis podido comprobar, Guilty Crow es una serie difícil de abordar debido a los fallos que la acompañan durante buena parte de la misma. Siendo a partir del capítulo trece donde estas diferencias saltan a la vista hasta el punto de hacernos daño en los ojos. No en vano podemos asegurar, sin miedo a equivocarnos, que a partir de este episodio la gente de Production I.G sustituyó a los guionistas por un grupo de monos. Por lo que, para celebrarlo, paso a destacar los FAILS más memorables de esta obra. Y para empezar nada mejor recordar lo que nos explicaban de los Voids y más concretamente de la muerte y de la forma en la que se pueden "volver a guardar". Porque si habéis estado atentos os habréis quedado con el hecho de que la ruptura de un Void supone la muerte de su propietario y que, si queremos devolverlos a su lugar, no tenemos mas que soltarlos. Sencillo de entender, ¿no? Entonces por qué murió la chica que pone a Shuu en la pista de lo que ocurre cuando se rompe un Void? ¡ZASCA!
Y si pensabais que el anterior fail era imposible de superar en sonoridad, esperar a ver como se desmantela todo lo que tiene que ver con el virus Apocalypse. Porque yo no sé qué tipo de estudio previo hicieron los de Production I.G, pero por lo que se muestra en la serie podemos asegurar con rotundidad que Mana se infectó a raíz de cortarse un dedo con el, a estas alturas, famoso meteorito. Lo cual viene a descartar completamente el hecho de que estemos ante un tipo de virus que se transmite por aire. Pues bien, teniendo esto en cuenta la trama también nos indica que el virus se extendió por Japón por culpa del Lost Christmas, por lo que antes de este suceso nadie podía estar infectado. Y llegados a este punto es donde entran en juego las "super vacunas" que te otorgan poderes y que son creadas a partir de la investigación que se lleva a cabo después del Lost Christmas para detener al virus. Ergo el chico de Dáat nunca pudo tener poderes ni relación alguna con anterioridad a este virus. Y si me salís por la vía de que uno de esos apocalipsis ya había ocurrido en el pasado, pensad por un momento dónde están los demás meteoritos y porque Dáat está tan pendiente de la investigación del padre de Shuu cuando podía haber puesto a otra gente a trabajar en el virus mucho antes. Veis por dónde van los tiros o aun no XD
Pero antes de liquidar este anime, que mucho más no tiene donde rascar, vamos a aprovechar para dar unas rápidas pinceladas por tres de las cosas que a mi juicio acaban de sentenciar esta serie. Empezando por ese vial que se inyecta Keido al final y que claramente no podía ser la super vacuna, recordar que había tres y dos fueron para Shuu mientras que una la usó Gai, continuando por la evidente mezcla de Evangelion y s-CRY-ed que hace la trama y que, por cierto, no hay por donde coger y terminando por ese toque de incesto que le quisieron dar los guionistas quien sabe si para "experimentar". Eh Production I.G (guiño, guiño), eh! Porque no sé vosotros, pero yo estuve tentado de escribir una de mis "famosas" cartas abiertas solo para que esta gente me enviase una botella del sake que se bebieron. Porque otra explicación no le encuentro yo a la presencia de tanta incoherencia argumental.
Reza el dicho que no hay mal que por bien no venga. Y nunca más lejos de la realidad, ya que en este caso Guilty Crow me ha dado el primer motivo de peso que tengo para no echar de menos a Production I.G. Como queda reflejado a la hora de recurrir a nuestro ranking para hacerle entrega de la G que se ha ganado a pulso esta serie.
¿A qué punto Delta pretenden llegar si están a punto de empotrarse contra él?
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